Karina
Ringgggg ringggggg.
Maldito sonido. ¿Qué diablos era eso? Debía ser demasiado pronto...
Me incorporé como pude y paré la alarma. Las 7 de la mañana.
—Mierda, las clases...
Debía levantarme, desayunar, pedirle al chofer que me llevara a la universidad... Demasiadas cosas y solo quería dormir. La cabeza no dejaba de retumbarme por culpa de la música y el haber dormido tan poco, porque realmente anoche no bebí y me acordaba de todo a la perfección.
Me acordaba de como besé a aquel chico mientras la miraba a ella, recordé nuestra discusión en el baño, y también el beso que nos dimos.
Cuando me marché de ese baño fui directa a pedir un taxi y volver a casa. Mi corazón parecía que se me iba a salir del pecho, sentía que cada extremidad de mi cuerpo ardía en deseo, una sensación en mi interior indescriptible.
Irene me dijo que experimentara, que me dejara llevar, y cuando llegué a la fiesta me propuse divertirme y conocer gente. Todo estaba yendo bien hasta que la vi bailar con esa chica otra vez... Mis ojos no se separaban de ella, y yo simplemente me dejé llevar.
Definitivamente esto no podía saberlo Giselle o pensaría que tengo un mínimo de afecto hacia ella. Además, fue cosa de una noche.
—Que dolor de cabeza...
Gracias a Dios mi padre estaba de viaje y no me vio llegar a las cuatro de la mañana, o sino me habría matado rotundamente.
Lo cierto es que, a pesar de haberle dicho que no volvería a pasar... Me divertía torturarla, desafiarla, me causaba una sensación que no me disgustaba para nada.
O quizá solo era el hecho de estar cerca suyo.
Eché un vistazo al teléfono y vi que tenía dos mensajes de Giselle preguntándome si pasaba a recogerme, le respondí que no era necesario. Entonces vi que tenía otro mensaje que me hizo entre abrir los labios de la sorpresa.
Winter <3: Tenemos que hablar
—¿Y esto? —alcé la ceja—. Qué sorpresa.
yo: echándome de menos tan pronto?
Agarré la ropa para darme una ducha y dejé el teléfono sobre la cama. ¿A qué habría venido ese mensaje? Mil cosas pasaban por mi cabeza y estaba segura de que no sería ninguna de esas.
Me di una ducha rápida y me vestí. Me lavé los dientes y me maquillé un poco, al menos para resaltar facciones. Sabía que Connor me había preparado el desayuno como siempre así que fui a bajar, no sin antes echar otro vistazo al móvil.
"Nuevo mensaje de Winter <3"
Sonreí sin darme cuenta.
Winter <3: No seas creída. nos vemos en el campus en diez minutos, donde el bar. Antes de empezar las clases
Fruncí el ceño. ¿Habría pasado algo? Aquello me dejó entre confundida y ansiosa. Si desayunaba no me daría tiempo a ir así que opté por saltármelo. Bajé con rapidez las escaleras y fui hasta la puerta principal.
—¡Señorita, Yu! Tiene el desayuno en la mesa.
—Mil disculpas Connor, me han avisado de que mi clase empieza antes. Si no voy no llegaré a tiempo.
—Oh, por supuesto, señorita. Pero desayune en el camino, necesita coger fuerza.
—Por supuesto.
Me subí al coche y el chofer puso rumbo al centro. Mi cabeza no dejaba de pensar en qué pasaba, qué sucedía. ¿Qué se le habría pasado por la cabeza como para querer verme a las siete de la mañana?
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The Only Exception | winrina
Hayran Kurgu¿Qué pasaría si dos personas completamente opuestas se encuentran en una fiesta de máscaras y conectan? ¿Qué pasaría si después descubren que se detestan? Winrina fanfic. Historial original. No se permiten adaptaciones por ahora.