GOLDEN - 𝑯.𝑺

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GIANNA

Si era completamente honesta gran parte del crédito de la sorpresa de Navidad que le había dado a Harry se lo debía a mi amiga Holly, quien llevaba ya varios años viviendo en Japón y por tanto logró planear todo para nuestra repentina llegada, consiguiéndonos un pequeño apartamento en Tokio que me encargué de rentar por cinco semanas, que era el máximo de tiempo que Jeff nos había dado de "vacaciones" antes de regresar al estudio de grabación.

Los primeros días habían sido estupendos, habíamos salido a caminar agarrados de la mano sin preocupación, habíamos recorrido la ciudad en bicicletas por las noches, probábamos comidas en diferentes restaurantes, cenábamos en casa de Holly, quién aún seguía sorprendida por el hecho de que le hubiese mantenido en secreto la identidad de mi novio por tanto tiempo, y visitábamos la galería en la que en ese momento estaban expuestas las obras de mi amiga, mientras Harry le recalcaba una y otra vez lo mucho que amaba el mural de margaritas y girasoles que ella había pintado en la casa de Notting Hill que yo antes compartía con Marian.

Básicamente pasé tiempo con mi novio y con una de mis mejores amigas que llevaba años sin ver, así que era como un sueño hecho realidad.

Hasta que un día Harry me comentó que había llamado a uno de sus amigos que vivía en Tokio y éste lo había invitado a su casa para reunirse con otros amigos.

Ni siquiera sabía que Harry tenía conocidos en la ciudad.

Sin embargo acepté con una sonrisa y lo acompañé, pues él había hecho lo mismo con Holly.

Lo primero que comprendí fue que su amigo no sabía que yo también iría, porque estuvo sorprendido en el momento en que comprendió que Harry no había asistido solo.

—Gianna, este es mi amigo, Kunichi Nomura. —nos presentó con una enorme sonrisa después de haber saludado al hombre con un fuerte abrazo.

Él me saludó con un leve movimiento de cabeza, que repliqué, mientras él seguía enfrascado en su conversación con H.

—Aún no puedo creer que Camille y tú hayan terminado, eran tan perfectos juntos. ¿Sabías que nos referíamos a ustedes como Cherry? Ya sabes, porque siempre se llamaban chéri y porque es como sus dos nombres juntos, en fin.—lamentó— Todavía recuerdo cuando ella te trajo con nosotros por primera vez, ustedes tan sólo llevaban unos cuantos meses de relación pero era obvio que tenían una conexión única, y siempre tenían que tener las manos en el otro. Nunca entendí por qué terminaron, fue todo tan repentino.

Lo segundo que  comprendí fue que los amigos de Harry eran también amigos de Camille. De hecho, eran originalmente amigos de ella. Estas eran las personas que él había conocido por su relación con ella y seguían siendo bastante cercanos.

—Las cosas no se dieron. —dijo Harry sencillamente, tratando de esconder el rubor en su rostro. — Pero terminamos en buenos términos, sabes que ella es simplemente maravillosa.

—Lo sé, lo sé, es sólo que ustedes se veían tan felices juntos— insistió Nomura—, en fin, me alegra que al menos sigan siendo amigos, ¿Supiste que ella y Theo pasaron las fiestas con la familia de él?

Harry asintió.

—Me lo comentó cuando la llamé para desearle una feliz navidad.

Lo tercero que comprendí fue que Harry y Camille seguían en contacto. Que de hecho la había llamado en algún momento de nuestra escapada a Japón.

—Ella suena feliz.

—Sí—estuvo de acuerdo H—, me alegro mucho por ella, lo merece.

—¿No es extraño para ti? Sé lo mucho que la amabas.