Alan Rickman +18

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Dedicado a samcMh

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Alan!- Gimió la mujer al sentir como la embestía con más fuerza.

El hombre la tenía agarrada de los muslos mientras que la espalda de la mujer golpeaba la pared debido a las fuertes embestidas de este.

-Estás tan apretada cariño- jadeo contra el oído de TN.

-Al... Alan.... m...más des...despacio....- suplicó TN al verse incapaz de aguantar tanto placer.

Su boca ya seca de tanto gemir, su cuello lleno de mordidas y succiones, sus ojos llorosos por el placer, enloquecian a Alan, quería ir más despacio, ya que su amada se lo había pedido, pero le era imposible, amaba verla así, enloqueciendo de placer.
TN se apretó más contra él, al sentir su orgasmo cerca, avisando a Alan, logrando que este sonriera, y siguiera embistiendola con fuerza.
Este pronto sintió los espasmos de TN alrededor de su miembro, y como se apretaba más, enloqueciendolo.
Con rapidez la llevó hasta la mesa, saliendo de ella y dándole la vuelta, para volver a introducirse con fuerza, y moverse con la misma velocidad, provocando que los gemidos de TN se volvieran gritos.

Dos.... tres.... orgasmos golpearon a TN.

-Alan.... por favor....- suplicó sin poder seguir a su pareja. Su cuerpo estaba demasiado sensible, y el placer empezaba a convertirse en dolor.

-Te prometo que este es el último- habló entrecortado, embistiendo a TN de manera lenta, dándole placer de aquella manera, hasta que los dos llegaron al orgasmo.

Todo el cuerpo de TN temblaba de cansancio y excitación. Mientras que Alan besaba su espalda, y acariciaba las piernas de TN.

Con lentitud salió de ella, para darle la vuelta y cogerla en brazos, para así llevarla a la habitación, donde la posó suavemente en la cama, para luego tumbarse junto a ella, quedándose así los dos dormidos, en los brazos del otro.



















































Días después......

-TN cariño, te recuerdo que hoy viene una clienta, así que te pido por favor que te comportes como una auténtica dama- pidió su madre, mirando a la joven, seriamente.

-Mamá, tengo 23 años, se perfectamente comportarme como una dama- dijo frustrada- que me pase el día en pijama y mal peinada, no significa que no sepa ser una dama- se defendió, dirigiéndose a las escaleras.

-Y yo tengo 39 años, y no ando por la casa de ese modo.- Le recriminó. Logrando que TN bufara, y subiera a su habitación a prepararse.

Y así lo hizo, se tomó una ducha, en la cual se acarició, pensando que era Alan quien lo hacía.
Una vez lista y complacida, entro a su armario, buscando algo decente pero cómodo. Pronto encontró un vestido verde, el cual le llegaba por encima de las rodillas, y se ataba por atrás, dejando su espalda al descubierto en forma de U.

Una vez lista, se peino, con un moño alto, y varios mechones sueltos, dándole una imagen juvenil pero seria.

Con tranquilidad bajo a la sala, encontrándose a su madre ya arreglada, iba a hablar cuando picaron, indicando que ya había llegado la persona.

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