Herederos perdidos

38. Un nuevo inicio.

Después de terminada la ceremonia de graduación, James decidió finalmente marcharse de la mansión Malfoy y mantener su distancia con Harry, para molestia de Narcissa.

Iba con regularidad a la mansión para verla y buscar una manera de acercarse a su hijo pero con quién terminaba charlando en sus visitas era con Draco.

Le parecía un chico gracioso y muy distinto a Lucius a pesar de ser una copia de él a su edad.

De vez en cuando lograba sacarle un poco de información sobre Harry y por lo que le dijo, sabía que muy pronto se iría a la escuela de aurores.

A seguir sus pasos.

Cuando supo que quería ser auror un gran orgullo lo lleno aunque también acudió a él la preocupación por su seguridad ya que era una profesión de alto riesgo.

Estaba intentando buscar las palabras correctas para acercarse a él antes de que se marchara, por lo que le había pedido de favor a Draco que lo ayudara para que Harry aceptará verlo y por lo menos tener una pequeña conversación con él de manera civilizada.

No sabía si el mini rubio estaba logrando su cometido pero esperaba que asi fuera por que ya habia reunido el suficiente valor para enfrentarse a Harry en los próximos días o si era posible, ese mismo día.

-Has tardado demasiado tiempo -Narcissa lo veía con reproche y una ceja alzada-.

Estaban en una de las habitaciones que se usaba como oficina del ala norte de la mansión porque allá no iba ninguno de sus hijos y a James le parecía un lugar más apropiado para estar libremente.

-Tengo miedo, Cissy. Los años solo me han hecho ser un cobarde.

Narcissa se acercó a él, pasando una mano por su espalda dándole suaves caricias.

-Que te quede clara una cosa, James, tú no eres ningún cobarde y sentir miedo no te hace menos que nadie, es una motivación para salir a enfrentarte a ello con la cabeza en alto y superarlo.

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-¡Deja de molestarme, Malfoy!

Harry cerró los ojos y se talló la sien con los dedos, cansado de la situación.

Draco había estado los últimos días muy fastidioso con él sobre su nula comunicación con James.

Era de su total conocimiento que el rubio hablaba con su padre y que de una manera extraña habían conseguido tener una buena relación.

Le parecía curioso como es que se habian invertido los papeles con sus papás, ya que él había mantenido muy buena relación con Lucius -por obvias razones, claro- y Draco con tan poco tiempo llego a conectar con James de maneras en las que no pudo hacerlo con Lucius mientras estuvo con vida.

Estaba pronto a irse a la academia de aurores a pesar de la insistencia de Draco de no hacerlo. Sabia de sobra las razones de porque él intentaba que se quedara pero él quería seguir adelante con su sueño y eso era formar parte del cuerpo de aurores a seguir luchando a erradicar el mal del mundo mágico.

-No quiero ser molesto ...

-Claramente no lo estás consiguiendo.

-Como decía -continuó Draco sentándose a un lado de él-, tú también me insististe demasiado para que le diera una oportunidad a Narcissa, ¿por qué tú no lo puedes intentar con James? Solo escucha lo que te tenga que decir y después de eso tú decides si perdonarlo o no o incluso si seguir en contacto con él. Por años pensaste que tus papás habian muerto y después de tanto has recuperado a tú papá, no dejes que sea demasiado tarde cuando quieras hacer las paces con él.