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Winston miró a Caine con marcado desagrado-¿También vienes a clavarme una espada como a Shimazu? ¿O quizás el Marqués ha decidido hacer de mi sufrimiento algo más público?

El asiático sonrió ligeramente, una mueca burlesca-No se que podría ser más público que el espacio muerto que ahora adorna una de las calles de New York.

-Ciertamente...pero dime qué te trae a mi?

Caine le tendió una sobre, sabía que dentro se encontraba un pasaporte falso, boletos de avión, papeles de su hospedaje en el continental de París y una invitación a la residencia del Marqués, todo había sido calculado por Victoria, la niña se había mostrado esquiva ante sus intentos de ayudarla, era tan terca como su propia hija, digna alfa, no le gustaba mostrar debilidad y lo rechazaba con vehemencia, aunque en el fondo sabía que estaba llenando los vacíos de una con la otra.

En el viaje de avión Winston se mostró increíblemente huraño ante las posibilidades de ir a París, aunque Caine había visto que la sola mención de la Directora le había hecho sonreír con nostalgia, eso era casi una confirmación de que sería el reencuentro de viejos amantes, lo que le intrigaba ahora era si en realidad eran los padre biológicos de John. Siempre había corrido un misterio en la figura de un asesino como el pelinegro, tenía numerosos apodos y todos eran relacionados a su efectividad para matar, era implacable, pero nadie sabía de dónde realmente venía John, pertenecía a la Ruska Roma pero muchos de habían unido a la familia siendo mayores, con el hombre era un misterio.

-Primero debemos presentarnos ante la emisaria del Marqués, tiene puntos importantes que aclararle-Caine había abierto la puerta del taxi sin saber lo que le esperaba.

Winston abordó el vehículo, pero al ver que este arrancaba sin esperar al asiático supo de inmediato que estaba en una nueva situación.

-Es un placer volver a verlo-La chica frente al volante dió un giro brusco, la ruta que estaba tomando los llevaba directo a la ciudad-Mi nombre es Akira, soy...

-La hija de Shimazu, Akira Koji-El hombre sonrió-En realidad te pareces mucho a tu padre.

-Vamos a intercambiar el coche en la ciudad, tengo que llevarlo ante un viejo conocido, ante un rey.

Winston se inclinó hacia adelante-¿Rey Bowery sabe lo que ha pasado con John?

La chica asintió-Se lo va a explicar todo en cuanto estemos en una zona segura.

La predilección del Rey Bowery por edificaciones medio abandonadas para montar su base de operaciones no había cambiado, Winston miró la fábrica de enlatados con cierta nortalgia, había extrañado formar parte de algún plan o conspiración, y aunque la vida de John no era técnicamente el mejor lugar dónde intervenir, pero tenía responsabilidades que nunca podría evadir. Ambos hombres se saludaron con un asentimiento de cabeza antes de unirse en una conversación por el plan de infiltración a la gran residencia del enemigo. Akira se dejó caer en uno de los destartalados sofás a mano y miro el techo de vigas oxidadas, había visto a Caine mientras efectuaba el falso secuestro de Winston, y aún seguía pensando que hubiera sido increíblemente feliz de dejarle una bala en la sien, la venganza envenena el alma, pero venía de un lugar dónde era importante.

-Ella es quien va a infiltrarse-Bowery dejó caer una pesada mano sobre el respaldo del sofá-Mis hombres son hábiles pero ella ha demostrado un sigilo insuperable.

El otro asintió-Entonces yo seré la distracción mientras Akira busca a John-Winston se sacó un caja de pastillas del bolsillo y se las tendió a la chica-Quizás no puedas sacarlo de dónde sea que esté, pero dale esto, ya está demasido cerca de perder la cabeza.

Winston fue dejado frente al continental de New York por una motocicleta, en cuanto piso la recepción varios hombres del Marqués lo rodearon, casi parecía una celebridad, Caine llegó poco después, su rostro increíblemente serio venía acompañado de un arma en sus costillas, el hombre lo había empujado dentro del ascensor y directo a su habitación. Winston miró el lugar con marcada curiosidad, había cierto toque de elegancia recargada que su propio hotel no había tenido, el había preferido un estilo mas minimalista, se dejó caer en uno de los sofás, el interrogatorio a continuación sería interesante.

-Voy a preguntar una vez Winston...-Caine se fronto el puente de la naríz con molestia-¿Quien diablos era?

El hombre sonrió con malicia, con insana diversión-Viejos amigos, del tipo que les beneficia que ya no sea gerente de un continental.

-Del tipo que te sigue...

-Quizas, en realidad me salvó esto-Winston saco la invitación a la residencia del Marqués-Esto de aquí les aseguró que estoy metido en problemas peores.

Caine se acomodo las gafas-Soy ciego imbécil, lo que sea que tengas en la mano es un misterio para mí.

Winston bufó-Eres el ciego más hábil que conozco Caine, lo suficiente para estar dentro de este mundo corrupto.

El otro asintió-En la mañana iremos a ver a la emisaria del Marqués, será una reunión de lo más interesante Winston.

-Lo dudo...







El Despertar del OmegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora