Eras tan solo un niño de 9 años cuando el mundo se fue a la mierda. Un niño normal con una vida no fuera de lo normal pero desde que el mundo cambio veras como siempre se esta entre la vida y la muerte, algo de lo cual nunca escaparas.
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Estaba buscando la lanza que me había indicado Brody en esta musgosa y vieja cabaña, hasta que la encontré al lado de una cama que parecía bastante cómoda, al tener la lanza y salir de la cabaña. Vi como Violet lanzaba una de las lanzas al río con fuerza o más bien... rabia.
—Mierda—Bufo Violet tomando de vuelta la lanza. Cuando miraba a uno de los peces que se escapan de ella, se dio cuenta de mi presencia la cual estaba detrás suya.
—¿Puedo intentar?—Pregunte alzando la lanza.
—Como quieras—Me respondió Violet elevando sus hombros y desviando la vista casi de inmediato, apenas notando como su expresión expresa rabia e irritación.
Cuando me acerqué al lado de Violet, poniéndome en posición para intentar clavar mi lanza en uno de los peces, Violet me detiene...
—Espera... mira, esos peces están nadando contra la corriente—Menciona Violet apuntando con su dedo a los peces. Enseguida entendí que esos peces serían más fáciles de cazar, así que me acerqué y con un poco de paciencia, lancé mi lanza hacia uno de los peces... pescando.
—¡Atrape uno!—Dije emocionado. Aunque hubiera sido fácil, estaba emocionado por mi logro. Nunca había pescado y esto era una nueva experiencia para mi...
—¿Por qué está tan emocionado? Es solo un pez—Consulta Violet con extrañeza ante mi comportamiento.
—Solo es que nunca había pescado—Violet se quedó callada e intentó cazar un pescado, mientras que yo ponía mi pescado en un cubo.
—Emm... Perdón por lo de ayer, se que me comporte algo rara—Habla Violet sorprendiéndome un poco, al principio no entendí qué quería decir, pero solté un gran "Ah" cuando recordé que Violet fue a buscar los lápices ayer en la noche.
—No te preocupes, es normal que te afecte algo así... a mi me pasa más de lo que me gustaría—No podía evitar recordar mi revólver, quiero ir, quiero correr a donde chocamos Clementine, yo y Aj, pero... se que no encontrare mucho más que restos...
—¿Y con qué?—Me pregunta Violet abriendo sus ojos de curiosidad y volteando su mirada en mi.
—Mi revólver... es el... era el recuerdo de mi papá—Exprese con la voz temblorosa, algo que vi como Violet notaba y volvió su mirada en el río...
Violet siguió intentando pescar, algo que imite. Logrando pescar otro pez que nadaba contra el río. Cuando estaba dejando el pescado que terminaba de pescar, un gran grito me sorprendió...
—¡Atención, chicos. ¡Parece que no tenemos muchos peces!—Era el grito de Brody que estaba al otro extremo de nosotros.
—¡Si, está bien!—Grita de vuelta Violet. No podía evitar mirar a todos lados con miedo de que vengan caminantes, pero parecía no ser el caso—Por dios—Murmulla Violet volviendo su mirada al río.
—A veces me hace perder la paciencia por completo—Menciona Violet irritada, apoyándose en su lanza.
—Si, eso parece.
—Es que... no es que la odie, solo...—No le salían las palabras de la boca a Violet pero se notaba su frustración a leguas... seguramente por lo que me dijo Brody antes en la cabaña.
—A mis ojos, la odias—Exclame y Violet hizo una mueca volviendo a ver al río... cuando intenté volver a pescar algún pez, ya no había.
—Parece que se dieron cuenta—Afirmó Violet refiriéndose a los peces ya algo más calmada—Quizá Brody tuvo más suerte con las trampas.
—¿Y ahora?—Pregunté confuso de lo que tenía que hacer.
—Esperarla—Me respondió Violet cruzándose de brazos—Lo de Brody...
—¿Por qué es todo tan raro?—Manifestó Violet con un ligero suspiro tembloroso—Nunca me relajo cuando estoy cerca de ella.
—Tal vez porque no intentas cambiar la situación. La culpas y eres esquiva con ella—Respondí con lo poco que sabía sobre esta situación.
—Si, eso es lo que pensaba. No dejo de pensar que todo podría haber sido diferente si hubiera estado ahí—Explica Violet con cierta melancolía—Quizá podría haber protegido a Sophie y a Minerva.
Violet miraba el río, algo que imite. Mi boca estaba seca y el ambiente estaba silencioso, era incómodo. Cuando recordé lo que me dijo Minerva en la cabaña...
—Violet, lo mejor sería hablarlo con ella. A Brody le gustaría eso—Exclame posando mis manos en mi cadera y Violet lentamente volvió a verme, con la cara estirada.
—Ojalá fuera tan fácil...
—¿Y por qué no lo es?.
—Tenía que estar afuera con las gemelas ese día que todo sucedió. Quise trabajar en el invernadero y le pedí a Brody que me cubriera. Entonces...—Contaba Violet con la voz tiritona hasta que ella misma se interrumpió, con un silencio quebrantador—Ni siquiera pude despedirme—Exhalo, votando la respiración que se había aguantado recién.
—Quería hablar con Brody, decirle que no la culpaba por lo que sucedió. Pero cada vez que lo intentaba, recordaba lo que perdimos—Siguió hablando Violet—Era más fácil no hablar de eso—El ambiente nuevamente tomó un silencio inquietante, algo que se esfumó con los pasos de Brody que caminaba hacia nosotros.
—Deberíamos marcharnos—Exclamó Violet con desgana y tomando el cubo donde dejamos los pescados.
—¿Pudieron atrapar algunos peces?—Preguntó Brody cuando se puso al lado de nosotros.
—Tenemos algunos pero no son muchos—Respondió Violet esquivando la mirada de Brody. Algo que me sorprendió, voltee rápidamente al cubo de peces y habían 5 pescados. Y estaba seguro que eso no era poco...
—Yo no tengo nada. Deberíamos ir con Louis, Aasim y Clementine. Para ver si tuvieron más suerte—Explicó Brody y sin decir nada. Brody y Violet dieron media vuelta guiando el camino a donde Clementine y Aj estaban.
Solo se escuchaba el viento silbar y los pasos que emitimos al caminar. Con el silencio no podía evitar pensar en cómo le estaría yendo a Clementine y Aj, cazando conejos. Hace tiempo no nos habíamos separado así y aunque no estamos tan lejos, no puedo evitar preocuparme.
—El gran cañón—Pronunció Violet rompiendo el silencio que se había creado hace ya, un buen rato.
—¿Qué?—Indago Brody confusa.
—Ahí es donde iría. Si emprendieran un viaje. Conduciría hasta que llegaramos al gran cañón—Exclamó Violet con cierta incomodidad que desde donde yo estaba, atrás de ellas dos, se podía ver. Brody volvió a verme, con una sonrisa y volvió su mirada en Violet.
—Si, eso estaría bien.
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