RESURRECCIÓN |ZOMBIES| (Yoonmin) *EN EDICIÓN*

SETENTA Y NUEVE

Era casi medianoche, el viento golpeaba la única ventana que iluminaba la habitación y la fuerte lluvia resonaba en los oídos de Jungkook. La casa se sentía más sola de lo normal, incluso un terror injustificado provocaba que la piel de este se erizara por completo, el sentimiento era igual como cuando se sabe que algo malo va a pasar o está pasando, pero no se sabe lo que es realmente.

La ansiedad y el nudo en su garganta impedían que el joven de cabello oscuro se quedara dormido en aquella habitación que parecía hacerse más grande conforme pasaban los días, tan grande como para que el menor comenzara a sentirse perdido entre aquellas cuatro paredes. A decir verdad, Jungkook no había podido dormir desde que Taehyung había sido hospitalizado, quería verlo, extrañaba hablar con él y escuchar su risa tonta que siempre hacía después de contar un mal chiste o soltar alguna frase en doble sentido dirigida hacia él, las cuales siempre provocaban que sus mejillas se sonrojaron por completo. Extrañaba ver sus lindos ojos perderse al mirar el cielo y percibir sus leves suspiros que dejaba salir de vez en cuando pensando en Hoseok, cuando esto pasaba le gustaba al menor pensar que aquellos suspiros eran provocados por él y no por el pelirrojo.

Aquel día en el que sucedió el accidente, Jungkook había corrido hasta el hospital una vez que la hermana de Hoseok le dio la noticia, corrió tan rápido que sus pulmones le dolieron una vez que intentó estabilizar su respiración para poder hablar con la enfermera que lo miraba impaciente en lo que se podía llamar la recepción. Había corrido hasta allí para ser ser el primero en llegar y hacerle saber al castaño que no estaba solo, sin embargo, una vez ahí el personal del hospital le dio conocer una sola razón por la que no podía entrar a verlo y la cual resumía toda su vida y le dejaba ver cuán solo estaba en esta. El joven de ojos despiertos no podía ver a Taehyung debido a que no era un familiar directo, no era su hermano, no era su primo y mucho menos era su novio. Aquellas palabras lo habían hundido en el momento en que fueron pronunciadas por la enfermera a cargo, pero no fue hasta que se enteró que Hoseok había podido pasar la noche junto al castaño, que se dejó caer en un abismo de soledad.

Estaba claro, más claro que el agua. Estaba solo. Solo en un mundo desconocido, y aunque siempre había estado consciente de ese pequeño y abrumador detalle, no lo había sentido tan real hasta en ese momento, en el que la habitación estaba sumida en la oscuridad y no era capaz de escuchar la leve respiración de su compañero de habitación...

Solo, sin ser capaz de hacer algo para remediarlo, pues la soledad, una vez que se entra en ella no tiene escapatoria, aun cuando tu cuerpo esté rodeado de personas, tu corazón siempre añorara la compañía de aquella persona que partió y que se sabe que no será capaz de volver, no importa cuantas veces la veamos entre sueños, jamás podremos sentir de nuevo su calor. Jamás podremos volver al lugar seguro que construimos con esa persona, en este caso para el joven de cabello oscuro era aun peor, no solo había perdido a su persona especial, había perdido a tres, las tres únicas personas que le arrancaban una sonrisa aun en los momentos más difíciles.

Ahora era demasiado difícil no pensar en aquello que había jurado no pensar, pues no se dejaba de preguntar cuál era el motivo por el cual había hecho esa promesa, ¿por qué debo quedarme aquí cuando siempre hay algo que desestabiliza todo?, ¿por qué no debo pensar en la única puerta que se abre frente a mi?, se preguntaba el joven mientras veía como el cielo se dejaba caer en forma de gotas y se convencía así mismo que aquella era la única solución a todo lo que estaba sintiendo.

Pero, ¿en realidad lo era?...

...

La decisión había sido tomada, no había nada más que decir al respecto, fue por esto que cuando el sargento Woo bin grito que lo había encontrado, el joven de cabello verde no se sorprendió en lo absoluto, solo esperaba que Jimin pudiera entender su decisión algún día, realmente esperaba que su dulce y tierno chico lo perdonara por no poder cumplir la promesa que le había hecho...