Draconem et Reginae

30

- Ah, chicas. Aquí están. -dijo el señor Greengrass cuando sus hijas llegaron.

Ambas hermanas saludaron a Narcissa, Daphne saludó con un beso en la mejilla a Draco y Astoria dijo "hola" de lejos. Al cabo de pocos minutos, se disculpó y se alejó.
Estaba llegando a la barra cuando alguien le aferró la mano.

- Hace meses que no hablamos ¿Y sólo me dices "Hola"? -preguntó la voz de Draco.

Ella se volteó y soltó el agarre de su mano con delicadeza, pues a pesar de todo no quería parecer ruda.

- Tú ni siquiera respondiste el hola. -replicó la joven.

- Touché. -accedió el rubio.- ¿Cómo estás?

- Bien. -contestó ella, encogiéndose de hombros.- Esperando que sea septiembre para irme. ¿Qué tal tu viaje?

- El viaje, interesante. ¿A dónde irás en septiembre?

- Me aceptaron en la escuela de Magizoología, asique comienzo con los viajes.

Draco alzó ambas cejas.

- Felicidades.

- Gracias.

Se quedaron en silencio un momento, sabiendo cada uno de ellos que tenían muchas cosas que decir, pero sin decir nada.

- En fin, tengo que ir con mi padre...disfruta la noche. -dijo Astoria, esbozando una leve sonrisa.

Draco asintió, pero aquella despedida estaba desesperandolo por dentro.

- Te ves hermosa. -soltó, sin pensar. Luego se mordió la lengua.

Astoria quedó de piedra. Pero acabó por esbozar una amplia sonrisa, sonrojándose.

- Gracias. Tu también te ves muy bien. El negro es tu color. -añadió lo último en tono de burla.

- Lo sé. -respondió el chico, con una ligera sonrisa.

Entonces Astoria se fué, dejándolo totalmente descolocado.

- ¡Aquí estás! -exclamó Theo, encontrandolo entre la gente.- ¿Qué hacías?

- Hablaba con Astoria.

- Oh. ¿Y?

Draco se encogió de hombros.

- Necesito un trago.

- ¿Así de mal? -preguntó Theo, sorprendido.

- No sé, en realidad. Fue raro. Pero ella se irá, yo seguramente retome mi viaje...asique ya está.

Ambos jóvenes se dirigieron a la barra donde pidieron dos whiskys de fuego.

- Ah, si...lo de la Magizoología. Tiene que viajar, algo me dijo Daphne...

Draco asintió, vaciando su vaso de un sólo trago.

- Bueno... tampoco es que no tengas opciones para elegir. -comentó Theo, señalando un grupo de chicas que le hacían ojitos al rubio.

- Paso. Gracias.

- ¿Quién eres tú y qué hiciste con Draco Malfoy?

- Se murió en la Batalla de Hogwarts. - contestó Draco con tono sombrío.

Theo tragó saliva, algo incómodo.

- Si no vas a dejarlo estar y vas a estar hundido en la mierda, ve a buscar a Astoria y no la sueltes más. Si no lo haces, luego no lamentes las consecuencias, amigo.

Draco no le respondió. No entendían lo difícil que era todo. Al menos para él. Se quedó allí en la barra, incluso cuando Theo se fue con Daphne. Al cabo de cuatro o cinco whiskys más, decidió buscar a su madre para decirle que se iba a casa. La encontró hablando con la señora Greengrass.