Los días fueron pasando y hoy nos encontramos en el día de la sesión de fotos del pequeño Jimin. Estaba nervioso, pero al menos no como el primer día. Nunca pensó que él tendría una sesión de fotos. Siempre pensó que él era más secundario y por ende no tendría que hacer nada de eso. Creyó que solo tendría que bailar y listo. Supuso que si las cosas salían bien, tendría algo de fama, pero no pensó que en la gala sería presentado como un famoso más.
–¿Cómo estás?
–Raro sin Nana por aquí, señor.
–Tenía asuntos familiares.
–¿Y Tae?
–Mamá se ha resfriado y papá no podía quedarse con ella. Hoy estamos solos tu y yo. Pero te lo preguntaba por los nervios.
–Estoy bien. Claro que estoy nervioso porque nunca he tenido que pasar por algo así, pero no estoy como el primer día. Hay algo que no entiendo...
–Dime.
–¿Porqué yo tengo una sesión de fotos? ¿Tu eres el protagonista, no? ¿Porqué soy parte de la gala de presentación si solo soy un bailarín más?
–Lo primero que tienes que tienes que saber es que solo nosotros la llamamos así. En realidad es una gala benéfica que se hace a principio de año. La llamamos de presentación porque ahí damos a conocer a cada bailarín.
–¿Con qué fin se hace?
–Sobre todo orfanatos y hospitales. Es dedicado a los niños. Todo el dinero que se recauda es para que tengan un mejor futuro.
–Que bien.
–Había pensado, si te parece bien, no mostrar tu rostro hasta entonces...
–¿Porqué?
–Misterio. Eso dará mucho impacto.
–¿Y las fotos?
–Cubrebocas.
–¿Quedarán bien?
–Estoy seguro.
–No entiendo lo del impacto.
–Tienes un rostro muy bonito. Si solo muestras tus ojos en la revista, todo el mundo querrá saber a quién le perteneces esos ojos. Y luego verán tu rostro. Seguro que muchas agencias de modelo querrán trabajar contigo después.
–Pero yo no quiero ser modelo.
–Lo sé, pero eso aumenta mucho tu valor en esta industria.
–Suena muy frío dicho de esa manera.
–Y lo es. Pero tranquilo, yo cuidaré de ti mientras estés conmigo. Y cuando sea el momento de separarnos, me ocuparé de que te vayas a un buen lugar –Sonrió–
–No existe la posibilidad de que me quede más tiempo... ¿Verdad?
–Pues...
–¡Perdón! No debería haber dicho eso... Tae ya me dijo que era muy pronto para eso. Lo siento... Haga como que no dije nada. ¿De acuerdo? Yo ya terminé, voy a por mi abrigo y nos vamos... –Se marchó dejando al pelinegro con la palabra en la boca–
Jungkook nunca pensó en esa posibilidad, ya que siempre había tenido problemas con sus compañeros, pero si con el rubio no tenía ese inconveniente, no tendría ningún problema con que se quedara más tiempo. Todos en esa casa lo adoraban. Nana ya le había dicho que lo echaría de menos cuando todavía no había empezado a trabajar. A Tae se le caía la baba cada vez que hacía un puchero al enfadarse. Y al pelinegro también le gustaba mucho su compañía. Era el bailarín con el que se sentía más tranquilo, a pesar de estar más en guardia por si sucedía algo relacionado con el pequeño. Pero como dijo Jimin, era muy pronto aún. Él no era como el rubio, el tenía que conocer más a la persona para ver sus intenciones reales. Ya hablarían de eso más adelante.
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Estaba escrito... ººKOOKMINºº
FanficUn chico con sus sueños aparentemente truncados por circunstancias de la vida, conoce a alguien que le cambia la vida por completo. Pasarán cosas que un pequeño rubio tendrá que lidiar, pero con ayuda de sus amigos y de su familia, seguro que podrá...