-Pum, pum, pum...Los latidos de dos corazones se escuchaban a través del doppler.
Mientras las imágenes iban tomando forma en el monitor, el corazón de Darien se estrujó dentro de su pecho al mismo tiempo qué sus latidos se aceleraron, está era la primera vez qué escuchaba el corazón de sus hijos, y también la primera vez qué los veía a través de una pantalla, pensó en todo lo qué pudo haberse perdido y lo afortunado qué era por estar allí, sosteniendo la mano de Serena.
Era un momento único, tan único cómo el día qué miró a Serena caminar vestida de novia hacía él, y aún que ese matrimonio no era válido por las circunstancias, para él Serena era su esposa en todo los sentidos pero le volvería a jurar amor todas las veces qué fueran necesarias, Serena tomó la mano de Darien, púes sabía lo qué para él significaba esté momento, ella había pasado las primeras revisiones sola, y había deseado tanto poder tomar su mano y apretaba para decirle ¡Son nuestros hijos! Pero ahora tenía esa dicha y quería disfrutarlo al máximo.
-Felicidades, tendrán dos hermosos varones - dijo el doctor para felicitarlo de la pareja.
-¿Niños? - preguntó Darien sorprendido.
-Sí, son dos pequeños niños y se encuentran en perfecto estado, pese a todo lo qué tuvieron qué pasar, puedo asegurarle qué tendrán dos hermosos niños dentro de cuatro meses - aseguró el doctor.
Darien en realidad no tenía fijación con el sexo de los bebés, a él lo único qué le importaba era qué sus pequeños llegarán con bien al mundo, y qué Serena pasará por el parto sín ningún peligro, sabía lo qué significaba para una mujer dar a luz por cesárea o parto natural, todo tenía un riesgo y era de admirar la labor de todas las mujeres en el mundo qué daban vidas arriesgando sus propias vidas.
-Gracias cariño, gracias por esté regaló tan hermoso - dijo con pasión.
Darien bajó su rostro para besar los labios de Serena con emoción, un beso qué le supo a sal por qué ambos derramaba lágrimas de felicidad.
-¡Son dos varones! - respondió emocionada.
-Y por lo qué puedo ver comparte la misma bolsa, serán idénticos.
Serena asintió, púes no importaba qué fuera cómo dos gotas de agua, ella no tendría preferencia por ninguno de los dos y mucho menos condicionaria sus vidas, cómo sus padres lo habían hecho con ella y Usagi, la pareja estaba realmente feliz por las noticias recibidas, su felicidad cada día era más y su unión cómo pareja también iba creciendo.
Se despidieron del doctor, media hora después de recibir las indicaciones y recomendaciones, para el cuidado del embarazo y la programación de una nueva cita.
.....
La pareja salió más qué feliz de la clínica, fueron a uno de los restaurantes de comida tradicional para almorzar, y luego volver a su departamento pero sus planes fueron interrumpidos por el sonido estridente del móvil.
-Aló - respondió Darien con una sonrisa en los labios.
-Darien, es necesario qué vuelvas a la ciudad, ha sucedido un accidente.
-¿Qué? - el miedo recorrió el cuerpo de Darien, borrando la sensación maravillosa qué recientemente había experimentado.
-Es Rei - Darien sintió su cuerpo desfallecer, a su cabeza acudieron muchos panoramas y cada uno era peor qué el otro.
-¿Qué le sucedió? - preguntó con un hilo de voz.
-Sufrió un accidente automovilístico, todo es confuso, Darien por favor ¡Regresa! - Serena había permanecido en silencio, no sabía qué era lo qué sucedía, pero el rostro de Darien había perdido todo color, y el miedo recorrió su cuerpo.
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LA OTRA
RandomSerena Moon era feliz con la vida qué llevaba alejada de la sociedad y de sus padres, vivia la vida a su manera, su pequeño departamento lejos de la mansión de sus padres nadie nunca podría imaginar su verdadero linaje. Darien Shields lo tenía todo...