Capítulo 42

56 9 0
                                    

Mi hogar eres tu.

Claudia.

Salgo corriendo del lavabo haciendo evasivas a las palabras del médico y las amenazas de Alexander, salgo de la habitación incapaz de soportar el enojo que tienen los dos conmigo. Quieren que me meta en la cama para descansar pero ahora mismo tengo algo más importante en mi cabeza que mi propia salud.

Las palabras de Ethan durante el secuestro retumban en mi cabeza y algo dentro de mi se destroza al verlo de esa manera en mis recuerdos.

Mis débiles piernas me llevan corriendo por el pasillo hasta mi antigua habitación, abro el pomo rápido y me encuentro a mi querido hermano tumbado en la cama.

Mal herido.

Un sollozo se escapa de mis labios mientras me apresuro a su lado. Las lágrimas nublan mi visión mientras toco su manos, aquella que cogí tantas veces cuando era pequeño y volví.

 - Ethan .. - susurro sintiendo como mi voz tiembla - Lo siento .. Siento tanto lo que pasó.

Él parpadea débilmente, su rostro muestra el dolor que está pasando pero también una sonrisa tenue de la que es tan característico

 - Muñeca.. No tienes la culpa, estoy aquí porque elegí protegerte y lo haría siempre.

Las lágrimas siguen rodando por mis mejillas mientras me inclino para abrazarlo con cuidado.

 - No deberías haber acabado así, tendría que haber sido yo - digo temblando contra su cuerpo.

Puedo ver lágrimas en los ojos de mi hermano al escuchar mis palabras y mi sentimiento de culpa me consume por momentos.

Serene se acerca a nosotros y pone una mano reconfortante en mi espalda.

 - No puedes culparte por esto, mírate no estas bien tampoco - me susurra con lágrimas también al ver a mi hermano.

Me aferro a su brazo mientras sollozo, dejando salir todas las emociones que he estado reprimiendo y que no quería volver a sentir. Ethan es fuerte, pero siempre he sido yo la protectora y verlo en este estado me desgarra el corazón lentamente.

No fui capaz de proteger un pedazo de mi. ¿Quién me dice que no lo harán de nuevo?.

Desde la puerta escucho la voz de Alexander.

 - Pequeña..

Me vuelvo lentamente y lo veo de pie en el umbral apoyado, su mirada es con un poco de comprensión a pesar de su enojo previo.

¿Pero cuando no está enfadado?

Sus ojos se encuentran con los míos llorosos y veo una lucha interna en su expresión. Nunca me había visto así y yo tampoco, nunca me había roto tanto como cuando me puse encima de mi hermano cuándo lo torturaban.

Ethan aprieta mi mano suavemente con poca fuerza.

 - Muñeca esta bien, ve a por esos hijos de puta - me pide con desespero.

 - No te preocupes yo lo cuidare - me asegura Serena sentándose a su lado.

Asiento con lágrimas en los ojos, sintiendo una mezcla de emociones en este momento. No puedo cambiar el pasado, pero puedo estar para mi hermano y acabar con los malnacidos que le hicieron eso, que nos hicieron esto.

Me pongo de pie y me acerco lentamente a Alexander.

 - Losiento por salir corriendo - suspiro porque no se cuantas veces me voy a disculpar hoy.

Mi voz aún está entrecortada por las lágrimas y él asiente con frustración por no poder regañarme en este momento.

 - Como voy a poder saciarme de ti si los puntos se te abren - acaricia mi cara - solo quiero que te recuperes lo antes posible.

Pequeña AsesinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora