Capítulo 63

63 5 11
                                    

Abril's P.O.V

Cierro mis ojos y tan solo escucho la respiración acelerada de César.

Él ha tomado el control y al final he acabado tumbada en la cama mientras él me penetra.

-Vamos, César...

Pienso en la sorpresa que tengo preparada y me inquieto, tan solo espero que le guste porque me ha costado mucho.

-Abril...-gime en mi oreja antes de besar mi cuello.

Noto su pene al completo y me sorprendo al notar tanto la diferencia sin usar condón. Esta es mucho mejor.

-Más rápido, por favor...-le suplico mientras intento moverme.

Él aumenta un poco el ritmo mientras gruñe contra mi piel.

-Te quiero, Abril.-sonrío al escuchar como le falla la voz y le tiemblan las piernas.-pase lo que pase.

Me alegra escuchar eso, porque puede ser que al final del día me acabe odiando. Nunca me he puesto tan nerviosa por un regalo de navidad.

-Tenemos que irnos...-no me gusta meterle prisa pero la tenemos.

Sus movimientos son más desesperados y sus huevos chocan conmigo mientras él se apoya para tener un poco de equilibrio.

Necesito llegar al orgasmo con urgencia, así que bajo una de mis manos y muevo mi clítoris con fuerza.

Suelto pequeños gemidos que van en aumento y es César quién los opaca con una sesión de besos.

Mis piernas comienzan a temblar y mi vientre sube y baja por mi respiración irregular.

-Cariño, ya llego...-me avisa entre un beso y otro.

Quisiera responderle que yo también pero su boca no me abandona hasta que su semen impacta contra las paredes de mi interior.

Es una sensación extraña pero placentera.

Él intentó salirse, pero le apreté para que no me abandonara. Si me hubiese manchado toda la ropa sería difícil de explicar.

Nunca antes nadie se había corrido dentro mío y sentirme llena de su líquido me hace explotar en un orgasmo.

César recuesta su cabeza en mi pecho para controlar su respiración mientras su dureza baja en mi interior.

Mis dedos viajan a su pelo y le acaricio mientras escuchamos las respiraciones del otro.

-Me quedaría así para siempre...-empiezo a decir.-pero de verdad tenemos que irnos.

-¿Tan importante es esa sorpresa que no puede esperar?-río por su comentario y le empujo para que se salga de mí.

Su miembro ya está fuera pero aún así le digo sintiendo en mi interior.

-Te amo.-beso sus labios antes de levantarme con su ayuda.-si tu quieres mañana mismo compro la pastilla del día después.

Él levanta las cejas mientras me deja acariciarle el pelo.

-Tu decides.-da un corto pico en mis labios.

...

Caminamos con las manos entrelazadas y yo miro cada rincón del parque. Me ha llegado un mensaje diciendo que mi sorpresa había llegado.

-¿Yo tambien tengo que buscar mi regalo?-se ríe mientras yo me sigo comportando como Scobby Do cuando huele comida.

Suelto una pequeña carcajada mientras reviso mi móvil para comprobar la ubicación.

Ya queda poco.

-No irás a regalarme la adopción de una ardilla, ¿verdad?-niego divertida mientras él tiene una sonrisa.-te dije que siempre he querido un pingüino.

-¡Ya me has fastidiado tu regalo de cumpleaños!-bromeo dándole un golpe y él estalla en carcajadas.

César está tan ocupado riéndose e intentando hacerme cosquillas que no se da cuenta cuando llegamos.

-¿Hermano?-el cuerpo de mi novio se tensa y levanta la mirada hasta encontrarse con esos ojos oscuros.

Abro mi boca ante la incredulidad de la situación.

Literalmente tengo dos novios.

No me dijo que eran gemelos.

-Sigues igual.-continua hablando el no-César.

El tatuado no dice ninguna palabra y tan solo observa a su versión sin tinta en la piel.

-Cariño, di algo...-me giro para dejar las manos en su pecho y desvía la mirada hacia mí en un pequeño instante.

-¿Qué?

-Sorpresa...-murmuro intentando descifrar lo que piensa.-desde que me hablaste de tu situación con tu familia no le he dejado de buscar por si tú un día...

-No deberías haberlo hecho.-su voz suena tensa cuando me interrumpe y se aleja un poco de mí.-era él quién debería haber venido hace mucho tiempo.

Creo que no está disfrutando de esta situación.

Debo reconocer que en mi cabeza habían lágrimas de felicidad y abrazos de reencuentro.

-Nunca he dejado de buscarte, César.

Me separo un poco para que hablen entre ellos.

-A los tres meses ya te buscaba y llamaba pero no contestabas.

-Dejaste de pagar mi teléfono, ¿cómo se suponía que iba a funcionar?

Está enfadado.

-Pensaba que...

-¿Qué tenía un bolsillo de ahorros?-suspira y suelta una risa seca.-estuve casi un año viviendo en la calle, Oliver.

-No lo sabía.-traga saliva y da un paso hacia delante.

-¿Cómo ibas a saberlo?

César da varios pasos hacia atrás y acaba alejándose.

-Esto es inútil.

El hermano gemelo quería ir detrás de él pero le digo que espere para adelantarme yo.

-César.-le llamo una y otra vez pero no se gira.

-Debiste preguntarlo antes.-me dice apretando la mandíbula.

-No entiendo porqué estás enfadado...-niego con la cabeza y consigo pararle el paso.-él te ha buscado durante años y ahora está a tan solo unos metros de ti.

-¿Y por qué tú lo has encontrado en unas pocas semanas y él no lo ha conseguido durante diez años?-hace una mueca y me mira.-fácil, eso es porque miente.

-César, digamos que no eres un tío de lo más localizable...-río recordando una de nuestras conversaciones.-tu mismo dices que las redes sociales como Instagram son solo para gente sin vida.

Él no sonríe y continúa apretando la mandíbula. Agarro sus puños para tranquilizarle de algún modo.

-Tan solo dale una oportunidad y no te enfades conmigo por hacerte esta encerrona.

-Nunca podría enfadarme contigo, pero con él...

-Hablé con tu hermano por teléfono y sin conocerme de nada, sin saber qué yo decía la verdad...gritó y lloró de la alegría cuando le dije que su hermano quería hablar con él.

César duda un instante.

-Solo dale está oportunidad, yo esperaré aquí por si necesitas escapar.-le intento convencer.-si te vas ahora, te arrepentirás.

Él se toma un tiempo para dibujar una pequeña sonrisa y me pilla desprevenida cuando da un pequeño beso en mis labios.

-No sabes cuánto te quiero.-el beso se alarga y me obligo a cortarlo.-eres la mejor.

Empujo de su pecho para que se vaya y observo cómo camina nervioso hasta saludarse con su clon sin tatuajes.

Sexnolove

Nunca te quedes con el primer vagón {COMPLETA}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora