-Vaya Samira, nos enteramos de que eres de las nuevas voladoras, felicidades.-
-Gracias, Jason.-
-Si, es increíble, nunca pensé que tuvieras esas habilidades.- Chance me guiño un ojo.
-Bueno pues si las tengo.- conteste incomoda. -¿No se supone que deberías estar con tu novia?-
-Heather y yo terminamos, no te preocupes.- dijo mientras se sentaba a mi lado. -Tenemos el camino libre para lo que tú quieras.-
-Yo... me tengo que ir.- no podía creer lo imbécil que es, Heather estaba en el hospital y el coqueteando conmigo como si fuera a ceder después de lo que pasó entre nosotros.
Después de clases tuvimos un entrenamiento muy pesado, empezamos las modificaciones para la nueva rutina y empezamos a practicar los saltos.
Llegué a mi casa exhausta, como siempre mamá no estaba, hice mi tarea y me di una ducha. Estaba tan agotada que solo me fui a la cama.
Martes
Al día siguiente llegué a la escuela y me sorprendió encontrar unas flores en mi casillero. Las tome no pude evitar sonreír, nunca nadie había tenido un detalle tan lindo conmigo por un momento pensé que podría ser Eddie disculpándose hasta que sentí que un brazo rodeaba mi cintura y me acercaba a él, reconocí de inmediato su colonia y me tense intentaba separarme de él.
-Chance ¿qué estás haciendo?-
-Veo que te gusto mi regalo.- sentí que me estrujaban el estómago.
-Si son muy hermosas.- dije mientras lo empujaba. -Deberías mandarle unas a Heather apuesto que le encantarían.- el rodeo los ojos. -Chance te voy a pedir que no vuelvas a tocarme.- solté mientras le entregaba las flores y me giré para cerrar el casillero.
-Vamos Samira no seas una santurrona.- me sobresalte cuando sentí su mano en mi trasero, justo cuando me gire para enfrentarlo Eddie paso atrás de él empujándolo violentamente con el hombro.
-¡Fíjate por donde caminas monstruo!- Eddie giró ligeramente la cabeza para mirarlo por el rabillo del ojo, tenía la mandíbula apretada pero no dijo nada solo siguió su camino. Esto me dio el tiempo suficiente para poder alejarme de Chance.
Estaba confundida, no podía dejar de pensar en lo que paso con Chance, ¿Eddie tropezó con él o lo hizo para defenderme? pero si era para defenderme ¿por qué no dijo nada? Sin importar lo que pasara con Eddie sin duda la situación con Chance iba a ser un problema y al parecer no iba a ser el único.
Durante todo el día estuve recibiendo saludos de chicos que nunca me hablaron. Eran solo saludos en la mayoría, otros decían lo bonita que me veía, otros me felicitaban por ser una voladora, y unos cuantos me daban pequeños regalos dulces, una flor, un dibujito. Realmente me sentía incómoda, nunca llame la atención a pesar de que me juntaba con Eddie y Gareth desde que llegué aquí ellos habían hecho como un escudo a mi alrededor para que nadie me molestara y solo se enfocarán en ellos, los únicos que al parecer notaban mi presencia eran Jason y Steve y aun así los chicos salían para defenderme.
-Wow Sami, creo que te has vuelto popular entre los chicos.- soltó burlonamente Tina.
-Claro que no, solo son amables.- ella rio sarcásticamente hasta que alguien se sentó a mi lado.
-Hola pequeña.- tomó una galleta de lo que me habían regalado.
-Hola Billy.- conteste mientras veía como sonreía después de robarse mi galleta. Era extraño, nunca me llamó la atención pero no podía dejar de mirarlo, era magnético.
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La nueva porrista
Fiksi PenggemarEl destino junto a un par de chicos que se sentían perdidos en la vida, un comentario sin malas intenciones los alejara el uno del otro. Donde Samira se convertirá en lo que más odia Eddie o Donde Eddie será la peor pesadilla de Samira. #1 en Chri...