Chico Bonito // BKDK

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"¡Izuku! Vamos por algo para comer, no pude merendar en el lunch break y mi estómago me está matando." Kyoka levantaba la voz desde el fondo del estudio. Estaba lavando unas brochas, dejándolas impecables para el siguiente día de trabajo.

Izuku volteó para mirarla de lejos, estaba arreglándose para salir, llevaba unas grandes gafas para no ser mirado mucho en las calles, estaba recién desmaquillado y sólo vestía un buzo color gris con un ancho polerón color blanco.

Hoy no tenía planeado llegar tarde a casa, sinceramente no quería hacerlo, pues Katsuki se molestaría con él una vez más. Odiaba eso, ni siquiera era como que lo encarara y le dijera como se siente, sólo lo observaba de lejos al entrar a la casa, con una mirada seria, en el fondo reprochadora. No decía una sola palabra y cuando hablaban aparentaba que todo estaba bien, no le gusta eso, pero no tiene el coraje para encararlo, es su culpa que se comporte así después de todo.

Es que no le entiende, nunca lo hará. No es capaz de explicarse bien, porque sólo consigue sonar egoísta cuando lo hace. Está experimentado cosas nuevas, está viviendo una adolescencia en la adultez, está enriqueciendo sus habilidades sociales mal desarrolladas. ¿Qué tiene de malo querer hacerlo? Katsuki no es como él, Katsuki si vivió sus procesos y etapas, Izuku se las saltó todas.

Pasó de ser un niño en un cuerpo de adulto a ser alguien con un trabajo estable y una relación seria. Se había saltado muchos escalones antes de llegar donde está.

El peliverde lo duda un segundo antes de aceptar, pero termina accediendo. Después de todo tiene bastante hambre y le avergüenza un poco llegar a casa sólo para pedirle a Katsuki que le cocine algo.

Esta vez toma su móvil y textea a su novio, quien sabe que lo espera en casa. "Pasaré a comer algo con Jirou, te aviso cuando esté de camino a casa. xx"

A los minutos Katsuki solo contesta con un simple. "Cuídate, avísame si necesitas que pase a recogerte."

Izuku suspira mirando la pantalla de su móvil, pero aún así después de esperar a Kyoka emprenden camino juntos al mismo restobar de siempre. Es un lugar costoso, pero bajo perfil, la comida es rica y tienen muchos platos hipocalóricos para que Izuku logre conservar su peso. Sólo queda a la vuelta, así que es bastante conveniente. Pasan mucho tiempo aquí. Al llegar y sentarse en una de las mesas no tarda mucho en aparecer una tercera persona, cabello corto y lacio, ojos grandes color café y mejillas abultadas. Un rostro amigable que conoce bien, es Ochako.

Izuku le mira algo confundido ¿Cómo sabía que estarían aquí? Kyoka el saluda de un pequeño abrazo amistoso y luego le sonríe a Izuku. "Le dije que viniera, ahora que está desempleada tiene mucho tiempo libre." Jirou ríe fuerte molestándola por su reciente despido. Ochako solo le saca la lengua en reproche.

Izuku sonríe amistoso y Ochako le saluda de un pequeño beso en la mejilla, los tres no tardan mucho en ordenar una vez que se toman asiento en una de las mesas del fondo.

"¿Le avisaste a tu novio que tardarías? No te vayas a meter en problemas de nuevo." Jirou sonríe dándole un codazo mientras un amistoso camarero se ocupa de dejarles sus bebestibles.

"Si, me siento un poco mal por dejarlo sólo una vez más." Izuku murmulla haciendo un meaculpa.

"¡Izuku! Si no querías venir no tenías que sentirte obligado. Puedes pedir para llevar también." Jirou arruga el entrecejo, sintiéndose algo culpable por arrastrar a su amigo aquí una vez más.

"Es que tengo hambre y cocino muy mal... Me daría mucha vergüenza llegar a casa sólo a pedirle que me prepare algo de comer. Él suele cocinar en casa, pero como no sabe a que hora llego por las tardes últimamente él ha estado comiendo en su oficina antes de salir del trabajo." Izuku dice algo avergonzado, se siente algo culpable por hacer que su novio coma sólo en el trabajo en vez de en el hogar que juntos tienen. Pero no siempre es su culpa, a veces su horario simplemente se extiende de más.