Nunca te quedes con el primer vagón {COMPLETA}

Capítulo 61

Abril's P.O.V

Ya es navidad, César y yo nos estamos preparando para la comida con mi familia.

-Erika, te he dicho que no iré.-escucho que discute por teléfono cuando me acerco al salón.

César ha pasado la noche aquí, bueno, como muchas otras veces.

Suelo llegar muy cansada después de trabajar pero cuando le escucho picar la puerta, me lleno de energía y podemos pasar toda la noche despiertos.

Practicamos sexo casi cada noche y luego hablamos hasta quedarnos dormidos. La mayoría de veces son conversaciones sin importancia, pero la otra noche quise indagar un poco más.

-¿Has pensado en lo de tu familia?

Percibo cómo César frunce el ceño pero sigue enrollando su dedo en uno de mis rizos.

-Ya está bien así.

-César...

-Me puse en contacto con mi hermano hace un par de días.-escuchar eso me sorprende, pues no me había dicho nada.

-¿Y bien?-me incorporo un poco para que el sueño no me venza.

-Saltó el contestador y no me ha llamado de vuelta.-escucho el tono triste de su voz y solo quiero alegrarlo con besos.

-Tal vez no sabía que eras tú.

-Tengo el mismo número.

-Ha podido perder los contactos, o su móvil se estropeó, tal vez él...

El tatuado besa mis labios para que me calle y yo retengo el aire en mis pulmones.

-Da igual, todo va bien.

-¿Todo bien?-le pregunto cuando cuelga la llamada.

-Sí, Erika insistía en que fuera con su familia pero ya le he dicho que tengo otros planes.

Me alegra saber que no me miente ni intenta evitar hablar sobre ella.

-Por cierto, Lucas ya está en el parque.

Arreglo mi ropa y agarro mi bolso para ambos salir hacia la calle con nuestros dedos entrelazados.

-¿Voy bien?-miro otra vez mi atuendo algo nerviosa.

-Es solo mi jefe, no el papa de Roma.-suelta una carcajada y yo muerdo mi labio nerviosa.

-Quiero causar buena impresión.

Sé que Lucas es ahora mismo una de las personas más importantes de su vida y odiaría llevarme mal con él.

-Estás increíble.

-Eso no cuenta porque me lo dices siempre.

-Eso es porque siempre lo estás.-dibujo una sonrisa tonta y veo el lugar donde hemos quedado de fondo.

-¡Lucas!-le llama y suelta mi mano para abrazarse a él.-¿cómo va?

-Bien bien, Andrea está ahí con el niño.-señala unos columpios y veo a un niño de ojos azules reír mientras se balancea.

La chica que le empuja viene hacia nosotras con el bebé el brazos.

-César, al fin llegas...

Ella le lanza una mirada y una sonrisa que hacen que todo mi cuerpo tiemble.

Estos dos han tenido algo antes, eso seguro.

-Tu debes de ser Abril.-escucho que dice otra vez su jefe.