Capítulo X

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Narración general

La fiesta estaba comenzando, las canciones sonaban y el ambiente era el ideal para desatar a la juventud.

Baile y alcohol parecía ser el gusto de mayor interés en todos los presentes.

Firem estaba con Ukyo en una mesa de tres asientos, claro que su amigo Baru ya se había retirado hace bastante rato del lugar.

Los dos amigos bebían algo de cerveza, no es tan divertido ir a una fiesta cuándo no bailas y no conoces a nadie, normalmente se piensa que todos los que van a una fiesta se divierten, pero no. Muchos son arrastrados por sus amigos, al igual que Firem y Ukyo por Baru.

—Ese mal agradecido, aún cuándo lo acompañamos nos dejó aquí tirados— dijo Firem dándole otro trago a su cerveza.

—Ya sé, pero creo que era algo obvio, mira a tu alrededor, llenó de jovencitas por todos lados, muchas solteras y muchas otras que aunque tengan novio. Vinieron aquí a divertirse y el novio pasará a segundo y tercer plano, si llegan a encontrar a alguien más simpático. Ya sabes. Los típicos "encuentros de una noche"— explicó Ukyo.

—Baru parecerá alguna clase de depredador sexual— dijo Firem quejándose del mal comportamiento de su amigo.

Mientras seguían bebiendo, un grupo de chicas de una mesa cercana comenzaron a mirarlos sin nada de disimulo.

Ukyo y Firem se percataron de aquello, más cuándo una de las chicas que miraba al castaño le guiñó un ojo, seguido de una mirada muy sugerente cosa que sonrojo a Firem.

—Ves, es lo que te digo, todos estos jóvenes y jovencitas tienen sus hormonas a flor de piel— concluyó Ukyo al ver la forma tan descarada en que esa chica miraba a su amigo. Era cómo si con la mirada aquella chica le dijera "hazme tuya".

Firem sólo desvío la mirada, esta clase de actitudes en una mujer suelen ponerlo nervioso, más aún si van dirigidas a su persona.

............

Karito y Chouji estaban muy tranquilos, apesar de lo alto de la música, se sentían tranquilos, sólo esperaban que esa repentina escapada de su amigo no significarán problemas.

Tan metidos estaban en sus pensamientos, que ninguno de los dos se percató de la llegada de un sujeto bastante peculiar.

—Hola, mucho gusto señorita— saludó Baru a Karito ignorando por completo a Chouji apesar de estar en la misma mesa.

—¿Qué tal?— saludó Karito levantando su mano.

Antes de que la bajara de nuevo, en un hábil movimiento. Baru atrapó la mano de Karito con la suya cosa que sorprendió un poco a Karito y aún más a Chouji quién era nada más que un mero espectador.

—Me presento hermosa, mí nombre es Baru— dijo él besando la mano de Karito.

Ok, eso parecía muy raro, después del beso, la Sarutobi le hizo el quite pero, sin parecer una grosera.

Aún así se sentía algo incómoda, de que un extraño la estuviera llamando hermosa y besando su mano. Más aún cuándo ni siquiera lo conocía.

—Yo soy Karito y él es Chouji— la castaña se presentó y también a su amigo.

—Aja sí, claro, oye ¿quieres ir a bailar?— le preguntó Baru a la castaña extendiendo le su mano a la Sarutobi.

Esa actitud le decía a Karito que podrían significar problemas, esa manera de pedírselo no le inspiraba confianza.

Karito miró a su amigo quién le indicó con la cabeza que no se preocupara por él, que si quería fuera a bailar.

"Chouji tan inocente que no ve las intenciones de las demás personas" pensó la castaña y de nuevo miró al tipo que seguía con la mano extendida.

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