Capítulo XLIII

58 6 57
                                    

Narración general

La pelea continuaba entre la ambas pelinegras. Como ambas se jalaban del cabello y del vestido, rápido se escuchó la tela rompiéndose poco a poco.

En pocos minutos, ambas pelinegras quedaron con algunos trapos colgando, pues poco más había quedado de sus vestidos.

Miku llena de rabia se abalanzó sobre Fumiko terminando de desgarrar lo que quedaba de su vestido, dejando a la Uchiha en paños menores, aunque tal cosa pareció no importarle y ella también se aseguró de terminar de arrancar el vestido de su contrincante, de modo que ambas quedaron en paños menores.

Los invitados desde luego que no apartaban la mirada, estaban maravillados viendo a tan hermosas y sexys mujeres en ropa interior, de modo que sus mejores atributos eran exhibidos más que nunca, dejando casi nada de espacio a la imaginación.

Cuándo estaban por darse ambas el siguiente golpe. Yami se atravesó en medio de ambas para detener la pelea.

—¡Ya basta!— gritó el pelirrojo. Miku logró detenerse a tiempo, pero Fumiko que estaba tan metida en la pelea no sólo golpeó a Yami directo en el rostro, sino que además lo embistió y terminó cayendo sobre él.

Todos veían la situación en completo silencio.

—¡Maldita perra! ¡Quítate de encima de él!— Miku trató de atacar nuevamente a Fumiko, pero esta vez fue detenida por Tsubasa.

—Ya fue suficiente, esta es mi casa y la vas a respetar te guste o no. Ahora ven, te daré algo de ropa para que te pongas— Tsubasa se llevó a Miku bastante molesta, al hacerlo le guiñó el ojo a su amiga Fumiko.

Fumiko comprendió y se paró bastante apenada de encima de Yami.

Yami se puso de pie y de inmediato se quitó su gabardina. Que era de un color rojo oscuro con detalles negros.

Se la presto a Fumiko para que se la pusiera y se ofreció a llevarla a su casa, cosa que Fumiko aceptó.

Ambos se fueron y por su parte Tsubaki hablaba con su madre de lo sucedido.

—Nunca me imaginé ver a la hija de Mikoto protagonizando tal escándalo— comentó ella.

—Pues ya ves hija, después de todo por sus venas corre la sangre Uchiha. Esa niña tiene un carácter muy fuerte. Tal vez demasiado. Lo que me sorprende es que hiciera esto sin estar aquí Shikamaru, el hijo de Yoshino. Hasta dónde yo sabía Fumiko estaba perdidamente enamorada de él, incluso Mikoto me comentó que pensaba que lo de su hija era una obsesión con el hijo de Yoshino, ahora resulta que está interesada en un Uzumaki. No cabe duda que el tiempo lo cura todo— Tsunade miraba como Yami se fue con Fumiko de su casa. Por lo que todos los invitados volvieron a lo suyo.

—Y ya que sacaste el tema del tiempo. ¿Ya superaste tu duelo por mi padre?— preguntó Tsubaki.

—Hija, si no te molesta, prefiero hablar de eso en otra ocasión— Tsunade volvió a la fiesta y Tsubaki sólo se quedó mirando.

—Ay el amor joven. Me preguntó si mi hija tendrá a alguien— dijo Tsubaki para si misma, pues ahora que lo pensaba, jamás había hablado con su hija de ese tema y tampoco recordaba que Tsubasa le hubiera mencionado algo.

............

Yami conducía y Fumiko iba en el asiento del copiloto, ninguno de los dos había dicho una sóla palabra desde que salieron de la casa de Tsubasa.

Fumiko no sabía que decir, le encantaba decirse a ella misma y a los demás que era cosa de proteger a su amigo, pero después del escándalo que armo ese noche con lo que a ella le gusta armar escándalos, hablaba por si sólo. Ya empezaba a creer que lo que le había dicho su amiga de los celos era algo muy real.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 16, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Presión social [ShikaTema y más] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora