Mark sale del gimnasio cabizbajo repasando mentalmente lo que ocurrirá a continuación, le dirige una mirada de disculpas a Anna y a su familia quienes siguen conversando.
—¿De que debemos hablar?— pregunta cuando se encuentran en las afueras.
—Verás. . . Seré honesta y precisa. He escuchado el rumor que está en boca de todos los estudiantes ésta noche — dice negando con la cabeza mientras camina de un lado a otro —Y quiero que tú seas sincero conmigo y me aclares eso, ya que te involucra.
Mark inhala ya sabiendo lo que la mujer dirá pero demasiado enfadado como para responder aún.
—¿Es cierto que sales o salías con una estudiante de último? —pregunta directamente la mujer mientras escudriña en los ojos de Mark.
Él asiente levantando la cabeza y respondiendo el contacto visual. Ya la escuela había acabado, ahora no estaba rompiendo ninguna regla y si lo estaba haciendo no le importaban en lo más mínimo. Ya estaba harto de estar a escondidas con Anna, ésta misma noche le confesaría todo y si ella lo entendía ya no tendrían que esperar esas dos semanas, al otro día iría a hablar con sus padres.
—¿Anna?— pregunta ella cerrando los ojos para pensar con claridad, la edad no le ayudaba mucho cuando se trataba de permanecer de pies mucho rato.
—Ella misma —contesta con seguridad y sin importarle realmente por primera vez las consecuencias.
—¿Esa fue la razón por la que su nota fue de 10? —preguntó la directora.
—¿Qué? —preguntó él atónito de que ella que la conoce piense eso —¡Claro que no! Usted sabe perfectamente que ella se gana la nota con esfuerzo.
—No lo sé Mark. No conocemos realmente a las personas, pensé que te conocía a ti ya que no es un mes que te llevo conociendo, sino años —dice ella sin titubear pero con un tono amargo.
—Yo no tenía previsto enamorarme de ella y dudo mucho que ella tuviera previsto enamorarse de mi, pero es algo que pasa y no se puede evitar.
—Sabes que debo hablar con sus padres acerca de esto ¿no? —preguntó ella sin querer realmente hacerlo.
—Cecilia te hablo como íntimo conocido —dijo utilizando su única ventaja —No lo hagas por favor, yo pretendo hacerlo mañana —casi suplicó.
Ella negó lentamente —No puedo no hacerlo Mark. Surgiría un enorme problema si sus padres vienen a hablar de eso, recuerda que ella es menor de edad.
—Yo se los diré personalmente. Mañana —contestó él —Ellos me conocen y si quieren denunciarme o algo así, no involucraré a la escuela
Hubo un silencio ensordecedor, después de varios minutos la directora añadió reintegrandose —Tu mamá estaría feliz de verte así de enamorado —le guiñó un ojo y entró nuevamente al gimnasio.
Él suspiró claramente aliviado y se dejó caer al suelo sin siquiera darse cuenta, permaneció ahí durante unos minutos hasta que unas finas manos tomaron su cabeza y la levantaron. Unos ojos profundamente verdes lo observaban con intriga y preocupación —¿Que sucede?— preguntó ella con su voz liviana
—Debo irme pequeña —dijo él sumamente serio. Cada palabra le rompía el alma, dejarla sin saber nada de lo ocurrido le partía el corazón y su mirada desorbitada lo hizo volver loco.
—¿Porqué? —preguntó ella demasiado confundida para molestarse o colocarse triste —¿A donde irás?
—Saldré con Josh —dijo —Te buscaré a lo que termine el baile de graduación ¿de acuerdo?

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~June~
JugendliteraturUna estudiante común y corriente. Un profesor agotado de la rutina. Nada en común, salvo la monotonía asfixiante de sus vidas. Una mañana de Junio sus vidas cambian al darse cuenta que encontraron lo que ambos sin saber estaban buscando. Un remolino...