Capítulo 69

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Capítulo 69

Benson.

—Quiero que me ayudes a recuperarla.

La mandíbula de Lisa se desencaja un poco más y a este punto me empieza a preocupar que sus ojos salgan de sus orbitas. Permanece en esa posición por algunos segundos, como si esperara que algo más sucediera. Sus ojos se desvían a varias partes de la habitación, buscando no sé qué para luego volver a posarse en mí.

—¿Hablas en serio?

Mi respiración sigue agitada, no solo por la forma apresurada en la que llegué hasta aquí, sino también por lo expectante de la situación. Mi pecho inflándose con cada respiración que tomo.

—¿Crees que bromearía con algo así?

Ella pestañea un par de veces, saliendo de su estupor.

—Bueno... no, pero... esta mañana no pensabas así ¿Seguro que no te golpeaste la cabeza?

—Te puedo asegurar que estoy perfectamente bien.

Ella camina a paso lento por la habitación hasta llegar a su cama y sentarse en la orilla de esta.

—Entonces ¿qué te hizo cambiar de opinión? Hace unas horas me dijiste que querías olvidarla y ahora... ¿la quieres recuperar? No te entiendo.

—Haces demasiadas preguntas, Lisa, ¿vas a ayudarme o no? —Inquiero rodando los ojos.

—Sí, voy a ayudarte, pero primero necesito saber si esto no es solo un momento de éxtasis tuyo del cual te arrepentirás después.

—No voy a arrepentirme —Espero que la seguridad en mi voz logre convencerla.

—¿Cómo estás tan seguros?

—Porque no creo soportar verla salir con alguien más otra vez sin morirme de rabia.

La cara de Lisa refleja una clase de entendimiento repentino al escucharme decir aquello.

—Así que haces esto por celos.

Suelto una fuerte exhalación y me paso las manos por el cabello, sintiéndome exasperado.

—No es... —Empiezo, pero ella no me deja continuar.

—¿La viste con alguien más?

—Sí, pero...

—Y ahora de repente tienes ganas de recuperarla —Más que una pregunta es una afirmación. El que ella no me deje hablar empieza a alterarme —¿No será que todo esto es solo un berrinche de niño egoísta tuyo?

La miro como si se hubiera vuelto loca.

—¿De qué hablas?

—Tú no haces esto para recuperarla, lo haces para que no salga con alguien más que no seas tú, maldito egoísta —Me incrimina poniéndose de pies y señalándome —Si no es contigo no es con nadie, ¿cierto?

—¡No! ¡Esto no tiene que ver con nada de lo que dices!

—Pues demuéstralo —Me reta —¿Por qué lo harías sino?

—¡Porque la amo! —Exploto —Y sí, puede que me esté muriendo de celos por verla con otro, pero te puedo asegurar, Lisa, que esto no es un maldito acto egoísta. La quiero conmigo, quiero aferrarme al más mínimo sentimiento que ella pueda tener hacia mí, aunque sea odio o desprecio, no me importa, haré todo lo posible para que vuelva a quererme

—¿Y si no lo consigues?

Un vacío se forma en mi pecho de tan solo imaginarlo, pero no dejo que eso me haga flaquear.

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