Nunca te quedes con el primer vagón {COMPLETA}

Capítulo 51

Abril's P.O.V

-¡Fraaan!¡Suéltale!-intento ir detrás de él pero la voz de mi padre me hace quedarme en el sitio.

-¿Quién es él?

-¡Le hiciste mucho daño a mi hermana!-le empuja contra un árbol.-¿¡Qué narices haces aquí!?

-¡Fraan!-vuelvo a gritar desde mi sitio cuando veo que hace más fuerza.

-Si desapareciste de su vida, lo hiciste para todo...-me acerco a ellos.-no puedes venir ahora como si nada, no dejaré que...

-Hermano, está todo bien.-le intento tranquilizar dejando una mano sobre su hombro.

No comprendo cómo puede estar tan alterado por verle.

La camisa de César, igual que su abrigo están arrugados y el pelo desordenado. En cuanto le he visto, he caido en la cuenta de que le echaba mucho más de menos de lo que pensaba.

Verle tan arreglado, tan...guapo. Ha hecho que se despierten emociones en mi interior, a pesar de toda la pena que llevo dentro.

-Te hizo mucho daño, Abril.-las palabras de mi hermano hace que vuelva a la realidad.

-Lo sé.-el rostro de César se ensombrece.-déjame hablar con él, por favor.

Fran me hace caso y vuelve a dejarlo en el suelo, no es hasta que se aleja un poco cuando el tatuado empieza a hablar.

-Lo siento, no quería armar una escena.-se arregla el cuello de la camisa.

-¿Por qué has venido?

-Yo quería...

-¿Aparecer por un día para luego esfumarte otra vez?-mi voz es entrecortada y él se acerca más.

-Abril...-las lágrimas vuelven a saltar de mis ojos.

-¿¡Qué!?-suspiro y escupo las siguientes palabras con asco.-¿Desaparecerás hasta el próximo funeral de mi familia?

-No hables así...-el chico limpia mis lágrimas.-odio verte sufrir.

Suelto una risa seca y me separo de él.

-No me mientas.

Voy a darme la vuelta pero me agarra de la muñeca.

-Suéltame.-le ordeno sin girarme.

-Entiendo que estés dolida.-cierro mis ojos con fuerza.-yo nunca quise hacerte daño.

-Entonces, ¿por qué te fuiste?-le miro a la cara y me sorprendo al ver sus ojos encharcados.-¿por qué no respondiste a mis mensajes?

-Todo es demasiado complicado.

-Te abrí mi corazón y tú lo has pisoteado.

César desvía la mirada.

-¿Qué piensas hacer para arreglarlo?

Él se sorprende por mis palabras y yo muerdo mi labio por decir eso sin pensar.

-Pensaba que querías perderme de vista.

-Yo nunca quise eso.-suspiro y me suelto del agarre.-ahora es mejor que te vayas pero...

Arreglo mi vestido antes de seguir hablando.

-No vuelvas a desaparecer.-vuelvo a limpiar mi cara por si hay algún resto de lágrimas en ella.-entiendo si no quieres nada conmigo, pero si quiero ser tu amiga.

Esas palabras duelen, mucho.

-Y después de este día voy a necesitar a un amigo que esté a mi lado.-mis ojos se conectan con los suyos.