Herederos perdidos

12. Ayuda inesperada.

Había un gran desconcierto dentro de la orden.

Uno de los chicos andaba en el Callejón Diagon cuando ocurrió un ataque y mando pedir ayuda.

Al lugar acudió una de las brigadas más grande que tenían que constaba de poco más de ocho personas, pero con lo que no habian previsto es que iban a necesitar muchos más.

Todos estaban preocupados. Al parecer, Voldemort había reunido muchos aliados ya que solo en esa pelea contaron al menos más de quince mortífagos y alguna que otra criatura escondida en aquel ataque.

-¿Qué haremos, Lucius? Se han llevado a Luna, Katie y algunos niños que estaban en el lugar.

-Tenemos que reponernos primero del ataque. Además, no sabemos a donde se los pudieron llevar -Lucius apretó el puente de su nariz-.

-Es un secreto a voces de que su cuartel es la mansión Lestrange -dijo Narcissa seria y con una mueca de disgusto-.

-¿Crees que tu hermana haya estado detrás del ataque? -Remus se sentó en uno de los sofás junto a Dora Tonks a quien abrazó por los hombros-.

-¡Esa perra dejó de ser mi hermana hace muchos años! -Los ojos de Narcissa mostraban furia cada vez que se hablaba de Bellatrix Lestrange, de soltera Black y la hermana mayor de Narcissa y Andrómeda-.

-Anthony dice que cuando vio por última vez a Luna estaba junto a una mujer de cabello oscuro -en ese momento entró Sirius interrumpiendo la furia de Narcissa-.

-Esa perra infeliz... -siguio murmurando Narcissa y se cruzó de brazos malhumorada-.

Lucius le dio una mirada ansiosa a su esposa pero no se acercó a ella, fue Sirius quien fue a su lado y la abrazó.

-Calma Cissy, ya tendremos la oportunidad de vengarnos de ella -los ojos de él lucían el mismo fuego de rencor que los de Narcissa-.

Los demás que estaban en la habitación desviaron la mirada, incómodos. Incluso Lucius, aunque una parte muy dentro de él comprendía el odio de los Black ya que él mismo se sentía de la misma manera.

A los pocos meses que ocurrió el secuestro de su hijo y sobrina les llegó una carta anónima, en la cual, se señalaba a Bellatrix Lestrange como principal cabecilla de aquel atroz crimen.

Cuando trataron de hacerle frente varias veces, ella solo se burlaba sin desmentir las acusaciones, lo cuál, alimento el odio de ellos hacia aquella horrenda mujer.

Y por si eso no fuera poco, ella asesinó a toda la familia McKinnon y después de eso fue tras Marlenne Black a echárselo en cara.

Tuvieron una fuerte pelea donde lamentablemente, Marlenne perdió la vida tras unas cuantas horas de lucha.

Charlie Weasley entró corriendo al despacho, sobresaltando a todos quienes se habian quedado absortos en sus pensamientos.

-¡Tio Lucius! Tiene que venir conmigo, es urgente.

-Todo en este lugar es urgente -salió murmurando Lucius detrás del chico-.

-Bien, nosotros nos vamos, necesitas descansar Dora -Remus ayudó a levantarse a la chica quien lucía un ligero abultamiento en su estómago-.

-Cállate Remus, ni que estuviera inválida -Dora rodó los ojos con exasperación-.

-Escucha a Remus querida, lo mejor es que te mantengas al margen hasta que nazca el bebé -Narcissa miró con cariño a su sobrina-.

Dora suspiró y asintió.

-Solo lo hago porque tu me lo dices tía.

Remus entrecerró los ojos a su mujer, se despidieron de Narcissa y Sirius y se fueron del despacho.