═.☆.══════ .☆. ══════ .☆.═
── amigo, están diciendo por ahí que nadie a logrado eliminar al número 28 hasta ahora. Ese imbécil es imposible de sacar de ahí ── escucho comentar a uno de los arqueros al pasar, mientras trataba de ubicar a algunos de los de su club por el lugar.
Las olimpiadas ya habían iniciado, por lo que debía de estar preparándose ya al ser el número 17 en la línea... pero necesitaba encontrar su mochila, por sus pastillas.
Camino alrededor del sitio donde se preparaban todos, ubicando a duras penas a uno de los chicos de su club por ahí, perdido también.
Tuvo ganas de reírse en cuanto se ubicaron ambos y este parecía ir a lloriquear al encontrar a su capitán, seguro estaba asustado o algo.
── ¡Capitán! ── se acercó este de inmediato, aferrándose a su brazo entre quejidos que pretendían ser sollozos ── hay demasiada gente aquí ── pronunció con levedad, haciéndole reír un poco y acomodar su arco en su hombro, palmeandole la cabeza.
── no te dejes comer por los nervios ── aconsejo, antes de que este se soltara y agitara las manos intentando calmarse ── ¿haz visto mi mochila?, una con muchos pins por todos lados ── preguntó con tranquilidad, tratando de mirar alrededor todavía.
── creo que vi a Charlie con ella hace rato ── explicó el otro, viéndose pensativo ── estaba llevando todas las demás donde nadie las pudiera tocar ── recordó este, antes de que llamaran al número 23 desde los altavoces y este se pusiera pálido, provocándole una risa ── me voy a morir, Cap ── dramatizo de inmediato, antes de que empezará a palmearle la espalda.
── ¡venga!, sin llorar ── lo alentó enseguida, viendo como el chico avanzaba temeroso a donde se estaba dando el tiro con arco ── ¡rompete una pierna! ── bramo de buen humor, recibiendo un "lo intentaré" de parte del otro antes de verlo desaparecer.
Se dedico a buscar al tal charlie con la mirada, avanzando entre la gente y tratando de no chocar con ningún competidor sin querer.
Pronto ubicó a más gente de su club por ahí, cerca de un montón de bolsas y mochilas, causándole un suspiro de alivió. Ya había perdido bastante tiempo buscando... menos mal.
Se acercó, saludo y luego agarro su mochila, rebuscando su medicamento en esta en los bolsillos donde se suponía, las dejo.
No estaban
¡No estaban!
Revolvió entre sus cosas rápidamente y trato de mover las demás bolsas en busca de estas, empezando a ponerse algo pálido.
ESTÁS LEYENDO
Después de Ti
Fanfiction- ¿alguna vez te haz preguntado que diferencia la alegría de la felicidad? - preguntó aquella vez. siendo curioso, apasionado y único, como siempre lo sabía ser. - no realmente - murmuró, admirandolo como la más preciosa joya o la mejor bendición...