LIBRO 3- SIEMPRE FUISTE MÍA.
Hilo Rojo.
(((CORRIGIENDO Y EN PROCESO)))
Él tiene hielo en su mirada y ella miel en la suya, él es fuego y ella agua... Ella cielo, él infierno... Dos seres totalmente opuestos, pero a la vez tan complementarios, porque...
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Aleska.
Mis ojos se abren con las caricias que le hacen a mi brazo. Levanto mi cabeza y me encuentro con las pupilas grises y los labios que arquean levemente una pequeña sonrisa.
-Buenos días mi osita cariñosita.
Antes de poder responder lleva mi espalda hacia atrás tumbándome en la cama. Monta su cuerpo sobre el mío y esconde su cara en mi cuello.
-¿Cómo amaneciste?. Mmm-Toma mis manos y las lleva por encima de mi cabeza. Con sus piernas abre las mías.
Ni siquiera me deja espabilarme del sueño.
-Demian...
-¿Mmm?
-Mi familia está aquí.
-¿Y?
Suelta mis manos y baja lento rozando sus labios por encima de la tela e introduce su cabeza debajo de mi vestido de dormir y río cuando toma posesión de mis tetas. Estruja su cara entre ellas.
-Joder deja-Le doy unos manotazos por encima de la tela.
Saca su cabeza por debajo del vestido y me mira divertido.
-Aquietate Pepe Le Pew o te castigo.
-Vive le amour. A mi pequeña adorada, esto es amor a primera vista, no es así, ¿No?-Dice la frase del personaje de los looney tunes imitando su acento francés.
Río. Introduce su cabeza otra vez debajo del vestido para después bajar y salir.
Tomo su cara entre mis manos cuando se coloca frente a mi y uno nuestras bocas en un beso fugaz. Nos miramos.
-Buenos días mi eterno enamorado acosador.
Nos reímos a centímetros de nuestras bocas. Después se tumba a mi lado y yo me acurruco en su cuerpo que está calentito. Envuelve un brazo alrededor de mi cuello y deja un beso en mi cabeza.
Lo apapacho más fuerte montando una pierna encima de las suyas. Está haciendo mucho frío.
-Mi osito de peluche calentito-Digo mimada.
-Osito de peluche, ojitos de gato, Pepe Le Pew, chico de ojos grises. ¿Qué otro apodo me tienes?
-El tres patas.
Ríe a carcajadas y yo subo mi cara para mirarlo divertida. Luego mi espalda toca el colchón cuando Demian me lleva hacia atrás para montar medio cuerpo encima del mío.
-Hazme cafuné-Pide y empiezo a acariciar sus cabellos azabaches mirando al techo pensativa.
