Everlong - wenclair

Searching for you

"Enid llegó tarde a su habitación, ¿cómo lo sé? Esa noche me encontraba escribiendo un capítulo nuevo para mi novela, la inspiración había llegado por fin. Pero tuve que detener todo cuando mi celular empezó a sonar, una llamada, era una llamada de Enid. Contesté y se le escuchaba con un tono alegre, supuse que tenía mucho por contarme.

La salida con su padre fue un éxito, fue lo que ella me dijo. Se desahogaron por primera vez y arreglaron sus problemas. Enid tenía la solución en las manos, tendría que ir al psicólogo y probablemente a un nutricionista. Estaba asustada, lo sentí cuando escuché como su voz sonaba temblorosa, no soy buena para dar apoyo emocional pero, le hice saber en cada momento que estaría para ella, incluso si es solo llamándola, no tuve respuesta, se había quedado dormida."

Wednesday escribió un último mensaje en el chat de la rubia para luego dejar su celular en la mesita de noche. Quería seguir escribiendo aunque ya no encontraba nada de inspiración.

Tomó su mochila que se encontraba al lado de su cama y fue sacando la bolsa con esmaltes que compró esa vez con Eugene.

— Dedos levántate. —la pelinegra ordenó a la mano a que se despertará aunque parecía encontrarse en su quinto sueño.

Dedos escuchó unos chasquidos y rápidamente se levantó, estuvo apunto de quejarse hasta que sintió la mirada amenazante de Wednesday.

Fue suficiente como para que la mano se quedará quieta escuchando todos los materiales que Wednesday le encargó que buscará, Dedos asintió y salió de la habitación dirigiéndose al sótano encontrándose con una caja vacía, cartulina y unas tijeras, al menos eso le serviría.

Sin hacer mucha bulla tomó los materiales y regresó a la habitación de la Addams.

— ¿Solo eso? ¿No encontraste nada más? —preguntó Wednesday viendo como la mano daba su explicación con señas— bueno, gracias de todas formas.

La mano se acomodó en el escritorio notando como Wednesday ahora tenía en las manos unas hojas de colores. ¿En primer lugar de dónde había sacado esas hojas? ¿Y por qué exactamente las tenía? ¿Qué estaba a punto de hacer?

— No me mires así... —la pelinegra desvío la mirada— no tengo que explicarte el porque tengo... estas hojas.

Wednesday tomó una regla y empezó medir lo largo, ancho y alto de la caja. Tenía otras hojas con diseños de pequeños corazones, no pudo evitar sonrojarse cuando Dedos se le quedo viendo.

— Se que no dejarás de mirarme, así que te lo diré. Estoy planeando llevarle un presente a Enid cuando nos veamos, sería muy descortés de mi parte ir con las manos vacías. —Wednesday sintió como Dedos la seguía mirando— se que estás esperando a que diga algo cursi, pero no lo diré, menos en frente de ti.

Si Dedos pudiera sonreír, en estos momentos lo haría, al menos podía levantar el pulgar en forma de aprobación. Wednesday fue dibujando distintas flores en las hojas de colores, también dibujó un lobito pequeño, sonrió al pensar en Enid, todo lo que estaba haciendo era para ella.

Todo lo cursi le parecía asqueroso y hasta le daban ganas de vomitar porque nunca pensó encontrarse en esa situación, pero no le desagraba del todo porque lo disfrutaba, disfrutaba hacerle un pequeño regalo a su novia.

Una canción de Radiohead sonaba en el celular de la pelinegra que tenía activado su playlist.

"I know all the things around your head
And what they do to you
What are we coming to?
What are we gonna do?

Blame it on the black star
Blame it on the falling sky
Blame it on the satellite

That beams me home."