Capítulo X. Help them

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Chris se encontraba en las gradas pero ahora de la cancha de básquetbol, pasaron ya tres días desde que llevó al chico a la enfermería. No ha querido ni acercarse porque se sentía culpable y no sabe por qué.

Alzó la vista al estar hastiado de escribir como un loco, pero sonrió inconscientemente al recordar al chico fumador, era tan lindo y esa sonrisa encantadora le hacía sonrosarse.

Miró hacia la cancha cuando escuchó algo rebotar y se llevó la sorpresa de que ahí estaba el chico fumador y el chico de la silla de ruedas.

Le bajó todo el volumen a la música para escuchar y ver a gusto lo que hacían.

-Mira esto.-dijo aquel chico rebotando la pelota y lanzándola hacia la canasta, había fallado tan torpemente porque tropezó con sus agujetas. Quiso reírse a carcajadas, pero que gran sorpresa se llevó al escuchar una risita suave.-Oh Dios mío mi cadera~...-dijo fingiendo dolor mientras se retorcía en el suelo, la risita se convirtió en una carcajada y miró al chico en la silla.

Estaba riéndose, era la primera vez que escuchaba su risa.

-Ahora inténtalo tú, yo fallé pero seguro y tú encestas.-se levantó del suelo y puso la pelota en sus manos.-Recuerda, es con suficiente fuerza y hacia arriba. A la cuenta de uno... dos... ¡tres!

El chico lanzó la pelota hacia la canasta, la falló pero estuvo más cerca de encestar.

-¡Wow! ¡Por poco y le atinas! ¡Muy bien Minnie, chócalas!-chocó su mano con la del chico y luego le vió dar pequeñitos aplausos.

Sonrió inconscientemente al presenciar la escena, parecían ser muy cercanos y tener una buena relación.

Fue cuando se detuvo a procesarlo, ¿será que son pareja y qué por eso es muy protector con el chico? Pero no parece porque el mayor coquetea mucho con cada persona que ve. ¿Será su hermano? Pero no compartían el apellido.

-¡Ay vamos!-se quejó a gritos cuando la pelota no entró a la canasta por cuarta vez.-¿Qué escribes?

Lo vió arrodillarse frente al chico y leer lo qué había escrito, después lo vió levantarse y mirar en su dirección.

Entró en pánico cuando hicieron conyacto visual y fue peor cuando caminó hasta la grada ¡donde estaba sentado!

-Hola lindo.-saludó recargándose en el tubo.-¿Qué haces?

-Ah... yo...-bajó la mirada a su libreta y la alzó.-Sólo escribo y escucho música.

-Ah, muy bien. ¿Has escuchado lo qué pasó aquí?-dijo señalando hacia atrás donde el chico de la silla les daba la espalda.

-No, para nada. Sólo he escuchado mi música pero hice una pausa porque creí escuchar algo... y eran ustedes.-habló tan rápido que se sintió todo un idiota.

-¿Y qué escuchas?-se saltó los tubos y se sentó a su lado, bajando la vista de su cara al teléfono.-Wow, Faint de... Linkin Park... es muy buena canción eh.

Chris asintió apagando su celular y cerrando la libreta.

-Creo que... debería irme.-dijo guardando sus cosas en su mochila, sin importarle si revolvía todo.-Adiós.-iba a levantarse para huir pero el fuerte agarre del chico en su brazo le hizo volver a sentarse.-¿Q-Qué pasa?-miró sus ojos, habían cambiado por completo, antes tenían un brillo, ahora parecía que iba a matarlo con la mirada.

-¿Crees qué no lo sé?-le dijo soltándole la mano.

-¿S-Saber qué?-susurró a duras penas, no entendía que pasaba ni a que se refería.

𝐅𝐚𝐢𝐧𝐭 𝐕𝐨𝐢𝐜𝐞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora