Capítulo 29
Raven.
No he salido de mi apartamento en tres días, lo que también supone que no he ido a trabajar, cosa que tiene muy enojado a Nolan. Aunque, ¿sinceramente? Su enojo es más por el hecho de que me fui aquel día sin decirle la verdad a Benson.
Nolan insiste en que deberíamos hablar sobre lo que pasó, pero tengo miedo de que cuando nos volvamos a ver él tenga otro arranque y me lleve nuevamente con Benson, por lo que me he negado rotundamente a reunirnos, al menos por unos días en los que las cosas se calman un poco.
Y me alegra que él esté respetando mi espacio, sabe que me estoy pasando estos días encerrada en casa las veinticuatro horas del día y que él tiene llaves del apartamento, pero aun así no se ha presentado aquí.
Siento que estoy abusando de la confianza que Nolan me ha dado faltando tantos días al trabajo, y soy consciente de que puede despedirme por ello, pero también soy consciente de que no va a hacerlo, así que me aprovecho de eso, y que Dios y Nolan me perdonen después, ahora solo quiero estar sola con mi hija. Y Anne, que sigue cuidando a Lyra, claro.
Todos estos días sin ir a trabajar los he aprovechado para pasar más tiempo con mi hija, y al observarla me doy cuenta de que estoy siendo demasiado egoísta con ella. La estoy privando de conocer a su papá, de crecer con una figura paterna a su lado y todo eso es algo que me está carcomiendo por dentro.
Lyra es mi mundo y haría lo que fuera porque ella esté bien, pero al mismo tiempo le estoy haciendo daño al mantenerla alejada de su padre, y tan solo de pensar que en algún momento debo decirle toda la verdad y que ella puede llegar a odiarme por todo esto me atormenta.
—Deja de sobre pensar tanto las cosas, Raven —Any, quien está sentada a mi lado en el sofá, choca su hombro con el mío en un intento de sacarme de mis pensamientos —Me pones nerviosa hasta a mí.
Yo solo sonrío un poco y decido llevar a Lyra a su habitación, ya que hasta ahora había estado durmiendo en el sofá con la cabeza en mis piernas. Cuando regreso a la sala vuelvo a sentarme en el mismo lugar en el sofá, junto a Any.
Está de más decir que Anne sabe todo lo que pasó con detalles de sobra. Ella es la única amiga que tengo aquí, ¿A quién más se lo contaría si no es a ella? Aparte de Gina, quien me ha reprendido cuando le he contado todo. Según ella fui una tonta al irme de allí corriendo y debí quedarme a hablar de una vez por todas con Benson.
—¿Cuándo piensas salir de estas cuatro paredes? —Inquiere Anne pausando la película que estábamos viendo. Bueno, que ella estaba viendo, porque yo no le había prestado atención en ningún momento.
—Cuando vuelva al trabajo —Me limito a contestar.
—Bien, ¿Cuándo volverás a trabajar?
—Cuando hable con Nolan.
—¿Y se puede saber cuándo será eso?
—Cuando salga de estas cuatro paredes —Bromeo y ella me da una mala mirada.
—No es gracioso.
—Lo es —Contradigo.
—No lo es, Nolan está preocupado y...
—¿Y tú cómo sabes eso?
—¿Eh? ¿Qué cosa? —Se hace la desentendida.
—Que Nolan está preocupado.
—Ah, eso... lo que quise decir es... que él debe estar preocupado, sí, eso.
—No Any, tú afirmaste que él está preocupado y te veías muy segura de eso, como si él mismo te lo hubiese dicho.
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RECUÉRDAME
Teen Fiction¿Qué harías si un día descubres que estás embarazada de tu novio, el cuál se fue a estudiar a otro país, y ahora su madre te pide que abortes y desaparezcas de sus vidas? ¿Qué harías si te ves obligado a viajar a otro país para estudiar, y tiempo de...