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CAPITULO 41
Era la primera vez en su vida que sentía tanta adrenalina tal vez porque pensaba en las consecuencias que tendría si alguien descubría lo que estaban haciendo, se lanzaba de la cama y buscaba su ropa interior tratando de no observar a su novia quien luchaba por hacer lo mismo.
-¡Ahora voy!- gritaba y escuchaba la suave risa de Lilian -No te rías-
-Es risa de nervios- escuchaba y lo último que veía era la espalda pecosa de Lilian.
-Quédate aquí, el baño esta por allá. Bajaré ahora- decía recogiendo su cabello en una coleta alta -Maldición-
-Melissa- escuchaba y eso bastaba para caer sentada en uno de los escalones.
-¡Danna!- decía -No me asustes de esa forma- pedía tomando su mano para incorporarse -Veíamos una película y por eso no te escuchábamos-
-¿Película?- cuestionaba su hermana -Estás despeinada- escuchaba a medida bajaba los escalones -¿Y Lily?-
-Bajará en un momento, dijo que intentaría hablar con Emma- mentía lo mejor que podía -¿Cómo están las cosas en la hacienda?-
-Es horrible Meli... No te imaginas todo lo que se necesita, he venido a preparar algunas cosas para enviarles-
-Quiero ayudar- decía enfocando los escalones y pensando que Lilian estaba tardando demasiado -¿Dónde coloco esto?-
-Hola Danna- se sonrojaba hasta las orejas y no se atrevía a girarse para ver a su novia porque en lo único que pensaba era en su... -Perdona la tardanza, hablaba con mi hermana- suspiraba aliviada.
-Hola Lily ¿Cómo estás? Dime algo ¿Meli te ha tratado bien?- preguntaba su hermana.
-Muy bien- respondía Lilian -¿Necesitan ayuda?-
-Si, vamos a necesitar tu fuerza y altura para bajar algunas cosas- decía -Esperen un momento, pediré que preparen los coches- veían a Danna alejarse.
-Hola- saludaba Lily abrazándola por detrás -¿Me extrañaste?-
-¿Lograste calmarte?- preguntaba girándose y no entendía porque su novia sonreía de esa forma -¿De qué te ríes?-
-Estoy recordando tu rostro cuando escuchamos la voz de tu hermana- decía divertida.
-Tu cambiaste de rojo a blanco en un segundo- ambas reían por lo bajo y no supo en qué momento estallaban en risas nerviosas.
-¿De qué me perdí?- preguntaba Danna.
-Hablábamos de la película- mentía Lily -¿Te parece bien si me voy con uno de tus choferes?-
-De ninguna manera, Emma me pidió que te mantuviera a salvo así que pasaras la noche en nuestra casa- decía Danna -¿Qué les parece si hacemos una pijamada y vemos películas en la sala hasta tarde?-
