RESURRECCIÓN |ZOMBIES| (Yoonmin) *EN EDICIÓN*

CAPÍTULO EXTRA--- VHOPE (FINAL)

Tal y como los árboles, ajenos a lo que sucedía a su alrededor, continuaron con su crecimiento, la vida siguió su curso. De pronto, aquel infierno en el que habían sido envueltos de una noche a otra, llegó a su fin. Sin embargo, aquellos desgraciados que lograron sobrevivir a aquel sacrilegio, no fueron capaces de retomar sus vidas como si nada. Las heridas emocionales sangraban más que aquellas que marcaban sus cuerpos. Los cuales, abatidos, regresaban a casa para tratar de reunir los pedazos de lo que habían sido sus vidas alguna vez.

-"¿Cómo se supone que se debe superar todo eso? ¿Cómo pueden pretender que nos olvidemos de aquel infierno de la noche a la mañana?"- Se preguntaba el castaño mientras se aferraba a la mano de Hoseok, quien se encontraba concentrado describiendo hasta el más mínimo detalle del paisaje que los rodeaba.

-... el cielo está muy soleado y de un perfecto azul. - Afirmó el pelirrojo con una sonrisa en sus delgados labios.

-¿Entonces por qué no me estoy quemando? - Preguntó Taehyung con ánimos de molestar, como lo hacía cada vez que salía con su novio. Sin embargo, aquello no molestaba en lo absoluto a Hoseok. No después de haber estado a punto de perder al castaño, incluso antes de pertenecerse el uno al otro.

Fue por esto que, al enterarse de que el castaño había perdido la vista por completo gracias a las secuelas del virus, no se había despegado ni un solo instante de su lado. Fue en el momento en que el castaño, con lágrimas en los ojos, le confesó que ya no podía ser capaz de ver nada, que le juró que sería él, el encargado de describir el mundo. Y aun después de meses, mantenía su promesa como el primer día, estaba decidido a ser sus ojos. A amarlo y a sentirse amado como parte de un segundo juramento. Uno que hizo en silencio hacia un chico que vivió poco, pero amo mucho. Amaría tanto a Taehyung como el peli-negro hubiera querido... Amarlo por los dos, y así, hacerle honor a tan bello sacrificio. El cual, con suerte, le concedería la dicha de ser él quien, en otra vida, sea tan feliz con el castaño, como lo era él en esta...

-Porque estamos pasando por debajo de un camino cubierto por unos enormes árboles. - Explicó Hoseok sin inmutarse por la pregunta de su novio. Pero Taehyung ya lo sabía. O al menos lo intuía, gracias a la suave brisa que podía sentir en su rostro, la cual a la vez jugaba con su ya alborotado cabello.

Los primeros días fueron difíciles para el castaño, quien, a pesar de estar agradecido con la vida por haberle permitido ganar la batalla contra el virus, no podía evitar sentirse decepcionado e inclusive molesto por haber perdido la vista por completo.

En su momento, dentro de aquel hospital en Busan, rezo hasta que su fe se resquebrajó para que su vista regresará una vez que el virus saliera por completo de su cuerpo. Sin embargo, la membrana de color blanquecino nunca desapareció. Y a partir de ahí, la idea de olvidar el rostro de sus seres queridos había sido un miedo continuo, hasta que comenzó a hacerse realidad. La dulce mirada de su hermano, el rostro tranquilo de su padre, y por supuesto, la sonrisa de Hoseok, la cual no había podido admirar tanto como él hubiera querido, poco a poco se habían ido borrando de su memoria. Ahora, solo quedaban retazos de lo que en verdad eran.

Pero, a pesar de estar condenado el resto de su vida a vivir entre penumbras, no se dejó derrumbar, se lo debía a Jungkook... Se lo debía a todas aquellas personas que murieron durante aquellos interminables meses, en los que se vieron arrasados por la autodestrucción. Tomó mucho tiempo y esfuerzo de su parte, pero ahora era capaz de disfrutar de los pequeños detalles. El roce de sus labios con los de Hoseok, del tacto de sus manos entrelazadas al caminar o el sonido de sus respiraciones, cada que hacían el amor. Había demasiados y demasiado por lo que vivir. Y mientras el pelirrojo y su familia permanecieran a su lado, Taehyung se aferraría a la vida, a los recuerdos y a las nuevas sensaciones...

Pero sobre todo, no olvidaría el gran amor que alguna vez sintió un lindo chico de ojos despiertos hacia él...

Pues, podía olvidar cómo lucía todo a su alrededor, pero jamás podría borrar de su mente el sentimiento de sentirse amado hasta el punto en el que lo amo Jeon Jungkook.

[...]

Hola, gracias por leer, votar y comentar.

Espero que les haya gustado. Esperen el capitulo extra dedicado al Namjin,  y por fin después de tanto, podre dar por terminada esta historia jajajaj 

Perdón por la demora...