Aleska.
«Mmm»-Murmuro con somnolencia.
Mis ojos se niegan a abrirse, la garganta la tengo seca, mi estómago ruge y tengo mis extremidades pesadas.
Muevo mi cuerpo de a poco.
«Mmm»-Vuelvo a quejarme con quejidos somnolientos.
La cabeza me duele, alzo una mano hacia mi frente frotandola, pero mis ojos se abren bruscamente cuando llevo mi otra mano a mi cuerpo y estoy prácticamente desnuda.
El pecho me empieza a galopar cuando me levanto con brusquedad sentandome en la cama y miro mi alrededor desconcertada. ¿Dónde estoy?
Estoy como en una cabaña «Creo». El techo es de madera inclinada, las paredes están hechas del mismo material del techo, menos un ala, que es de madera y vidrios dando vista al exterior, el piso es del mismo material que todo lo demás.
Se ve en mi campo de visión una chimenea hecha de piedras con un leve fuego, hay una mesa de madera y muebles hecho del mismo material con cojines, hay también una pequeña área de cocina y... miro la cama donde estoy acostada y es matrimonial cubiertas con sábanas blancas.
Miro mi cuerpo, estoy solo en cotica y cachetero. ¿Cómo llegué aquí?. ¿Y quién me cambió?
Y enfoco mi atención hacia la nada cuando un recuerdo destella en mi cabeza.
«... Estoy en la discoteca y miro desde mi lugar al hombre que me siguió en los parques... yo corriendo pidiendo ayuda... mis pies colgando cuando un olor fuerte me quemó las narices... el miedo... la angustia... «Me secuestraron».
Me tapo la boca de la impresión «Me secuestraron»
Empiezo a llorar. Meto una mano en mi entrepierna y huelo, no huele a semen y todo está normal. No me han tocado.
«Todavía»-Dice mi conciencia.
Me arrincono en la esquina de la cama pegando mi espalda de la pared de madera y tomo la cobija arropandome.
Yo sabía que ser la mujer de alguien con tanto dinero me traería consecuencias. Ahora estoy aquí secuestrada, lo más seguro es que pidan rescate. ¿Y si Demian no me quiere ayudar?
No está en el deber de hacerlo, ya lo dejé y la última vez que hablamos le dije que no me buscara, que yo lo hacía y duré una semana sin hacer el amago de buscarlo.
«Es que me gustó sentir esa libertad»
Dios mío, ¿Qué hago?.
Siento que me está dando un ataque de pánico, trato de calmar la respiración... y ¿Carlos Javier?. Debe estar encerrado en ese hotel, si acaso ya no lo llevaron a una perrera. ¿Cuántos días llevo aquí?
Y a mi mente vienen breves solallos de los libros de mafia que he leído y miro mis dedos «Y lloro todavía más». De seguro me lo cortarán uno a uno para meter más presión y que paguen lo que le pedíran por mi. ¿Y mi papá?. le dará algo si se entera que me secuestraron...
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3-SIEMPRE FUISTE MÍA (+21)
RomantikLIBRO 3- SIEMPRE FUISTE MÍA. Hilo Rojo. (((CORRIGIENDO Y EN PROCESO))) Él tiene hielo en su mirada y ella miel en la suya, él es fuego y ella agua... Ella cielo, él infierno... Dos seres totalmente opuestos, pero a la vez tan complementarios, porque...