Capítulo 9

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Luego de salir de la ciudad y meterse en el bosque para acortar camino, ya que no usaba mucho el mapa, quería ver qué clase de Pokémon ahí en el bosque para cuando algún entrenador lo rete él ya esté preparado y a la vez para poder entrenar sus técnicas ninjas sin que otras personas lo vean.

Habían tenido un largo entrenamiento los 4 y se estaban tomando un descanso para almorzar. Mientras los Pokémon comían, Sasuke practicaba algo de Fūinjutsu con unos pergaminos que creó para poder llevar muchas cosas sin preocuparse de cómo cargarlas.

Meowth: —lo observaba con curiosidad— ¿Qué estás haciendo? —sus otros 2 compañeros Pokémon prestaron atención a la conversación disimuladamente—.

Sasuke: Estoy practicando algo llamado Fūinjutsu y sirve para poder guardar y luego invocar objetos... Es algo útil. Sería como una forma de almacenar cosas.

Meowth: Mmmm y ¿sirve para traer seres vivos?.

Sasuke: Sí, mmm... —piensa un momento como explicar esta parte— Eso ya sería algo llamado contrato de invocación... —se queda pensando un momento mientras mira su mano— Tengo un contrato con 2 animales diferentes, uno es una serpiente y el otro un halcón... pero no puedo invocarlos aquí, ya lo intenté.

Meowth: Tal vez al ser esta una dimensión peculiar no puedes invocarlos a ellos... mmm... tal vez por eso tu cuerpo cambió —Sasuke la mira y lo piensa un momento—. Según tus recuerdos deberías tener unos mmmm ¿17 años?, pero aquí solo tienes 10 —se ríe un poco— Y no solo eso; por algún motivo puedes usar el aura, una habilidad que casi ningún humano tiene y ni hablar de pokémones.

Sasuke:... Mmm... Lucario ya me había contado eso cuando me mostró sus recuerdos... tal vez mi cuerpo cambió para adaptarse a este mundo; al menos aún puedo usar mis habilidades ninja.

Meowth: Y no olvides tus ojitos mágicos... aún debemos pensar qué hacer.

Sasuke: —deja lo que hace y la mira— ¿Debemos?.

Meowth: Sí, debemos —suspira—. Los Pokémon seguimos a nuestro entrenador en todo lo que él quiera hacer... en cierta forma los sueños y aspiraciones de ellos se vuelven en los nuestros y ayudaríamos a nuestro entrenador en todo lo que quiera, aunque sean cosas ilegales.

Sasuke: Pero... ¿por qué?... ¿por qué harían cualquier cosa que su entrenador les diga?... ¿incluso aunque eso los ponga en peligro?

Meowth: —solo se encoge de hombros— La verdad no tengo ni idea de porque pasa eso, pero pasa y lo he visto ya... no sé si es por las pokéball, la especie del Pokémon —mirando a Kangaskhan y Lucario— O que... pero incluso en Pokémon salvajes que logran crear una amistad o vínculo con un humano lo hacen. Si me dijeran que eso solo lo hacen los Pokémon que nacen siendo cuidados por un humano, lo creería... pero que hasta Pokémon salvajes harían algo ilegal por su amigo humano... eso no tiene sentido —suspira tocándose la frente con su pata— Pero la verdad, nada tiene sentido en esta vida... en cierta forma tu mundo tiene más sentido que este.

Sasuke: A qué te refieres con más sentido —comienza a guardar cosas en el pergamino—.

Meowth: Que, aunque en tu mundo estaban en una guerra ninja, no mandaban a niños al bosque sin conocimientos de supervivencia —se cruza de brazos— Ya te habrás dado cuenta de que aquí los padres se deshacen de sus hijos a los 10, les dan un Pokémon y que exploren un mundo que ni conocen, ya que muchos de esos niños nunca salieron de sus pueblos.

Sasuke le da la razón en eso; no logra entender cómo es que se permite eso en este mundo y más ahora que se enteró de que existen organizaciones malvadas que te quieren reclutar o robar tus Pokémon. Hasta sospecha que les deben pasar cosas peores. Ya en el bosque donde conoció a Kangaskhan habían pertenencias de humanos, principalmente de niños. Hasta sospecha que por el bosque debe haber restos humanos.

Sasuke:... Meowth ¿a qué te refieres con un Pokémon que nace siendo cuidado por un humano?.

Meowth: ¿Qué no lo sabes?... ¿no te lo contó el profesor que te dio tu pokédex? —él solo niega—... Bien... Los Pokémon nacemos de huevos.

Sasuke:... ¿Huevos?... pero ¿no con mamíferos?.

Meowth:... Mmmmm.... sí, peeero todos nacemos de huevos, no importa que tipo de Pokémon seas, si insecto, volador, acuático o mamífero, todos nacemos de huevos que tienen el mismo tamaño —con sus patas le muestra como cuál es el tamaño de un huevo—.

Sasuke:... —mira algo confundido— Pero... ¿no es demasiado grande?, es casi tan grande como vos... como... ¿cómo es que lo ponen?.

Meowth:... Si ya sé que es algo grande... y... —se sonroja un poco— Y eso ¡no te importa!... y se termina la conversación, es mejor que no lo sepas... desearía no saberlo... —se tapa la cara— Ojalá nunca lo hubiera visto —esto lo dice bajo, pero Sasuke logra escucharla y decide hacer de cuenta que no escuchó nada—.

Decidieron quedarse en el bosque a pasar la noche mientras Sasuke pensaba en lo que le contó Meowth sobre cómo los Pokémon siguen a su entrenador, convirtiéndolo a él en el líder del grupo, recordando al equipo que tenía antes, el equipo Taka que hacían todo lo que él les pedía. Mientras tanto, Meowth mira algunas cosas de la pokédex junto a Lucario para que entienda el cómo funciona, dejando a Kangaskhan contemplando lo que hacía cada uno.

A la mañana siguiente, luego de levantarse en el bosque, se pusieron a entrenar un poco antes de seguir con su camino, donde Sasuke entrenaba su taijutsu y ninjutsu con Lucario y Meowth con Kangaskhan entrenaban entre ellas. En eso escucharon un grito.

Lucario: —se detiene de golpe— ¿Qué fue eso? —se pone a mirar a los alrededores, prestando atención por si lo vuelve a escuchar—.

Sasuke: Sonó como un grito... Habrá otras personas en el bosque.

Meowth: Tal vez sea algún entrenador que se metió con el Pokémon equivocado.

Kangaskhan: Podría haberse encontrado con un enjambre de Beedrill, noté al revisar la zona unos Kakuna.

Sasuke: Te refieres a esos Pokémon insectos que parecen abejas —ella asiente— Según la pokédex hay que tener cuidado con ellos.

Mientras el grupo hablaba sobre el grito y los Beedrill, vuelven a escuchar otros gritos y más sonidos como rugidos.

Kangaskhan: Parece ser que esa persona no está siendo atacada por Beedrill —mirando en dirección de donde vino el grito—.

Meowth: ¿Por qué cree eso? —observa la dirección que mira—.

Kangaskhan: —la mira y le sonríe— Porque los Beedrill están en esa dirección —le señala con su mano— Y los gritos vienen de esa —mueve su mano en dirección de los gritos— En ese lugar hay un claro y un gran lago.

Lucario: ¿Cómo sabes eso? —la mira con curiosidad—.

Kangaskhan: Ayer, mientras entrenaban con Meowth fui a revisar la zona y vi esos sitios.

Sasuke: —los gritos se seguían escuchando y pareciera que se comenzaban a escuchar zumbidos— Será mejor ir a investigar que es —regresa a Kangaskhan a la pokéball y se dirige al lugar de los gritos junto a Lucario y Meowth—.

Mientras los tres iban en dirección al escándalo, los ruidos eran cada vez más fuertes; al llegar ellos se quedan arriba de un árbol observando la situación, y observan a una chica de pelo naranja aterrada siendo atacada por el enjambre de Beedrill y lo que parece ser una enorme y monstruosa serpiente marina que sale del agua.

Sasuke en el mundo PokémonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora