Estaba escrito... ººKOOKMINºº

Capítulo 24

  Lia miraba a su hermano con asombro. No recordaba haber visto a su hermano tan enfadado, y lo peor es que no tenía ni idea de que era lo que lo tenía tan molesto. Su mirada viajó hasta el pelinegro, para ver si éste podía decirle que era lo que pasaba, pero este se encogió de hombros.

–¿No piensas contestarme?

–Jimin... ¿Qué demonios te ocurre?

–No recuerdo que él estuviera invitado...

–Jimin, cielo... ¿Porqué no los dejas pasar? –Dijo Jungkook en un intento de calmar la situación–

–¿No ves que la cosa no es contigo? –Le dijo sin siquiera mirarlo–

–Está bien, jovencito. Hasta aquí he podido aguantar. Vete a tu habitación, tu y yo vamos a hablar muy seriamente.

–Pero...

–¿No me has escuchado?

–Bien...

–Nam... Síguenos y espera en la puerta. Lo solucionaré en seguida.

–Claro...

Jimin estaba sentado en la cama esperando a su hermana. Sus ojos estaban cristalizados porque sabía que estaba a punto de ser regañado por su hermana. Ésta entró suspirando y cerró la puerta tras de si. Se quedó ahí de pie unos segundos, como pensando que iba a decir. Realmente no creyó algo como esto pasaría. No tenía ni idea de que era lo que pasaba, pero no tardaría en averiguarlo, porque no saldrían de allí hasta que Jimin hablara.

–¿Se puede saber qué es lo que te pasa?

–¿Porqué vienes con él? Él no estaba invitado.

–Félix me dijo que podía traerlo. Además, se ha convertido en parte de la familia.

–¿Estás saliendo con él? ¿Porqué no me has dicho nada?

–Quería que fuera una sorpresa.

–No me gusta.

–¿No te gusta?

–No.

–No quiero quedarme soltera de por vida.

–Pero... –Comenzó a llorar– Si tu estás con él... ¿Qué va a ser de mi? Ahora tienes que estar pendiente de él y te vas a olvidar de mi. No hace mucho que te conozco y siento que ya te voy a perder... Creí que te podía tener un poquito más para mi solo...

–Pequeño... ¿Porqué piensas eso? –Se acercó y se arrodilló frente a él–

–No lo sé...

–Eso no va a pasar. Cuando tu comenzaste tu relación, nuestras conversaciones nocturnas se redujeron, pero yo no te dije nada porque entendía que cada uno tiene su vida. Pero aunque eso sea así, se que puedo llamarte en cualquier momento si te necesito. Y lo mismo será al revés... No me vas a perder solo porque yo esté saliendo con Nam. Además... No puedes cabrearte con él. Estamos saliendo porque yo he ido tras él.

–¿Te gusta?

–Me gusta mucho.

–Perdón... No sé porqué me he puesto así... Será por el embarazo... –Jimin se tapó la boca con ambas manos, pues había estropeado la sorpresa–

–¿Que estás qué?

–Era una sorpresa... Es por eso la cena de hoy...

–¿De verdad?