Capítulo XXIX. What's wrong?

488 63 16
                                    

-Perdón.-habló intentando tocar los pies de su tía pero ella siguió ignorándolo y alejándolo con su pie.-Por favor.

-¡Ya cállate Seungmin! ¡Entiende que no estoy enojada!-gritó alejándolo con su pie como si fuera un perro molestoso, lo pateó del hombro para que se alejara pero el menor volvió a arrastrarse.

-Por favor.

-¿Qué quieres? Ya te di de comer y ya fuiste al baño, ¿qué?

-Por favor.

-¡¿Qué quieres?!-gritó alzándolo de la ropa para que se sentara.-¿Qué quieres?

-Abrazito por favor... tengo miedo.-ya era de noche y debía estar durmiendo pero tenía miedo por alguna razón y siempre necesitaba un abrazo antes de dormir, no necesitaba regaños ni gritos o empujones.

-Ya vete a dormir.-lo soltó y lo vió caer al suelo para seguir rogando, le desesperaba tanto esa actitud y le quedó agarrar su brazo y llevarlo a su habitación a rastras.-Duérmete ya, mañana ya es viernes.

Cerró la puerta, aún sabiendo que a Seungmin no le gusta tener la puerta cerrada pero ella lo hizo, suspiró cuando escuchó un fuerte golpe y luego golpes en la puerta.

-Por favor, por favor.-decía llorando a mares, la habitación estaba demasiado oscura y la tía Lee no encendió la lámpara de ositos.-Por favor, por favor ven.-golpeaba la puerta para que abriera pues no podía alzarse para abrirla, se sentía débil para hacer eso.-Por favor ven, por favor... un abrazito.-rogó aumentando la fuerza.-S-Sólo uno.

La mayor sin preocupación alguna siguió mirando televisión sin darse cuenta que Seungmin se quedó al lado de la puerta por toda la noche, esperando que abriera para un abrazo.

Pero ella no abrió la puerta hasta horas después.

Sin haber visto abrió la puerta y casi le aplasta la cara pues estaba dormido ahí, en el suelo.

-Niño berrinchudo.-susurró agachándose y tomando sus brazos, lo arrastró al baño y justo estando ahí el menor despertó llorando.-Báñate que es tarde, y deja tu berrinche.

Seungmin siguió llorando, recordando todo el miedo que tuvo por toda la noche y la angustia de no estar acompañado, extrañaba a su madre.

-¡Seungmin por favor! Voy a bañarme y cuando regrese quiero que ya estés listo.

Obviamente no iba a estar listo porque nadie podía ni moverse, no entendía porque lloraba de esa manera, como si algo malo hubiera pasado o como si lo hubieran golpeado.

Obviamente su llanto aumentó cuando minutos después su tía llegó al baño y ya estaba lista, él no, él seguía en el suelo con la misma ropa de ayer.

-¿Qué fue lo que te dije?


[...]


Yunho se había despertado temprano, más temprano de lo normal pues quería llegar antes de Seungmin para ver de nuevo a su madre o a quién creía que era su madre.

Y ahí estaba en el estacionamiento, mirando atentamente esa camioneta que sabía que llegaba Seungmin desde hace una semana, sintió el frío llegar a su cara cuando salió del auto en el que había permanecido dentro por más de veinte minutos, todo por esperar.

-P-Por favor.

Seungmin lloraba mientras la mujer armaba la silla, siempre se veía enojada pero esta vez se veía normal. Cuando terminó de armar la silla se aproximó a donde el menor estaba sentado, sin pudor alguno tomó su brazo y lo dejó caer en la silla con fuerza, cerró la puerta de la camioneta y también le dejó caer la mochila en las piernas.

𝐅𝐚𝐢𝐧𝐭 𝐕𝐨𝐢𝐜𝐞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora