Charlie Magne es la heredera de su familia que decide dejar su hogar para enrumbarse a construir su sueño, sin imaginar que en su camino encontraría algunos obstáculos que la harían encontrarse así misma al igual que haría nuevos amigos, en especial...
-¿Porque te ríes mi estimado...? - dijo Alastor a la sombra que se encogió de hombros y Charlie preguntó.
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-¿Qué quiere decir cuando hace eso...?
-Pues que ha recordado algo y no está muy seguro de dónde...
-No lo entiendo...
-Ya te dije que él como espectro está enlazado con sus anteriores anfitriones y los espectros de estos... puede ocurrir que las memorias de estos despierten por algún detalle que lo haga recordar el asunto... es raro que suceda pero no imposible, solo tiene un pequeño lapsus de dicho recuerdo, digamos un animal, un nombre o un objeto en concreto, eso le hace recordar algo relacionado que le haya sucedido con lo mencionado o alguna situación que lo relacione...
-Oh... ¿y que ha recordado...?
-No lo sé... solo dice que algo gracioso de la vida y no recuerda ni como empezó... es normal... teniendo en cuenta que los recuerdos de los ex anfitriones están profundamente en su interior, raras veces se reflejan ya que no recuerda quien o quienes fué en esas vidas... - siendo ayudado por Charlie mientras entraba en el baño.
-Suena interesante... - ayudándole a sentarse en el retrete con la pierna en alto - en verdad siempre se aprende algo nuevo... - cogiendo un cuenco con agua y unas toallas, remojó una toalla pequeña la exprimió y comenzó a asearlo por la espalda.
-Es una suerte que no haya algo en mi que no hayas visto o tocado... de lo contrario sería muy difícil para ambos esta situación... - sintiendo la toalla pasar por sus hombros.
-Aunque no hubiese sido así... haría un esfuerzo por ayudarte...
-¿Y eso porque...?
-Porque tu también me has ayudado de esta forma recuerdas... revisaste mi cuerpo para saber si estaba herida o no... me pusiste un camisón cuando estaba inconsciente y me aseaste sin tocar más allá de lo permitido... - ruborizándose - creo que de esas partes puedes encargarte perfectamente... - entregándole la toalla - solo limpiaré lo que esté permitido dentro de lo razonable como tu espalda, pecho, abdomen, brazos y piernas...
-Es razonable, no me suena muy agradable que toques esas partes tan privadas de mi persona... - viéndola pasarle otra toalla por el brazo - gracias por ayudarme... - una vez terminado ella lo ayudó a ponerse el pijama y luego lo recostó en el sofá.
-¿Estás seguro de que estarás bien...?
-Solo es una noche... no va a pasarme nada... - entregándole a la chica el muñeco negro - ve a descansar amor y deja esto en tú mesa de noche con la puerta cerrada... si necesito algo llamaré a Liam...
-Está bien... - con el muñeco en mano - buenas noches... y nada de moverse bruscamente o te castigaré... - encaminándose a la escalera.
-Jajaja... no veo como corazón... - ella se giró sonriendo dulcemente.
