Eras tan solo un niño de 9 años cuando el mundo se fue a la mierda. Un niño normal con una vida no fuera de lo normal pero desde que el mundo cambio veras como siempre se esta entre la vida y la muerte, algo de lo cual nunca escaparas.
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Apenas nos levantamos continuamos con nuestro camino, teníamos que apurarnos para conseguir comida para Aj, ya que ayer se acabó.
—¿Cuanto falta?—Pregunta Kenny a Arvo y como de costumbre, Kenny tenía su pistola apuntando a Arvo... ¿No le dolerá el brazo?.
—Estamos cerca. Muy cerca—Responde Arvo.
—Dices eso cada vez que te pregunto.
—Por favor. Vengan.
Yo iba detrás de Kenny con Clementine y de un momento a otro aparecio un caminante detrás de Kenny saliendo de una roca.
—¡Kenny!—Grita Clementine, Kenny da la vuelta alcanzando a evitar que el caminante le muerda, pero los dos cayeron al suelo y como era el que más cerca estaba, saco mi cuchillo y se lo clavó en la cabeza al caminante.
—Por dios—Dice Kenny sacando el cuerpo del caminante de encima suyo—Gracias T/N—Me agradece Kenny mientras lo ayudo a levantarse.
—Eso estuvo cerca—Menciona Mike acercándose a nosotros, mientras tenía a Aj en sus brazos.
—El hijo de puta salió de la nada.
—Sigamos, no tenemos mucho tiempo—Dice Jane y seguimos caminando mientras Arvo decía que estaba cerca todo el tiempo.
—Ahí—No tardamos mucho tiempo en llegar a esa supuesta casa, pero habia un rio totalmente congelado deteniendo nuestro paso.
—¿Esa cagada? Está a medio construir—Alega Kenny y era verdad, aunque estábamos algo lejos, desde aquí se podía ver que ni el techo estaba completamente terminado.
—Vinimos por los suministros, no por la casa—Dice Jane a Kenny.
—Solo espero que haya, como se ve esa casa, seguramente la saquearon hace mucho—Mencionó y todos se quedan mirando la casa, seguramente pensando lo que dije.
—¿Vamos a caminar hasta ahí?—Pregunta Mike. Y todos nos acercamos al río, el hielo era fino y no sabía decir si esto soportaría el peso de alguien de nosotros. Tal vez el mío o el de Clementine, pero, ¿El de los demás?.
—Quizá haya un camino para rodearlo—Sugiere Bonnie pero yo no veía ni un camino a lo lejos.
—No hay otro camino, tendríamos que caminar todo el día para rodear este maldito río—Dice Kenny.
—Esta bueno. Caminar. Hielo—Nos dice Arvo, yo no confiaba ni un poco en él, ¿y si quería que nos cayéramos al agua para que escape?, no creía ni una de sus palabras.
—¿Acaso quieres matarnos? El hielo no soportaría el peso, seguramente quieres que nos caigamos al agua y tú escapes, ¿no?—Le cuestiono a Arvo.
—Puedo ir primero. Puedo ir al frente.
—Quizás no deberíamos amontonarnos. No tenemos que hacer mucho peso—Sugiere Clementine, no me parecía mala idea hacer eso siempre y cuando, Arvo esté al frente, en caso de que el hielo no soporte y sea el único afectado.
