Kate me besó, de nuevo sentí todas esas mariposas, esas sensaciones que ella provocaba con tan solo mirarme y esta vez no había arrepentimiento, al contrario le brillaban los ojos, su piel estaba más suave de lo normal y sonreía en mis labios mostrando su felicidad que a mí me volvía loca. Me tumbe en el suelo bajo su atenta mirada posada en la mía sin perderme de vista. Se quitó la americana negra que llevaba, la dejo encima del apoya brazos del sofá y se tumbo encima de mi cogiéndome una de las manos para entrelazar nuestros dedos. No quería perder esta sensación, era la mejor, más que en toda mi vida de aquí para allá, ella era extraordinaria en todo su ser, me besaba despacio, pidiendo permiso con su lengua para introducirla y moverla tan despacio, que nuestros labios se seguían, se perseguían el uno al otro.
Siguió hasta que de mis labios salió un leve gemido ahogado. Entonces paró, se separó un poco y me miró. De verdad que no había duda, no había nada que me dijera sal corriendo, o peligro, solo eran sus ojos observándome de una forma tan dulce y bonita mientras yo me ponía roja y más roja por ese pequeño sonido. Sonrió apoyada en mi abdomen, beso mi mejilla y luego mi nariz.
—Mira ya no tengo que tocarme.
Expresó divertida provocando que me escondiera porque me puse más roja.Ella aprovechó para abrazarme por la espalda y dejar pequeños besos por mi antebrazo, nuca y hombro. —No tienes que sentir vergüenza por expresar como se siente tu cuerpo. —Susurro con la voz algo ronca. —El cuerpo reacciona así.
Notaba como sonreía en mi piel. No se separaba nada de mi, no dejaba ni un poquito de distancia entre nosotras, así que notaba su respiración constantemente, lo cual me provocaba más. Y se perfectamente que no era el momento, que ninguna de las dos quería, que solo estaba siendo cariñosa, dulce y cuidadosa.
Así que muy rápido me puse encima de ella de rodillas. Me miró dulce y asintió como si me diera permiso para hacer lo que me diera la gana. Bajé a sus labios y los bese muy despacio, sintiendo cada movimiento, apoyé una mano tras su cabeza, puse mi pierna derecha entre las suyas, pero sin tocar nada, y con la mano que me quedaba libre agarré su espalda para levantarla un poco. Ella cerró los ojos, y humedeció sus labios de una forma tan sensual que quise morir.
Bajé a su cuello y pase la punta de la lengua por el percatándome de cómo su cuerpo temblaba y como su mano libre me agarraba con fuerza atrayendome más a su cuerpo. Bese su mandíbula y esta vez tuve el valor de hacer algo que la hizo abrir los ojos como platos. Bajé a su escote ya que la camisa que llevaba estaba un poco abierta, hice fuerza en la mano que tenía tras su cabeza para que no me quitara, con la mano que tenía tras ella, la levanté un pelín las caderas, y con la pierna que tenía entre las suyas apreté. Kate hizo el mejor de los sonidos, fiesta para ellos, un sonido que jamás olvidaré, un sonido que erizo mi piel y provoco que ella me agarrara con tanta fuerza y escondiera su rostro en mi rostro dejando ahí su respiracion.
Estaba tan agitada que pensé que quizás me había pasado, pero entonces hizo algo que me hizo ver que no. Me dió un suave beso en el cuello, un beso de cariño.
—Perdoname, desde que lo deje con ese gilipollas no he tenido sexo, no me veía capaz, y llegas tú, y pones todo del revés.
Besó mis labios. —Ahora mismo creo que necesito una ducha, porque si vamos a seguir quiero que sea de la manera más bonita posible.Me dió la vuelta dejándome otra vez atrapada entre el suelo y ella.
—¿Te parece bien?
Asentí. —Todo contigo está bien Kate.
Bese sus labios. —¿Puedo hacerte una petición y una pregunta?—Por supuesto.
—¿Puedo quitarte yo la ropa? —Levantó una ceja. —No es nada sexual, es solo que quiero que te sientas querida.
Sonrió besando mi frente. —Claro que puedes, me da vergüenza pero puedes.
—Y lo otro es que... En la cabaña dijiste que me gustan mujeres autoritarias, no te considero así, nunca lo he considerado, de hecho creo que aunque te pones firme, con un beso te calmas.
—Me calmas. —Corrigió. —Te gustan las mujeres mayores que tú, que puedan dar cierta autoridad. —Me beso. —Pero luego te miro y veo ese brillo cuando me miras que me corrompe.
—Kate. —La cogí del mentón. —Realmente me gustas. En estos ocho meses no he parado de pensar en ti, y llegó un momento que quise olvidarte de verdad, pero no podía.
—Yo también. —Confesó. —Te he echado mucho de menos, hasta el punto que sin que mi padre se diera cuenta, preguntaba por ti.
—Vaya, mirala. ¿Crees que se habrá dado cuenta?
—Es muy probable, mi padre no es tonto, pero bueno es lo que hay, y yo estoy bien con esto. —Nos señalo. —Contigo. —Me beso lentamente. —No pienso escaparme más, me da un poco de miedo tú madre eso sí.
—No creo que tenga problema, le caes demasiado bien y quiere que yo sea feliz así que...
Kate me ayudó a levantarme, de la mano caminamos por el pasillo hasta llegar a su baño, tragué en seco, me daba algo de vergüenza, pero quería hacer esto para que Kate viera realmente cuanto me importaba. Apoye las manos de Kate en el lavabo, así podía verme mientras la quitaba la ropa. Cogí la cremayera de la falda sin parar de mirar sus ojos tras el espejo, la deslice despacio hasta el tope, entonces muy despacio quite su falda dejando desnudas sus piernas blancas como la nieve, pero en ningún momento mire más allá. Apoye mis manos en sus caderas observando como Kate cerraba los ojos y respiraba con cierta dificultad.
Conduje mis manos hasta los botones de su camisa y con mis labios completamente humedecidos y pegados a su nuca comencé a abrirlos, de uno a uno, Kate no me miraba estaba con los ojos completamente cerrados y la boca entre abierta. Cuando terminé deslice la tela por su piel sin mirar sus pechos, ni nada solo su espalda.
Kate se dio la vuelta. —De verdad no sabes el esfuerzo tan grande que estoy haciendo.
—Ya somos dos.
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Me encanta que os encante esta historia ❤️❤️❤️
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ℬℯ𝒻ℴ𝓇ℯ𝓁𝒾𝒻ℯ
Non-FictionTras la muerte de Susan, Eli intenta ser buena madre y que los servicios sociales no le quiten a su pequeña, pero todo sele complica ya que tiene que compartir la custodia con la joven Selena. ¿Serán capaces de quedarse con la niña? ¿serán capaces d...