Épocas adelantada 2 [Anne with an e]

Página 47

- Gracias – dije dando una vuelta sobre mí misma para lucir bien el diseño.

- Sabes, conozco a la persona adecuada para enseñarle esto, venir conmigo.

Estuvimos buscando a esa persona durante un rato, había tanta gente en la fiesta que nos costó bastante.

- Ya la veo, esperar aquí.

Theo y yo obedecimos mientras que Josephine se acercaba a una pareja que está disfrutando de unos cócteles y de una animada charla con otras personas.

- Cassie, ellos son los señores De Luca.

- Un placer, soy Casiopea Creevey – les ofrecí la mano a ambos – Y él es mi amigo Theo – este imitó mi acción.

- Buongiorno – me saludo el hombre en italiano.

- Que vestido más bonito – habló la mujer - ¿Dónde lo has conseguido? Nunca he visto nada igual.

- Cassie diseña su propia ropa – respondió por mí la señorita Barry.

- Oh, eso es interesante – dijo ella examinando el vestido - ¿El traje de tu amigo también lo has diseñado tú?

- Em, sí.

- Genial – sonrió ella – Yo soy costurera privada y sinceramente este vestido me parece de lo más innovador y el traje de tu amigo es muy bonito, estoy harta de ver a los hombres con los mismos trajes aburridos y planos ¿Qué te parece si un día vienes a tomarte un té y hablamos de una manera más profesional?

- M- me parece genial – titubee – muchas gracias señora De Luca.

- Llámame Giulia – me sonrió.

Seguidamente la mujer volvió al su grupo de amigos junto con su esposo y yo estaba a punto de comenzar a saltar y gritar de la emoción. No me podía creer que iba a tener una entrevista de trabajo. Estaba deseando contárselo a Gilbert y a mi madre, seguro que estaría muy orgullosa de mí.

- Cassie – me llamó Theo sacándome de mi trance.

- ¿Qué pasa?

- ¿Te das cuenta de que vas a tener una entrevista de trabajo? Trabajaras con Giulia De Luca, primero de ayudante y luego te ascenderá y seréis socias, te convertirás en diseñadora privada y te volverás famosa, viajaras por el mundo para mostrar tus diseños y no volverás a Avonlea y te olvidaras de todos tus amigos ¡Te olvidarás de mí! ¿Cómo te atreves? – dramatizo.

- Theo, cálmate. Primero tengo que tomar el té con ella y ya veremos qué pasa – puse una mano en el hombro para tranquilizarlo – y te juro que yo nunca me olvidare de ti.

- Más te vale, porque te quedaras sin modelo masculino.

- Conseguiré a otro.

- Pude, pero no lucirá tus diseños como yo – dijo comenzando a posar.

- En eso tienes razón. Vamos a buscar a Anne anda.

[...]