Capítulo 42

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Erick

Entre más rápido el auto avanza, más rápido el corazón late con ese martillazo doloroso que me rompe el tórax.

Casi corriendo salgo del vehículo en cuanto se estaciona frente al sitio donde freno en seco al ver la puerta abierta. No hay un solo ruido, tan solo el viento sopla en las ventanas causando que tenga cautela al entrar.

Papeles destrozados. Muebles rotos. Un lugar abandonado.

Ashley está inconsciente con líquido carmesí emanando de su cabeza pero no es a ella que me apresuro.

Ya que un charco de sangre es lo que veo y no es suyo. Se e nota que alguien tuvo que arrastrarse logrando que siga el rastro hasta que me lanzo al suelo al segundo siguiente que observo a Tom sosteniendo su costado. Tose con dificultad. Respira con gran esfuerzo.

__ Debes ir con ella. - presiono la herida oyendo pasos detrás mío. - Él se la llevó.

__ Debemos ir a un hospital. - digo para mí al ver la cantidad de sangre que sigue perdiendo. Su pulso está disparado. Su facies pálida solo confirma la gravedad del asunto.

Ethan me habla insistiendo en que los saquemos de aquí pero el que Tom me tomé de la camisa con gran fuerza los detiene.

__ Se la llevará a Bulgaria. Ve por ella. - me llena de sangre la ropa. Su determinación de morir a causa de no querer moverse a menos que le asegure que iré por su nieta es la misma que tengo por no solo prometerlo. - ¡Tienes que ir por ella!

Unas sirenas comienzan a escucharse. Pregunto a Ethan sobre si fue él y niega. Arthur está en las mismas, sin otro a quien hacerlo ya que Taylor no aparece por ningún lado. No lo veo.

Igual no es de mis prioridades el que se haya separado de todos. Salgo del lugar cuando una ambulancia se estaciona a lado de nuestros autos. Una chica y un hombre pasan corriendo con una camilla en lo que subo de nuevo.

__ Debes llamar de nuevo a tu contacto. - le digo a Ethan luego de subir. - Debe rastrear a Santiago para dar con él.

__ Lo estoy haciendo ya. - me dice con el móvil en la oreja, indicando que le contestaron - Necesito otro favor.

Comienzo a conducir saliendo de la carretera que no tiene ninguna desviación que me haga desconfiar de una posible salida cerca.

__ No requiero usar el programa de vigilancia para saber que hay una pista que pueden usar la mayoría de empresarios que tienen negocios ilícitos. - pone el altavoz - Con un pago en efectivo es útil tener algo que puedes manejar.

Me da la indicaciones de cual cruce tomar, siguiendo con un mapa que replica es difícil el acceso y lo confirmo en cuanto el terreno es asquerosamente complicado de conseguir una estabilidad permanente. Más aún con la oscuridad que me resta movilidad y libertad.

Debo maniobrar para no quedar atascados en el barro.

__ ¿Taylor está con ustedes? - pregunta Arthur cuando conecto su llamada.

__ No lo está. - es lo único que contesto.

__ Es extraño que haya desaparecido. Recibió una llamada y se fue sin decir una palabra. - me dice y no tengo tiempo para ponerme a averiguar sobre él también.

Lo que me interesa es llegar a tiempo. La carretera se vuelve pedregosa, es más fácil conducir. Hasta que una llamada me detiene cuando es Taylor quien insiste en que conteste.

__ ¡Detén el maldito auto! - grita entre dientes.

__ ¿Como sabes dónde estoy? - devuelvo una pregunta sin más que decir.

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