LIBRO 3- SIEMPRE FUISTE MÍA.
Hilo Rojo.
(((CORRIGIENDO Y EN PROCESO)))
Él tiene hielo en su mirada y ella miel en la suya, él es fuego y ella agua... Ella cielo, él infierno... Dos seres totalmente opuestos, pero a la vez tan complementarios, porque...
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Aleska.
Ignoro por completo al hombre que está a mis espaldas que no deja de insinuar cosas mientras yo tengo mi total atención en la pantalla de plasma que me refleja un vídeo de yoga para principiantes.
Tengo una semana aplicándole la ley del hielo, si, estamos durmiendo juntos, sin embargo, lo he castigado con lo que más le duele, con sexo, mimos y cariñitos.
No me molesta el hecho que haya ido a ese lugar, porque a fin de cuentas se y confío a ciegas que jamás hubiese tocado a ninguna mujer, me molestó fue la mentira, el que me haya ocultado lo que haría, el que no tuviera la confianza de decirme lo que pensaba hacer.
-¿Y esas son las famosas clases de yoga?-Ironiza.
Está sentado en el sofá que está detrás de mí, me encuentro en cuatro en la alfombra de la sala haciendo la posición que en yoga se llama el gato y de la vaca.
No le contesto y él sigue.
-Y así querías que ese profesor te diera las clases-Bufa-Le hubiese partido la cara solo por ver lo que yo estoy viendo en estos momentos.
Este hombre si es fastidioso, no se cansa de hablar y no me deja concentrarme.
-¿Por qué aún estás aquí y no te has ido a tu empresa?
-Me iba a ir, pero te vi así y ya después se me quitaron las ganas.
-Entonces si vas a estar aquí, cállate porque no me dejas concentrar-Lo regaño.
Hace silencio y yo fijo mi atención en la gran pantalla otra vez.
Me pongo en posición que según la instructora del video se le dice comúnmente perro que mira para arriba y perro que mira para abajo, que no es más que postrar las rodillas y las palmas de las manos en el piso mientras arqueamos la espalda.
-Ahora-Dice la instructora-Arqueamos la espalda hacia abajo y exhalamos.
Lo hago totalmente concentrada con mis ojos cerrados.
-Ese culito me está llamando-Lo escucho decir detrás de mí haciéndome abrir los ojos-Pidiéndome a gritos que lo azote y después que lo embista.
-Joder Demian, que fastidioso eres.
Me levanto de la alfombra molesta y me voy a la habitación.
-Necesito que te vayas conmigo a la empresa-Dice a mis espaldas.
-No-Me adentro a la habitación-Tengo cosas que hacer en la universidad.
Me quito la camisa corta deportiva que cargo para después quitarme el leggins.
