"Unas pocas palomitas..."

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Mientras se duchaba terminé con su ordenador, quites varios programas, y al programa de vigilancia aparte de desactivarlo grave encima para que siempre se viera lo mismo, la habitación vacía. No sé cómo pudo ser capaz su ex de hacerle eso, es buena persona, es asombrosa en todos los sentidos, hacerle daño sería como clavarte un puñal a ti mismo. Si con solo sonreír te quita el aire, y tuvo la suerte de estar con ella como una pareja, formando algo juntos por los que muchos matarían. Esta claro que no sabemos lo que tenemos, estamos tan distraidos con otras cosas o con los celos o con la perdida que al final lo atraemos.

Escuché la puerta del baño abrirse, Kate no tardo mucho la verdad y enseguida escuché sus pies descalzos caminar por el pasillo, hasta que note su mirada clavada en mi nuca.

—Hola.
Miré hacia arriba, observando que estaba solo con un albornoz.

Sonrió de lado y se arrodilló a mi lado.

—He terminado, te he metido los vídeos en este pendrive, para que los tengas guardados pero no los veas aquí constantemente. —Asintió. —He bloqueado el programa con un sistema de reproducción constante, en pocas palabras, verá una habitación vacía constantemente.

—No tenías porque hacer todo esto.
Cogió el pendrive de mis manos, me dio un beso en los dedos que me hizo derretir me. —Gracias por volver a mi.

Aquello me pilló por sorpresa, no me imaginaba que me fuera a decir algo así, y menos tan sincera de forma que no apartaba sus ojos de los míos. Me acerqué lo más que pude y bese su frente, la senté encima mía y la bese disfrutando de cada parte de su boca y de sus labios tan tiernos.

—Kate... —Me levantó el mentón para que la mirara. —¿Que somos?

Kate sonrió y besó mi mejilla. —¿Estás preparada para que seamos pareja?

Abrí tanto los ojos que Kate se asustó, se alzó quitándose de encima.

—Si no estás preparada, no pasa nada Selene, de verdad podemos ir despacio.

—No es eso. —Me cogió las manos. —Es que nunca he llevado el control.

Sonrió y me abrazó. —Pues esto es cosa de dos. —Nos señalo. —Tu y yo, somos un equipo, si no quieres ponerle nombre de momento está bien, pero esto es un equipo. —Me beso muy despacio. —Nada de tú mandas o yo, tomamos decisiones juntas, hacemos el amor juntas, no hay autoridad aquí, yo no voy a ser tú madre, voy a ser tu novia, tú amante, tú amiga, tu compañera lo que tú quieras, pero no voy a mandarte, no voy a exigiste, no te voy a decir que puedes hacer y que no, eres adulta. —Entrelazó nuestros dedos.
—Somos adultas Selene.

No pude evitar lanzarme a sus labios, empujándola despacio hasta la mesa de su despacho, la ayude a sentarse mientras besaba su cuello, ella se abrió de piernas para que mi cuerpo entrara entre ellas. Apoyó sus manos en mis caderas dejando que yo me entretuviera con su clavícula y su mandíbula. Camine por su hombro el cual fui desnudando según lo iba besando. Kate respiraba entre cortada y sus manos apenas podían estarse quietas, se agarraban en mi espalda fuertemente. Metí mis manos por debajo del albornoz para acariciar sus piernas, Kate no paraba de gemir muy suave pero agarrándome cada vez más fuerte. Juegue con sus tiras mirándola primero buscando su aprobación, tampoco quería hacer nada que ella no quisiera. Ella me atrajo más y comenzó a besarme el cuello mordiendo lo de vez en cuando provocando que leves gemidos salieran de mis labios.

La aparte un momento y la miré a los ojos. Estabamos tan agitadas que apenas, al menos yo, podía ser coherente de mis acciones, acabábamos de reunirnos, tampoco quería llevarla ya a la cama.

—¿Quieres que paremos?
Dijo buscando mis ojos. Asentì en silencio porque temía que se enfadara o que no quisiera estar conmigo. —Vale, me visto y vemos algo en la televisión ¿Te parece?

ℬℯ𝒻ℴ𝓇ℯ𝓁𝒾𝒻ℯDonde viven las historias. Descúbrelo ahora