La nueva porrista

La cena con los vecinos

Samira subió a su habitación y se comenzó a arreglar para la cena con los vecinos pero no podía sacar de su mente a este chico. Solo podía pensar en sus ojos y su sonrisa.

Uso una falda de cuadros roja y blanca con un cinturón rojo, una blusa de mezclilla y unas converse rojas. Se arregló el cabello en una media cola y puso algunos pasadores. Cuando estuvo lista bajó a esperar a sus padres que llegaron poco después.

Su madre la miraba con desagrado. -¿Es necesario que uses esos lentes?- hablo mientras pasaba a su lado.

-Pues sí, sino no veo.-

- Ya por favor, suban al auto.- las apuro. -Quiero una noche pacífica.- menciono mirando a su esposa.

Los tres subieron al auto y se dirigieron con los vecinos. A pesar de que era en la casa de al lado llegaron en carro ya que Marjorie estaba usando los tacones más altos que tenía.

Llegaron, una señora muy amable los recibió les dio la bienvenida y lo llevó al interior. La casa era muy bonita y grande al igual que la de ellos.

-Estamos muy contentos de tenerlos aquí.- hablaba mientras caminaban. -Lamento decirles que aún no está todo listo pero en seguida esta.-

-No te preocupes, estamos encantados de poder estar aquí. No conocemos a nadie en Hawkins y es bueno tener vecinos tan amables.- dijo Marjorie que frente a cualquier persona se convertía en la persona más amable y dulce.

Samira caminaba detrás de ellos observando todo lo que había a su alrededor.

-Oh aquí estas.- mencionó estirando su mano para que un chico se acercara. -Él es mi hijo, saluda cariño.-

-Buenas noches, soy Steve Harrington un gusto.- dijo mientras se ponía frente a su madre y ponía sus manos en los bolsillos del pantalón y apretaba ligeramente los labios.

-Buenas noches, que chico tan educado.- tu padre te jalo levemente. -Ella es Samira.- levantó levemente su mano en forma de saludo dando una sonrisa casi imperceptible.

Ambos chicos se quedaron mirando con algo de incomodidad hasta que la señora Harrington habló. -Cariño deberías llevarla al patio para que jueguen pero no sea brusco recuerda que es una señorita.-

Samira se sonrojo ante el comentario. -Si claro. Ven sígueme es por aquí.- caminaron juntos hasta el patio donde ella se quedó a un lado de la puerta mientras él se recostaba en uno de los camastros a lado de la piscina sin decir una sola palabra. Incómodamente Samira se acercó al camastro de al lado para sentarse, se sentía increíblemente tonta ya que este "amable chico" la estaba ignorando completamente.

-Escuche que una niña loca amenazó a Jason Carver con un libro el día de hoy.- dijo después de un rato.

-¿Sí? Pues creo que se lo merecía.-

Soltó una risa sarcástica. -Pelearte con Jason por el freak, no creo que haya sido muy inteligente de tu parte.-

-¿Freak?- dijo un poco confundida.

-Si ya sabes, Eddie Munson.-

-Pues yo no creo que sea un freak.-

Steve puso los ojos en blanco mientras se sentaba en el camastro. -Claro que no piensas que es un freak, solo mírate seguramente eres igual.-

Samira se puso de pie y se acercó a él. -Tú no sabes nada de mí y estoy segura de que tampoco sabes nada de Eddie. Ustedes los niñitos mami piensan que pueden juzgar a todos.- escupió con rabia.

-Tú tampoco sabes nada de mí ¡no soy un niño de mami!- hablo mientras la llevaba a la orilla de la piscina.

-¡No te atrevas!-

-¿O si no qué?- Steve estaba a punto de aventar a Samira a la piscina cuando oyó un grito de que entraran ya que estaba todo listo.

-Te salvaste.- la soltó y se fue a la casa.

-Idiota.- murmuro Samira mientras caminaba detrás de él.

La cena terminó pacíficamente entre platica de los adultos y miradas de odio entre los jóvenes.

Ya de vuelta en casa, Samira se fue a acostar deseando nunca haber conocido a Steve Harrington y rogando por no tener que volver a verlo algo un poco imposible ya que eran vecinos y sus padres al parecer se llevaron muy bien.

Al día siguiente encontró una nota de sus padres, tuvieron que salir y no llegarán hasta muy noche. Le dejaron dinero más que suficiente para hacer lo que ella quisiera.

Mientras comía cereal frente al televisor tocaron el timbre, se levantó un poco confundida a abrir la puerta.

-Hola, soy yo. Espero no te moleste que haya venido.- Eddie estaba parado frente a su puerta con una bolsa de papel en la mano y una sonrisa que le calentó el corazón.

Samira sintió que su cara comenzó a arder cuando recordó que seguía en pijama. Salió corriendo escaleras arriba mientras le gritaba que pasara. Eddie rio un poco y pasó cerrando la puerta a su espalda.

Se cambió lo más rápido que pudo, cepillo un poco su cabello y bajó a ver al chico que la esperaba de pie frente a la puerta.

-Hola, lamento eso. ¿Quieres sentarte?- Dijo apuntando a la sala.

-Claro.- camino a lado de ella. -Y no te preocupes creo que era un lindo pijama.- la cara de la chica se tornó de un rojo intenso. -Quería agradecerte por lo que hiciste ayer, fuiste muy linda y bueno no es mucho pero te traje esto.- Eddie le entregó la bolsa de papel.

-Huele muy rico.- dijo la chica abriendo la bolsa. -¿Galletas con chispas de chocolate? Me encantan, son mis favoritas.- hablaba con emoción mientras tomaba una.

-Las mías también. Espero que te gusten le pedí a mi tío que te las hiciera.- Dijo Eddie con una sonrisa al ver a la chica devorar las galletas.

-Están muy ricas.- ofreció la bolsa para que el agarrara una también.

-¿Tus padres tampoco están hoy?-

-No, tuvieron que salir muy temprano.-

-Si quieres puedo quedarme para hacerte compañía.- sonrió dulcemente.

-Claro, me encantaría. Podemos ver una película.-

Después de pasar casi toda la mañana viendo películas decidieron salir por unas hamburguesas ya que ambos tenían hambre. Tomaron sus bicicletas y fueron al centro de Hawkins.

-Entonces ¿iras a Hawkins Middle School?-

- Si, tengo un poco de miedo, digo faltan 2 semanas para terminar el semestre y yo llego. Seré la nueva que no conoce a nadie.-

-¡Oye tranquila! me conoces a mí y creo que eso es más que suficiente.- Sonrió mientras estacionaban las bicicletas. -Además puedo presentarte a mi mejor amigo, te puedes juntar con nosotros.-

Entraron a Benny's Burgers pidieron algo para llevar y regresaron a casa de Samira, se quedaron platicando hasta que fue hora de que Eddie regresara a casa.

Como dato curioso la casa que puse como la de Samira en el capitulo anterior es la casa que esta a lado de la casa que usaron como casa de Harrington en la serie. 

Espero que les este gustando, la verdad a mi me esta encantando escribir esto. 🥰🥰🥰🥰