Ese constaté movimiento de aquí para allá de Constantine, me está empezando a dar jaquecas. Ha estado así desde que nos levantamos a limpiar todo el primer piso de este lugar y se puso más ansioso al ver qué el joven King, no a salido a correr como suele hacerlo todas las mañanas.
Yo lo que estoy es hambriento, quiero desayunar. Me he acostumbrado a comer lo que prepara todas las mañanas, él es molesto e irrespetuoso y todo pero tengo que admitir que sabe cocinar y él siempre deja un poco para mí, aunque fueran solo las migajas, yo estaría feliz de tener un poco. He caído muy bajo.
—¿Qué crees que sucedió ayer por la noche?—Preguntó Constantine.
El jefe estuvo irritado por varias horas en la espera del Joven King, y este no se animaba en aparecer. Luego nos dio la orden de que nos fuéramos a descansar, algo que no es común en él. Nos dormimos hasta que el se va a descansar.
—De seguro el Joven King, se salió con las suyas.—Jacinto se encuentra muy concentrado jugando un videojuego de zombies en su celular.
No tengo porque meterme en sus problemas, yo solo me dedicó a proteger su seguridad y velar por su bienestar, esa es mi única responsabilidad. Sus raros problemas amorosos no es algo que me incuba.
—¿De que hablas?—Levanta una ceja en confusión.
—Es más ciego el que no quiera ver lo que está pasando entre ambos, Constantine.
El Joven King le trae hartas ganas a nuestro jefe. La pregunta aquí es; ¿Quién se comerá a quien? Es algo que en realidad no quiero saber ni imaginar.
Aunque Jacinto pensaba de esa manera, muy en el fondo sabía que su jefe, había caído en la guarida de un verdadero zorro entre los zorros. Un vil, calculador y perverso zorro vestido con piel suavecita de una ovejita.
—¡Estás imaginado cosas!—Lo ve molesto—Es obvio que a nuestro jefe, le desagrada los manoseos de ese joven insolente. Y si no le dice nada es porque simplemente el joven King, aprovecha las oportunidades dónde nuestro jefe, no puede salir de su papel de "Novio cariñoso"
—Ve con el oftalmólogo, la seguridad de nuestro jefe depende de nuestra buena visión—Expresa con preocupación-Ahora entiendo del porque no lograste evitar el choque que involucra al joven Nikita.
—¡Ni menciones a ese mocoso! Es igual o peor que el joven King—Sus ojos violetas se tornan irritados.
—No hay nadie como Hayden King.
Estoy seguro que él es la perversión y la maldad entre la maldad. Mis instintos nunca me han fallado, ellos me gritan cuan tiemble es. Estoy quieto porque sé, que no tiene malas intenciones con mi jefe. Si las tuviera sin importar que muriera en el proceso, salvaría a mí jefe, de esas afiladas garras.
—¿De que lado estas, Jacinto?—Lo ha endulzado por completo con el desayuno que dejá todas las mañanas para él.
—Por supuesto que del lado de nuestro jefe, pero tampoco voy hacer enojar al joven King. Todavía soy Joven y quiero encontrar pareja—No tengo pensado morir tan pronto.
—Tu....
Los pares de ojos se fueron hacía la puerta, alguien estaba querido entrar. Quedaron estáticos al ver dicha persona. Sorprendidos de que tenía llave del departamento.
—¡¿Joven maestro Nolan?!—Sonrío rígido, Constantine.
Mierda, ¿Por qué esos inútiles de seguridad lo dejaron entrar y porque los de vigilancia no me notificaron nada...? Joder, no tenían encendido el audífono. Pero, ¿Cómo consiguió la llave? Ni el Maestro Withe, tiene una.
ESTÁS LEYENDO
Rosa sangrienta
General FictionHayden es un joven que fue abandonado desde niño en casa de sus abuelos, por sus e irresponsables padres, creció muy bien con los cuidados de sus amados abuelos. Pero esa comodidad se ve arruina por la inesperada visita de su "padre" a quien no habí...