Lara

68

—Está lloviendo.

Fue una noche oscura y lluviosa. Acompañando a la lluvia brumosa había una espesa niebla que fluía río abajo. El camino adornado con lámparas que se extendía por el horizonte se había mojado. Lara se puso una capa larga y se subió al caballo. Demian esperaba a que subiera a salvo, que miraba la niebla que fluía suavemente.

—¿Lo encontró?

—No sé.

Recibieron un mensaje del príncipe heredero Acerus. Para ser exactos, le pidió al posadero que organizara una audiencia con Santa Lara y Demian.

—Vamos.

Salieron de la mansión a través de la neblina y se dirigieron hacia las afueras de la capital. Las calles estaban tranquilas porque era muy tarde por la noche y más aún por la lluvia. Los soldados que hacían guardia también se quedaron en un lugar, apenas moviéndose.

El posadero los estaba esperando con solo una débil lámpara encendida en la entrada.

—Hola señor.

—Bienvenido.

—Lamento haber venido tan tarde.

—Está bien. De todos modos, no es hora de que me duerma.

El posadero salió por la puerta y tomó las riendas del caballo de las manos de Lara. Se formaron gotas de lluvia sobre su húmedo cabello gris. Al entrar en la posada, se quitaron las capas y bajaron directamente al sótano. El posadero lanzó un largo hechizo y pronto se encendió la vieja lámpara.

—Acerus.

Cuando Demian abrió la boca primero, la voz apagada del Príncipe Heredero salió de la lámpara.

『—¿Está la santa ahí?』

—Si, estoy aquí.

『—Haa ... Primero que nada, hola.』

Acerus sonaba realmente cansado.

—Hola, Alteza Imperial. Supongo que algo está pasando. ¿Estás bien?

Lara solo preguntó qué estaba haciendo por cortesía. Estaba lidiando con el Príncipe Heredero del país más vasto del continente. Pero en el momento en que Lara le preguntó amablemente cómo estaba, Demian chasqueó brevemente la lengua.

—Maldita sea.

Y Acerus empezó a cantar blues.

『—Estaba pensando en asignar unas 300 personas para cumplir con su pedido, pero no creo que el templo deba saberlo. Así que les di un montón de oro a las personas que secretamente podían hacer un trabajo a largo plazo y les ordené que comenzaran de inmediato. 』

El sótano silencioso se llenó con la voz de Acerus.

『—Pero ni las reliquias de hace 100 o 500 años tenían registros de tal dios. Incluso robé los registros que escondía el Templo de la Gloria ... Vaya, ¿qué he hecho? 』

—¿Entonces?

'El Príncipe Heredero es hablador.'

Lara pensó que era mejor dejarlo llegar a la conclusión rápidamente, así que le pidió a Acerus que continuara. Luego, continuó explicando con más entusiasmo.

『—Dijiste que es un Dios que no tiene ningún objeto simbólico, ¿verdad? Solo un Dios ordinario con los brazos abiertos. Lo que es fascinante es ... que aquí no había tal estatua en la sala de oración del templo. Y he buscado en todas las salas de oración existentes, fíjate.』