𝐅𝐚𝐢𝐧𝐭 𝐕𝐨𝐢𝐜𝐞

Capítulo XXXV

La semana pasó tan rápido y pronto su madre ya entraba por la puerta principal de la casa, Hyunjin quiso huir cuando la mujer cambió de expresión al verlo ahí.

-Hola señora Won.-dijo levantándose del sofá y apresurándose a tomar sus maletas para llevarlas dentro.

-¿Dónde están mis hijos?-dijo empujando levemente su hombro.

-Están en el patio trasero con el s-señor Won.

-Acomoda mis cosas y no quiero que bajes, estaré con mi familia.

Hyunjin asintió y subió las maletas de su madre hasta llegar a su habitación. Acomodó cada prenda en su lugar y por último guardó las maletas vacías arriba del closet, salió de la habitación y se metió a su habitación.

Se asomó por la ventana siendo espectador de como sus hermanitos jugaban con su padre a la pelota, su madre los veía y reía.

Inconscientemente sonrió al verlos tan felices.

-Jihwa, ¿dónde está Hyunjin?

Al escuchar su nombre corrió a su cama para evitar ser visto por la ventana.

-Yo que sé.-contestó bebiendo de aquella cerveza.-A lo mejor está haciendo tarea.

El rubio comenzó a buscar su mochila para verificar si no tenía algún pendiente, debía hacer algo para distraerse.

Escuchó pasos y comenzó a temblar de miedo, creyendo que sería su madre para reprenderlo.

Escuchó que tocaron la puerta tres veces y corrió a abrir esperando los gritos.

-Hyunjin, ¿estás ocupado?

Le sorprendió que fuera el señor Won y en el momento que escuchó su voz se escondió un poco detrás de la puerta.

-No, ¿ne-necesita qué haga la cena, señor?

-Claro que no, ¿por qué harías la cena, Hyunjin?-preguntó confundido por eso, no entendía el comportamiento del chico pues desde hace una semana siempre hacía ese tipo de preguntas y todo el tiempo permanecía en su habitación.-Te hablé por si querías venir al jardín con nosotros, estamos jugando a la pelota y tus hermanitos quieren que juegues también.

Su corazón dió un brinco por la emoción y estuvo a punto de decir que sí pero se detuvo antes de hacer tal tontería.

-No puedo... yo debo... debo hacer algo.

-Oh está bien, no pasa nada si dices que no, ¿quieres cenar pasta?

¿Por qué preguntaba eso?

-¿Quiere qué hoy haga pasta?

-No, no cocinarás.-responde sonriendo, intentando que el chico se relaje pero parecía demasiado nervioso y eso le preocupaba demasiado.

-¿No?

-No, es mejor que te deje hacer tus cosas Hyunjin.-dijo alzando su mano en forma de despedida e iba a irse pero el rostro del menor estaba peor.