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Es de día, la cabeza le duele y un extraño aroma a champú y jabón le hace sentir mareado. La luz se cuela por unas ventanas color beige, apenas puede abrir los párpados, se siente desorientado y tarda un poco en recomponerse. Abre primero un ojo intentando examinar la habitación. Paredes verde oliva y sábanas completamente blancas con un cobertor a juego.

Esta no es su habitación.

Algo asustado se incorpora, arrepintiéndose al instante en que siente la nausea marearle. Se lleva la palma a la boca en señal de asco y mira a su costado, esperando no encontrar un cuerpo desconocido. No hay nadie, sólo la cama desecha y un extraño ruido que viene desde una puerta a medio cerrar. Por un momento se siente tonto, es Katsuki Bakugo, es meramente imposible que haya alguien a su lado si no se trata de Izuku.

¿Dónde carajo está? Aún viste su camisa blanca con unos pantalones de tela, es su ropa de trabajo. ¿Acaso durmió así?

Una cabellera rojiza se asoma por la puerta de lo que parece ser un baño. Kirishima sale con el torso desnudo, está con sólo una toalla en las caderas y otra en sus manos para secar su cabello, acaba de tomar una ducha. El rostro de Katsuki sólo se arruga en confusión, ¿Por qué esta con Kirishima? Y ¿Por qué su amigo está tomando una ducha aquí? Esta ni siquiera es la casa de Kiri, no sabe realmente donde está. El pelirrojo no tarda mucho en ponerse una polera y unos boxers, sin avergonzarse porque Katsuki le vea desnudo. No es como que tenga algo por lo que avergonzarse realmente, pero Katsuki ni se inmuta, no es la primera vez.

El rubio tiene la garganta tan seca que no siente que pueda hablar, sólo necesita agua y un analgésico.

"¿Como te sientes?" es lo primero que Eijiro pregunta, con una voz distinta de la habitual, es una voz tranquila, extrañamente seria en él. Como si le leyera los pensamientos no tarda mucho en extenderle un vaso con agua y una pastilla, sentándose sobre la cama desecha, justo a su lado. Katsuki no responde, sólo toma la pastilla y bebe todo el contenido del vaso, su garganta arde.

"¿Mejor?" Eijiro pregunta con el mismo extraño tono de voz en él mientras le recibe el vaso vacío y lo deja en el velador. Sólo en ese momento Katsuki nota que Eiji luce algo cansado.

"¿Dónde estamos? Y, ¿por qué estas aquí?" Katsuki murmura rascando uno de sus ojos con su puño, se siente asqueroso, sucio.

"¿No recuerdas nada?" Eijiro pregunta mirándole atento y Katsuki sólo niega. El pelirrojo suspira y luego de mirar alrededor de la habitación le vuelve a mirar al rostro. "Anoche te había llamado porque no contestabas mis mensajes y queríamos ver con Kaminari si podíamos salir a beber algo o no sé, pero te llamé y contestó otra persona."

"¿Qué? ¿Quien? ¿Me robaron el móvil?" Katsuki pregunta despabilando un poco, buscando en sus bolsillos por el aparato, no hay nada.

"Eso pensé, pero era un chico universitario que trabaja en el bar donde siempre vamos. Me dijo que estabas demasiado ebrio como para irte por ti solo, me pidió que fuese por ti porque no estabas bien. Tu móvil está en el velador, pero está apagado." Kirishima habla con una voz solemne y sólo gracias a la seriedad con la que el pelirrojo toma la situación Katsuki comienza a entender el por qué de las cosas. Fugazmente escucha los acordes de su canción favorita de audioslave y el llanto de Izuku. El sólo recuerdo le hace doler el estómago. De pronto se siente patético.

Se mantiene unos segundos en silencio, Eijiro sólo lo observa hasta que tímidamente se atreve a posar su mano en la espalda del rubio, dándole un par de palmadas reconfortantes. "Estamos en un hotel cerca, anoche supe todo lo que pasó, ya sabes... Con Izuku."

"Ya veo..." Murmura Katsuki no sintiéndose listo para hablar del tema, pero al parecer su yo ebrio de la noche anterior ya hizo ese duro trabajo por él.

Chico Bonito // BKDKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora