duele...

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La risa de la rubia se hizo presente en el lugar al escuchar a Abril cantar — ¡De que te ries perra! Yo canto hermoso — si, claro, pero apurate, tenemos que ir a la reunion de rocio y quiero ver a felix — ¡Hija de puta! No me contaste que paso el jueves, nada mas te digo —¿De que hablas? — Pues que segun hicieron el aja — Ah, no hicimos nada...—no te creo nada, no creas que no vi tus chichis cuando te estabas bañando ayer aqui en mi casa — ¿¡por que me ves las chichis!? — eh...cuentame mejor ¿como te fue?¿usaron proteccion?¿te dolio? — Bien, si, tome pastillas y no, no me dolió — Golosa — Eso que abril —.

—¡Cambiate perra! Vamos a llegar tarde, quiero ver a felix, entiende —¡ya voy! — Abril termino de vestirse y arreglarse para que ambas bajaran las escaleras y salieran de la casa subiendo a el auto de la pelicafe , amairani estaba enferma y no podria ir — Samantha rivera te juro que si te vuelves a poner hasta el culo el que te va cuidar va ser felix, no yo — Con mucho gusto, el me pasa lo borracha como quiera — Okey, eso fue explicito — Ese era mi proposito, andale apurate, se me hicieron agua los labios — Ash, te hace mal tener novio —.

Ambas bajaron al mismo tiempo del auto al llegar a aquel lugar, la casa de rocío era aun mas grande que la de samantha, era una familia de dinero y se notaba, el estacionamiento de esta estaba llena, solo quedaba un lugar y ahi fue donde estas se estacionaron, la rubia se emociono al ver que el auto de felix estaba estacionado justo enfrente al de ellas — !Ya llego! — la rubia dio saltitos de emocion, sentia como si fuera la primera vez que lo vería, la diferencia era que no lo había visto desde el jueves y ya era sabado, muy poco para abril, una eternidad para la pareja.

Sin darse cuenta eran asquerosamente cursis y algo hormonales, cosa que odiaban, pero disfrutaban molestar o incomodar a sus amigos.

Samantha entro a aquella casa viendo todo el panorama lleno de gente mientras abril entraba corriendo detras de ella y tomando su mano — !Tonta! No te vayas samy, estas muy chiquita y te vas a perder — chiquita la tienes, ya estoy grande wey — ¡no en ese sentido puñetas, eres una enana de mierda y luego no vas a encontrarme ni a mi ni a felix! — ¡Esta muy alta la musica, no te escucho! — abril jalo su mano y subío las escaleras empujando a las personas que estaban ahi para llevarla con felix rapidamente el que estaba con rocío — ¿A donde vamos?— con tu novio sam, ahorita te traigo un trago — Ah, gracias — abril dejo a la chica en una habitacion donde estaban rocío, aldo, felix, oscar, sebastian, sabi y juan sentados evitando la multitud que estaba abajo y tomando un poco — Hola amor — el pelinegro se levanto del sillon y tomo a la rubia por la cintura besando sus labios — ya te queria ver — sonrieron ambos.

— ven, sientate — felix señalo sus piernas al ver que ya no habia lugar en aquel sillon algo limitado. — Sip — samantha se sento sobre el acomodando su falda y abrazandolo mientras el tomaba su cintura.

—samy ¿donde esta ari?— abajo, dijo que me traeria un trago — a bueno, voy con ella — chio ¿Tienes vodka? — Sip — juan, dile a ari que me traiga vodka por favor — el chico asintió y salio de la habitacion — ¿No  es mucho alcohol? creo que acabas de llegar y supongo que es mas rapido — la chica se acerco al oido del pelinegro — entre mas tome mas rapido vamos al baño — verga, escuche todo — dijo sebastian — la pareja rió — ¿Que dijo? — interrumpió rocío mientras felix golpeaba la pierna del castaño rapidamente dirigiendole una mirada desaprobatoria — Mejor no digo nada — agacho la mirada — Ay, pinche felix aburrido — ¿Que? No creo que quieras saber la verdad — ya entendi mejor no me digan nada — volteo rocío a ver a aldo el cual estaba centrado en su celular — Cariño ¿Puedes socializar un poco?—.

— ¿Mande? — ash nada aldo, siempre es lo mismo — mejor nos vamos, los dejamos solos — la relacion de estos ya no era tan estable y linda desde que aldo conoció a osvaldo, hablaba demaciado con el y rocío simplemente se sentia ignorada, siempre peleaban.

Que quede entre nosotros | Riverduccion Donde viven las historias. Descúbrelo ahora