capitulo 55

660 132 24
                                    

Secando sus manos y dándose una última mirada en el espejo JiMin salió del baño para buscar a la amable señora que lo había ayudado a encontrar el sanitario anteriormente

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Secando sus manos y dándose una última mirada en el espejo JiMin salió del baño para buscar a la amable señora que lo había ayudado a encontrar el sanitario anteriormente.

Y es que los nervios que sentía de conocer a sus suegros le atacaron a tal grado que su vejiga se hubiera visto comprometida de no ser por la omega de adorables canas la cual había acudido a su rescate cuando miraba en todas direcciones buscando a su pareja para preguntarle por el cuarto de baño.

Suspirando una vez más se dio valor para salir del sanitario e ir a conocer a sus suegros, caminó hasta la anciana mujer nuevamente pidiendo su ayuda para no perderse y poder ir al lado del pelinegro.

La dulce omega le guio hasta conducirlo a donde ella creía que el joven Min podría estar, pues según la anciana, el alfa seguramente estaría en el comedor principal junto a su madre, logrando así que JiMin le  siguiera mordiendo su labio inferior con más insistencia con forme avanzaba y se acercaban a su destino.

Cuando la amable anciana le mostró la entrada al comedor principal, el agradeció con una suave reverencia antes de adentrarse al lugar.

Enfocando su mirada hacia la mesa de comedor el rubio se encontró con la sorpresa de que su alfa no estaba ahí como la mujer había pensado.

En la habitación solo estaban dos hombres y una bella mujer comiendo y charlando muy amenamente, además de un par de sirvientes en cada extremo de la habitación los cuales parecieron ser los únicos en notar su presencia

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

En la habitación solo estaban dos hombres y una bella mujer comiendo y charlando muy amenamente, además de un par de sirvientes en cada extremo de la habitación los cuales parecieron ser los únicos en notar su presencia.

Por lo que, al no encontrar motivos para permanecer ahí, dio un paso hacia atrás con sumo cuidado tratando de no alertar a los presentes y salir en busca de YoonGi.

Pues su instinto le decía que aquella elegante mujer de ojos gatunos era nada más y nada menos que la madre del pálido, la elegante dama parecía tan imponente e intimidante como su alfa el día que lo conoció y lo vio en el elevador por primera vez, y sinceramente, le daba algo de miedo conocerla por cuenta propia pues la mujer parecía molesta por algo.

Justo antes de poderse girar sobre sus talones los presentes voltearon en su dirección como si alguien les hubiera llamado, pero fue su propio aroma el que había hecho picar la nariz de la mujer haciendo que esta le viera y después los demás posaran su vista sobre él.

ROSAS ANÓNIMAS (Finalizada)   - LasManosde YoonGiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora