- ¿alguna vez te haz preguntado que diferencia la alegría de la felicidad? - preguntó aquella vez. siendo curioso, apasionado y único, como siempre lo sabía ser.
- no realmente - murmuró, admirandolo como la más preciosa joya o la mejor bendición...
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Ao'nung esperaba inquieto sentado junto a Tsireya, Rotxo y Lo'ak, teniendo en demás asientos a Kiri o Spider.
El señor Jake tuvo que retirarse por las horas del hospital... y su madre se ofreció a llevarlo a él, a la pequeña Tuktirey y a la señora Neytiri hasta el hogar de los dos primeros, puesto que una había donado médula ósea hace como 2 horas, la niña tenía sueño y el señor Sully no podía dejarlas solas si iban hasta allá.
Prometieron soltar cualquier información al respecto de Neteyam (al señor Sully), en cuando a la operación, si surgían noticias al respecto.
Estaba un tanto preocupado, ya que en sí, un proceso de transplante de médula ósea según llegó a investigar, no tardaba mucho. Pero ellos se estaban tomando demasiado tiempo.
Aunque claro, considerando que era un cambio casi completo de un injerto importante en alguien que estaba al borde de su vida... debía de ser demasiado complicado y duradero.
Se cruzó de brazos en un intentó por mantenerse tranquilo y paciente, confiando en que pasará el tiempo que pasará... todo iba a salir bien.
── Estará bien ── pronunció Tsireya a su lado, posando una de sus manos sobre una pierna suya, llamandole la atención.
── no pienso lo contrario ── murmuró, agradeciéndole por su preocupación con una ligera sonrisa ── ¿Porque crees que tarden tanto? ── le preguntó a esta, a lo cual simplemente negaba con levedad, teniendo incertidumbre al respecto del tema.
── no estoy segura ── contestó con sinceridad, mirando hacía las puertas que daban al quirofano por un momento ── tal vez les haya estado costando intervenir o algo ── dijo esta antes de encogerse de hombros, volviendole a mirar.
Tuvo que suspirar y buscar más temas de conversación con está, tratando de distraerse de cualquier preocupación tonta que pudiera pasarle por la cabeza.
Esperaron alrededor de 10 minutos más, antes de poner notar a un doctor salir, bajandose este su mascarilla mientras se acercaba hacía ellos.
No pudo evitar el levantarse de su sitio, al igual de Kiri o Lo'ak, evidentemente ansiosos.
── ¿familiares del paciente Neteyam Sully? ── pronunció este, obteniendo un "todos nosotros" proveniente de la hermanita de Neteyam ── ¿padre, madre, hermano, hermana...? ── cuestionó este, antes de que Lo'ak diera paso al frente ── venga conmigo por favor ── le pidió a este, antes de dirigirse ambos hacía una zona más lejana a aquella sala de espera para poder charlar.
Se quedó intranquilo viéndolos desde la distancia, notando los ademanes del doctor y las expresiones de Lo'ak, que pasaban de estar sorprendido a estar desolado, apoyándose contra una pared.
No... no podía-, no
Esperó hasta que el doctor se retiraba y Lo'ak regresaba hacia ellos, sin soltar palabra o sin mucha emoción, dirigiéndose hasta kiri para apoyarse contra esta, tal vez buscando en su hermana algún confort.
── ¿que pasó? ── demandó saber de inmediato, viendo como la morenita tan solo rodeaba a su hermano con sus brazos, apretujandole despacio ── Lo'ak ── pronunció con terror, mirando a este impaciente.
── dejalo respirar ── exigió Kiri, mientras que Reya se acercaba a ellos para acariciar la espalda de Lo'ak, quien todavía no decía una sola maldita palabra.
Tomo aire en busca de paciencia y camino de un lado a otro por un rato, esperando a que este soltara a decirles lo que sea que hubiese dicho el doctor.
Finalmente cuando se vio capaz de hablar, este se sentó, mostrandose lloroso y con el alma en el suelo, empezando a hablar.
── el injerto presentó anomalía porque la leucemia estaba en todo su sistema nervioso ── balbuceó con la voz rota, indicando que habían ocurrido complicaciones ── no lo recibió del todo correctamente y... El sistema neuronal de Teyam- ── señaló hacía su cabeza vagamente, antes de cubrirse los ojos con una mano, con la cabeza agachada y sin poder hablar más.
Eso significaba que-, no...
No pudo evitar llorar mientras escuchaban todos el resto de la información por Lo'ak, dejándole todo lo dicho destrozado por completo, sin ganas de saber nada más.
Más tarde ese día... recibieron las disculpas del cuerpo médico y tuvieron que comunicarse con el señor Jake y su madre, Ronal, para informar sobre lo ocurrido, cosa que solo Rotxo pudo hacer.
¿El resto y él?..., no podían ni levantar la cabeza desde donde estaba cada uno sentado, indispuestos ante la noticia.
Aquel día, 15 de abril y a las 6:42
Neteyam Sully había cerrado los ojos sin volverlos a abrir más
