Iron Man. Vida como padre

Sólo un niño

-Tony, no puedes tomarle la temperatura a alguien cuando acaba de terminar de ducharse- le dijo Banner encontrando las palabras que de seguro desinflarían a su amigo.

Éste lo miró efectivo estupefacto. Como cereza del pastel el suceso de la habitación había sido para nada, bueno, además de ser consciente de algo.

-¿Qué?- reaccionó.

-La temperatura del cuerpo cambia durante un baño, porque si estás con el agua caliente pues sube, agua fría baja, además de que luego hay otro cambio cuando estás a una temperatura con el agua y sales y está más frío o caliente, entonces hay que esperar al menos veinte minutos, más preferentemente una hora- le explicó Banner.

Tony dejó caer el brazo y apretó los labios.

-Aunque, igual debo decir que el baño debe de haber ayudado, yo no lo sugerí porque como no ha comido temí que pudiera desmayarse o marearse adentro y supuso que ninguno estaría bien con que tú lo bañaras, pero ya que lo hizo y salió bien ayudará, de paso el algodón debería de terminar de hacer efecto, así que está bien si no se la tomas más por hoy, lo dejaremos para mañana, ¿bien?- le dijo Banner- y también que bueno que ya retuvo los líquidos.

-Sí, genial- le dijo Tony- por cierto, hay algo que quiero pedirte- añadió.

Banner notando el tono más serio se quitó de la pared donde estaba recargado y tomó asiento en el sillón.

-Dime- le dijo.

-A partir de ahora quisiera que tú te ocupes de todos los cuidados que Harley necesite, las inyecciones, la temperatura, acomodarle el algodón, llevarle la comida, todo eso- le dijo.

-¿Por qué?- preguntó Banner- ¿tan mal te fue hace rato?

-Mira, he estado haciendo que se someta a todo por la fuerza, quiero pensar que contigo cooperará más- explicó.

-¿Tú crees? Te conoce más a ti que a mí- le dijo Banner.

-Sí, pero ya sea por menos confianza o respeto no se pondrá como lo ha hecho conmigo, creo que te hará más caso- le dijo Tony.

-Tony... ¿qué pasó?

Tony suspiró con pesadez.

-Completamente no lo sé, pero intenté hablar con él, preguntándole lo que le pasaba y por qué se estaba comportando así y al final me dijo que no entendía por qué fingía dedicarme a cuidarlo si siempre me quejaba cuando tenía que hacerlo y dijo que preferiría que no lo esté cuidando yo, que estaría más tranquilo si yo no estuviera- contó Tony.

Banner lo miró sorprendido.

-¿Estás seguro?- preguntó.

-No, Banner, cómo crees, simplemente estoy de humor para inventarme diálogos irreales para el niño- le dijo Tony rodando los ojos.

-¿Pero por qué te diría algo así? ¿Le hiciste algo antes?- preguntó Banner ignorando lo anterior.

-Lo llevé a la cama para lo de la temperatura, después le pregunté lo que te dije, pero puedo asegurar que lo hice de una manera adecuada, me siento cansado para gritarle, no ha funcionado, sólo quería entender por qué se ha puesto como se pone, y me contestó eso- explicó Tony.