Iron Man. Vida como padre

Feliz Día del Pa... de Películas

Sentía que se volvería loco mientras tenía que estar leyendo tres papeles al mismo tiempo intentando tenerlos listos, y se arrepintió de haber dejado que el sueño lo venciera anoche cuando además se mantuvo con pesadillas, pero en toda su defensa la última misión lo había dejado lo suficientemente cansado.
Harley en momentos pensaba hacer un comentario de que no creía que en serio supiera lo que hacía trabajando de esa manera sin prestarle la atención debida a cada hoja pero temía que si le decía algo al hombre principalmente lo distraería y lo dejaría de peor humor del que ya estaba.
Había pensado que el ambiente estaría un poco incómodo con él ya que después de la llamada de su amigo Happy la noche anterior no volvieron a hablar más que para desearse buenas noches antes de que él se fuera a su habitación, pero esa mañana que entró a desayunar Tony apenas y le había respondido el buenos días y de forma apurada como si le hubiera urgido contestarle para ya no tener que hablar, lo que se hubiera escuchado la noche anterior quedó desechado en la mente del hombre por ocuparse de otros asuntos y él gustoso también lo desechó.
Y ahora por eso se mantenía en total silencio, e incluso le preocupaba cuando la cuchara sonaba contra el plato del cereal.
-Señor Stark, comienzo reproducción del mensaje de voz que acaba de enviarle el señor Hogan- informó J.A.R.V.I.S.
-No- lo paró Tony de inmediato- déjalo en mi celular.
-Como usted ordene señor- contestó la IA.
Tony volvió a su papeleo cuando de pronto la voz de Happy comenzó a oírse desde su celular.
-Tony, ya voy para tu casa, llegaré como a las 12:30, ten listos los papeles que hagan falta por favor- dijo.
Tony entrecerró los ojos.
-Cuando dije en mi celular J.A.R.V.I.S., quise decir que no reprodujeras el mensaje, yo iba a encargarme de abrirlo después- dijo.
-Mis disculpas señor, interpreté mal su indicación- respondió la IA.
-¿En serio?- preguntó Tony.
-De cualquier forma creo que era algo que tenía que saber, no lo molesto más para que termine sus pendientes- finalizó J.A.R.V.I.S., pero Tony sabía que más que querer dejarlo trabajar en paz no quería que le siguiera reclamando.
Negó con la cabeza y siguió en lo suyo. Entre el sueño y ver los papeles y con Harley junto a él no había tenido tiempo de ajustar cuentas con la IA pero ya lo escucharía después.
Por su parte Harley terminó de desayunar y se apresuró a pararse para lavar el plato e irse cuanto antes.
-Harley- lo llamó Tony entonces.
-¿Sí?- respondió él secándose las manos.
-Estaré hablando con Happy de asuntos del trabajo y tendremos que apurarnos, así que si pudieras quedarte en tu habitación para darnos espacio lo agradecería mucho- pidió-ordenó Tony.
Harley sabía cuál era la verdadera razón de que no quisiera que saliera pero se mantenía en el acuerdo "sin hacerle la vida imposible al otro".
Realmente incluso se había estado preguntando cómo María se había enterado de él, y su jefe, ya que por lo que dijo Tony fue él quien la mandó a vigilarlo durante esos días, y la mejor conclusión a la que llegó es que fue por el simple hecho de ser agentes y tener sus métodos porque no imaginaba que Tony dijera que ahora vivía con él, pero la verdad tampoco había querido preguntarle para evitar momentos incómodos.
-Está bien señor Stark, no hay problema- respondió.
-Gracias- dijo Tony antes de volver a una hoja.
Harley sin decir más salió de la cocina rumbo a la habitación, satisfecho en cierta manera porque tampoco quería estar presente mientras Tony siguiera malhumorado.
Tony siguió concentrándose en las hojas, consciente ya de que tendría una discusión con Happy por no acabar a tiempo, pero al menos podría decir que todo fue gracias a la misión de los Vengadores, y sí, también el tiempo que terminó jugando con el niño al fútbol, por lo cual comenzaba a preguntarse si hizo lo correcto al haber dejado el trabajo por eso.
Continuó llenando y leyendo documentos, poniéndolos en una torre conforme los iba terminando, hasta que escuchó el timbre.
-J.A.R., déjalo pasar- ordenó.
La IA no contestó pero poco después su amigo y compañero de trabajo entró a la cocina, llevando un portafolio.
-Llego unos minutos tarde, es que había tráfico y parece que algunos no saben cómo se conduce- se quejó dejando el portafolio en la mesa, entonces reparó en el pequeño desorden que tenía Tony con los documentos.
-Sí, bueno, igual a mí el tiempo me vino muy bien- dijo Tony preparándose para el reclamo.
-¡Tony! Me dijiste que ya habías contestado todo- recriminó Happy al instante mirando hacia arriba con desespero.
-No, dije que faltaba poco- corrigió Tony.
-¿Y para ti eso es poco?- preguntó Happy señalando todos los papeles esparcidos por la mesa.
Tony curveó un poco el labio.
-Comparado con otras veces, sí- contestó.
Happy puso los ojos en blanco.
-Oye, en esta ocasión realmente no fue mi culpa, yo comencé a trabajar desde el último día que fui a la oficina, dispuesto a dejar todo listo pero entonces tuve que, tuve que ir a una misión de los Vengadores, te consta, tú mismo viste mis últimas compras y todo era para eso- se apresuró a explicar Tony, cuidando no mencionar el fútbol pero arrepintiéndose al instante cuando hizo recordar la lista de sus últimas compras, sólo esperó que su último error no le costara entrar en preguntas sobre esas guías.
Happy soltó un suspiro.
-Sí, está bien, en esta ocasión razón tenías- aceptó de mala gana- pero Tony, yo me voy el martes temprano, tú vas a tener que lidiar con todo unos días porque no sé cuánto tarde hacer el trato con el canadiense y necesito que dejemos todos estos papeles listos hoy porque mañana debo ordenar las cosas en la empresa- explicó Happy.
-Y estoy de acuerdo, no hay problema, deja de parlotear preocupado y vamos a trabajar en esto, juntos terminaremos más rápido- dijo Tony sonriendo y dándole un golpecito en el hombro.
Happy rodó los ojos y asintió.
Después Tony se sentó a la cabecera de la mesa mientras Happy al final en frente de él, y comenzaron a trabajar en el papeleo con Happy dándole instrucciones de cada documento, lo cual Tony estaba seguro de que olvidaría pronto.
-Entonces ¿por cuánto tiempo te irás?- preguntó Tony después de rato.
-Yo supongo que no será más de una semana, pero todo dependerá de cómo marchen las cosas en Canadá- respondió Happy.
-Ok, y ¿qué tanto tendría que asistir a la empresa?- siguió preguntando Tony.
-Yo diría que lo propio es todos los días, siendo que eres el dueño- respondió Happy sarcástico y con un poco de mal humor.
-Sólo digo que si repartes responsabilidades...
-Voy a hacerlo Tony, pero será tu responsabilidad ver que se cumpla lo que dejo hecho, habrá varias juntas con la mesa directiva durante la semana, y si faltas y terminan decidiendo algo que no te parezca después no quiero que me culpes a mí- explicó Happy.
Tony soltó un gruñido.
-Bien, ya qué, pero no esperes que esté dando vueltas por cada piso a cada rato como tú, y te aviso que quiero cambiar de mesa directiva, con esas personas no congenio en nada y sólo me vuelven loco- dijo Tony.
-Sí, a mí también, pero eso tendremos que discutirlo cuando regrese del viaje, ahora hay mucho por hacer- contestó Happy.
-Sí- dijo Tony resignado.
Después ambos siguieron trabajando sin distracciones y hablando solamente cosas relacionadas con el papeleo, hasta que a Tony ya sólo le faltaban cuatro formularios.
-Oye- le llamó Happy un poco confundido- ¿estos son todos los papeles?- preguntó.
-Pues sí, son todos los que me diste- respondió Tony aburrido.
-No, no, no, te di otros, aquí hacen falta, uno estaba en francés, otro era aprobar presupuesto para una obra de caridad, había como tres ensayos de propuestas que los administrativos propusieron para incrementar las ventas del nuevo celular y otro me parece estaba en ruso- informó Happy.
Tony dejó otro papel en la torre, recordando haber visto papeles con la descripción de Happy.
-Tony, por favor, dime que no los perdiste- dijo Happy y Tony reconoció su tono como el que ponía siempre que estaba molesto por algo.
-No, pero el día en que me dieron la misión con los Vengadores dejé todo en la mesa y, digamos que ciertos agentes necesitaban un favor aquí,  y cuando regresé encontré estos papeles ya dentro del maletín debajo de la mesa, pero no creo que hayan quitado algo- explicó Tony.
Happy se echó para atrás en su silla y comenzó a dar golpecitos con un dedo en la mesa.
Tony hizo memoria para recordar si había dejado los papeles en otro lado, y por un momento se le ocurrió que tal vez Harley podría haberlos tomado pero, ¿para qué querría el mocoso tomar sus papeles de trabajo? No tenía tres años como para tomarlos y romperlos o ponerse a dibujar en ellos, y por parte de Hill le había dejado los documentos bastante ordenados, de hecho más de lo que él solía hacer y no creía a la agente con el humor de hacerle la broma de esconderlos.
Hizo la cabeza para atrás y entonces lo recordó.
-Ah, tengo una idea de dónde pueden estar- le dijo a Happy.
-¿Tienes una "idea"?- le preguntó su amigo con tono acusador.
-Que es mejor que no saber nada- replicó Tony- de seguro están en la camioneta que me llevé a la empresa el día que me diste los papeles.
Aunque había querido no volver a tocar la camioneta en un principio por rencor a todo lo que le había pasado de regreso a casa después de la reunión con los rusos, al final decidió que le era útil por si necesitaba salir con el niño, además de que ¿cuándo una máquina lo había vencido? por lo que los días que había salido no tan tarde de la empresa le había hecho algunos ajustes y el último día que salió a trabajar la había probado, y probablemente olvidó algunos documentos ahí, después de todo no es que fuera muy cuidadoso con esas cosas.
-Bueno, entonces ve por ellos- le dijo Happy.
-Estoy terminando esto, si me levanto será difícil que quiera seguir después, ve tú- le dijo Tony con tono aburrido firmando una hoja.
Happy suspiró y se levantó.
-¿Dónde está la camioneta?- preguntó.
-Afuera, en la cochera yéndote por el jardín, está abierta- instruyó Tony.
Happy gruñó un poco y salió de la cocina.
Mientras tanto Tony continuó con sus hojas.
Cuando Happy regresó lo hizo con un montón de otros papeles que casi lo hicieron ir para atrás.
-¿En serio? ¿Todo eso?- preguntó.
-Oye, ¿crees que los millones que tienes se hicieron sólo por sentarse detrás de un escritorio haciendo garabatos?- preguntó Happy sentándose de nuevo.
-Bien- dijo Tony.
Happy le repartió la mitad de los documentos y él se quedó con la otra mitad y ambos volvieron al trabajo, con Happy dándole en momentos instrucciones a Tony de lo que debería de encargarse la semana que él estuviera ausente, igual prometiendo dejar todo en un mensaje porque estaba seguro de que el hombre lo olvidaría.
-Oye, Happy, aquí dice que necesito aprobar el incremento de presupuesto para el nuevo prototipo de un carro, ¿estás de acuerdo o lo prefieres llevar a una reunión?- preguntó Tony en cierto momento leyendo todo el documento.
Al ver que su amigo no le contestaba levantó la vista y lo vio leyendo muy concentradamente un papel, con expresión un tanto pasmada.
Automáticamente se preparó para un sermón o una mala noticia sobre las ganancias o cualquier cosa, tal vez incluso algo sin importancia o fácil de resolver pero que el jefe de empresa se tomaría muy en serio.
Happy continuó leyendo un poco más hasta que su vista se dirigió a Tony.
-¿Tienes un hijo?- preguntó como si apenas hubiera encontrado su voz pero no pudiera contener la necesidad de hacer la pregunta.
Tony se quedó congelado en su lugar, con la mente en blanco.
-¿Q-qué?- alcanzó a decir únicamente pero más como un susurro.
-Tienes un hijo- repitió Happy en voz más alta y esta vez cargado de seguridad pero sin dejar el tono ligeramente temblando por la sorpresa que le era lo que estaba diciendo.
Tony seguía sin saber qué decir o sin poder pensar si quiera, después soltó una ligera risa nerviosa, sin sentir gracia alguna sin duda.
-¿A qué viene esto ahora?- preguntó.
-Es ese niño- dijo Happy más para sí mismo en un casi un susurro y luego añadió en voz más alta para Tony- es ese niño ¿cierto? El que llevaste el día de la Expo, él es tu hijo- afirmó.
La sonrisa nerviosa en el rostro de Tony se borró y tomó una expresión mas bien seria.
Happy miraba a su amigo como si le hubieran crecido dos cabezas con cinco ojos en cada una.
-Mira, no sé porqué piensas eso, pero si hablamos podremos encontrar alguna explica...- comenzó a decir Tony con el poco sentido que le quedaba para pensar creyendo que Happy podía estar basando sus sospechas en evidencias que podían explicarse de otra manera.
-¿Qué explicación puede tener? Si aquí lo dice claramente- respondió Happy y le tendió el papel que había estado leyendo.
Con horror Tony miró la prueba de ADN, con los claros nombres "Tony Anthony Stark" y "Harley Keener".
Cerró los ojos un momento sabiendo que ya no podría salir de esa.
La reacción de su amigo le confirmó todo aún más a Happy.
-Por eso compraste las guías- acusó atónito.
-Haber, yo no compré nada, fue el entrometido de J.A.R.V.I.S., y para empezar ¿de dónde sacaste eso?- dijo Tony un tanto rápido y de mal humor.
-De la camioneta, estaba debajo de los papeles en medio de los dos asientos delanteros, creí que era de la empresa y pues terminé viéndolo- explicó Happy y dejó la prueba en la mesa.
Tony soltó el aire, tenía sentido, ni siquiera se había acordado de la dichosa prueba antes y justo después de que la hizo no había querido ni volver a verla, nunca la bajó y tampoco se dio cuenta de que estaba ahí cuando aventó los otros papeles sobre ella.
Happy que se había parado para mostrársela volvió a sentarse.
Tony lo miró esperando cualquier cosa con la cabeza recargada en su mano.
-¿C-cómo sucedió esto?- fue lo primero que se le ocurrió a Happy preguntar.
Tony tomó un suspiro.
-Bueno, Happy, tú sabes, cuando uno crece, las abejas y las flores...
-No es momento para tus bromas Tony, hablo en serio- lo paró Happy.
Tony sabía que no se lo quitaría de encima, y él no quería decirlo, era incluso peor que el que se hubieran enterado Hill y Fury, ellos dos al menos llegaron sabiéndolo y a parte de sus "recomendaciones de agentes" no hicieron mucha bulla, además sólo los veía o hablaba con ellos para cosas relacionadas con Iron Man y los Vengadores, con Happy era diferente, a él iba a tener que explicarle todo y no iba a mantener sus pensamientos al respecto controlados como Fury y Hill, sus emociones como por ejemplo la sorpresa serían muy evidentes, además de que lo veía todos los días, podría simplemente negarse a hablar pero la tensión incómoda quedaría entre ellos cada vez que se vieran y hablaran, en todo momento Happy tendría en mente que hay una cosa importante que le ocultaba, y al final ¿podría incluso molestarse porque pasara de él y eligiera no decirle nada? No lo sabía, su expresión era un tanto ilegible además de la evidente sorpresa y el hecho de que esperaba una respuesta de su parte.
"Por mucho que te avergüences un secreto así no dura para siempre, puede revelarse mañana por un descuido tuyo o cuando el niño ya tenga veinte años" llegaron a su mente las palabras que Nick Fury le había dicho el día anterior.
Comenzaba a ver que era cierto, ya había tres personas que conocían su secreto y una de ellas no necesitó ser un agente para averiguarlo, sucedió como una casualidad o incluso un descuido suyo por no recordar que en donde lo mandó había dejado la prueba de ADN, de cualquier forma había pasado y podía seguir pasando, no iba a romperse la cabeza ahora por pensar que todo pudiera ser dicho a todo el mundo, obviamente no pensaba hacer una conferencia de prensa como cuando reveló que él era Iron Man, y seguiría ocultando su reciente verdad todo el tiempo que pudiera, pero por ese momento ya no tenía escapatoria. Sabía que podía aventar el común discurso de "es mi vida y hago lo que quiera con ella" pero al imaginárselo supo que no podría, Happy siempre había sabido todo lo que le pasaba, había sido su guardaespaldas durante mucho tiempo y había cosas que sólo él sabía, al final de algunas pocas fiestas llegó a presenciar no al Tony borracho, divertido y dispuesto a seguir tomando y divertirse, sino al Tony que gracias al alcohol terminaba recriminándose el no haberle hablado a sus padres por última vez antes de que se fueran y tuvieran ese accidente de coche, al Tony que lloró la muerte de sus progenitores y la soledad que sentía y ocultaba detrás de fiestas y mujeres un tiempo atrás, así que no, no le daría esa respuesta a Happy, cierto que él habría elegido no contarle nada sobre Harley y mantener todo en un secreto por mucho tiempo (no podía decir cuánto o en qué circunstancias querría que se supiera) pero en ese momento que el hombre ya lo había averiguado por sus propios medios no veía más que decirle la verdad, sólo pedía que fuera a la última persona que tuviera que decírsela y enfrentar por su situación.
Soltó un fuerte suspiro y con pesar comenzó.
-¿Recuerdas a... una mujer llamada Helen? Estuvo como dos meses intentando verme después de que la conocí en una fiesta- preguntó.
Happy comenzó a hacer memoria un poco y luego una expresión de reconocimiento pasó por él.
-Sí, sí, era muy insistente, incluso me tocó a mí ser quien la rechazó algunas veces- respondió, con cierto tono acusador por haber hecho el trabajo sucio por Tony.
-Sí, bueno pues, digamos que... estuvo buscándome porque... ya lo debes suponer ¿no? Su apellido era Keener- terminó diciendo Tony.
Happy se quedó sin decir nada y después asintió lentamente. Esperó a que Tony continuara su relato pero al no hacerlo decidió que él debía preguntar.
-¿Y cómo te enteraste? ¿Te volvió a buscar después de tanto tiempo? ¿Ocho años?- preguntó.
-Creo que once, el niño tiene diez- explicó Tony- respecto a ella... está muerta.
La información hizo a Happy abrir un poco la boca.
-¿Recuerdas que hace casi dos meses había un hombre queriéndose comunicar conmigo? ¿De apellido Horker?
-Sí, sí, lo recuerdo.
-Bueno, él es un trabajador social, al no recibir las llamadas vino a mi casa y pues me lo dijo, fue en un accidente de coche, llevaba al niño, por eso las heridas. Yo no le creí pero es muy insistente en su trabajo así que me convenció de hacerme la prueba y lo hice esperando que diera negativo para que me dejara en paz pero, ya viste lo que terminé leyendo- dijo Tony mirando la hoja.
Esperó a que Happy dijera algo pero parecía estar esperando que dijera más.
-Entonces, gracias a esta hoja- continuó levantando un poco la prueba- se pudo hacer todo rápidamente, habían pasado dos semanas desde la muerte de Helen, así que el niño estuvo en un orfanato durante ese tiempo, pero al día siguiente de hacerme la prueba fue cuestión de firmar un papel y me lo dieron.
-¿Entonces está viviendo aquí? ¿Así de rápido?- preguntó Happy, quien habría esperado que Harley siguiera en el orfanato y Tony lo estuviera sacando sólo durante días para irse familiarizando mientras documentos estaban en proceso.
Tony asintió lentamente.
-Ajá, está en su habitación. No hubo que esperar mucho, no es una adopción, como... la prueba dio positiva pues es ley que lo tenga yo.
-¿Y cómo es que nadie se enteró?- preguntó Happy.
-Con todo y todo me atrevería a decir que Thomas es un buen trabajador social, pensó en el lío que podía causar una noticia como esta y mantuvo todo en bajo perfil y con pocas personas, y como ya te pudiste haber dado cuenta yo he sido muy cuidadoso- respondió Tony.
-¿Y el niño lo sabe? ¿Que tu eres su padre?
Oír la pregunta le dificultó un poco a Tony contestar pero se las arregló, después de todo ya había comenzado.
-Ajá, Horker y su compañera se aseguraron de dejárselo muy en claro- respondió con cierto reclamo.
-¿Y te dice "papá"? ¿O algo así?- sintió curiosidad Happy.
-Claro que no- se apresuró a responder Tony- ni siquiera, por suerte, hemos hablado de esto, es como si... simplemente soy el adulto con el que vive y lo mantiene y él es el niño que tengo que tener aquí- explicó.
Happy levantó una ceja.
-¿Estás seguro?- preguntó.
-Pues claro- contestó Tony con confusión pero seguro.
-Bueno, no es eso lo que vi- se excusó Happy.
Tony frunció el ceño y luego recordó las guías.
-Lo de las guías era cierto, J.A.R.V.I.S. se averió un poco y le dio por comprar...
-No estoy hablando de las guías- lo interrumpió Happy- es sólo que sonaste como si en serio apenas y se dirigieran la palabra o se cruzaran en el mismo pasillo pero con algo de confianza se veían el día de la Expo, además, ¿ayudarte a construir una armadura? Ahora entiendo cómo y porqué.
-Bueno, no es tanto así, al menos ya no, quiero decir que de vez en cuando hablamos un poco más allá de un saludo pero no tiene que ver nuestra... el hecho de quién soy, o sea... más que nada supongo que ha influido el hecho de que ya lo conocía, eso nos resguardó un poco de confianza para no estar siempre tan tensos cuando estamos juntos- explicó.
Happy frunció el ceño.
-Lo que te dije en la Expo no era tanto una mentira, sí me ayudó durante el problema de Aldrich Killian, mi armadura se averió y yo llegué a su garaje para resguardarme y repararla, poco después él apareció, estuvo a punto de lanzarme papas para defender su casa pero al ver la armadura terminó confiando en mí y me ayudó con algunas cosas que necesitaba y a cuidar de la armadura mientras yo regresaba a enfrentar al villano- explicó.
Luego el silencio se hizo entre ambos y Happy pareció estar digiriendo toda la información obtenida.
-Vaya, conoces a ese chico y tiempo después resulta que es tu hijo, creo que esa es la definición de "que pequeño el mundo es"- terminó diciendo Happy.
Tony hizo una pequeña mueca.
-Por favor Happ, abstente de comentarios que incluyan las palabras "padre" "hijo" y sus sinónimos, sobretodo si llegas a estar en frente del niño- le pidió.
Happy lo estudió un momento con la mirada.
-No te cayó bien la noticia ¿cierto?- preguntó.
-¿Caerme bien? Honestamente Happy, cuando me ves, una de las palabras que vienen a tu mente para definirme es "padre"?- preguntó con tono cansado.
-Honestamente no- respondió Happy levantando por un segundo ambas cejas y asintiendo- ¿por eso el secreto?
Tony suspiró antes de asentir.
-Por obvias razones que tú debes de saber no puedo dejar que se entere la prensa.
-Sí, lo entiendo, pero me refería a conmigo- respondió Happy cruzándose de brazos y recargándose en la silla. Su tono no era de reclamo o enojo, era más bien interesado en las respuestas, como si estuviera tomando las piezas de un rompecabezas y apenas comenzara a entender qué figura se formaría.
-No era algo en especial contigo, en serio, nadie a demás de los trabajadores sociales y algunas tres personas más lo saben, al menos nadie de los cercanos a mí, con excepción de Fury y Hill que me demostraron sabían la verdad el día de la misión y ayer, pero no se los dije, son agentes y lo terminaron averiguando- se sinceró Tony.
-¿Ni siquiera Rhoedy?- preguntó Happy.
Tony negó con la cabeza.
-Vino no hace mucho cuando regresó de su última misión pero Harley no salió de su cuarto y no se enteró de nada- explicó Tony, sin querer entrar en detalles de lo que provocó ese incidente.
-Entonces imagino que de no haber encontrado la prueba hoy no me habrías dicho, ¿cierto?- preguntó Happy.
-La verdad es que no- contestó Tony- creo que se ve menos real si nadie se entera, y yo... no puede ser real, quiero decir, ¿qué le puede esperar a un niño a mi lado? Tú mismo lo dijiste, no me veo como un padre...
-Bueno, no lo dije...
-No intentes acomodarlo, lo dijiste, lo piensas, y lo sabes- cortó Tony antes de cruzarse de brazos y recargarse también contra la silla.
Happy esperó un poco antes de contestar.
-Yo no sé qué decirte Tony, quiero decir, ciertamente sé que no eres un hombre de niños pero ¿qué te puedo decir yo? Tampoco lo soy, tengo poca paciencia y en general no suelo tolerarlos así que...- se encogió de hombros.
Seguía digiriendo la información, aunque ya se había recuperado de lo pasmado, principalmente sonaba muy extraño pensar que Tony tenía un hijo, lo había visto con el niño en cuestión, y debía admitir que sí notaba cierta relación en ellos que sólo supo explicarse ahora porque ¿por qué soportaría Tony Stark a un niño sino era porque fuera suyo?
Y respecto a no recibir la noticia no se sintió mal o molesto en realidad, después de todo era Tony de quien se estaba hablando, aunque sabía muchas cosas del hombre varias se había enterado por accidente o después de un tiempo, puesto que Tony no era alguien que rindiera cuentas de sus actos a nadie y sólo te contaría lo que quisiera porque quisiera, así que lo que hizo no estuvo fuera de lo normal para él, lo único diferente es que éste era el mayor secreto que el hombre había guardado hasta ahora, yendo al mismo nivel con ser Iron Man, claro, sólo que el segundo le había durado muy poco tiempo y lo había revelado con orgullo y seguridad.
-¿Cómo ha sido entonces? ¿Trabajo?- fue lo único que se le ocurrió preguntar.
-Mmm, si soy sincero no hago mucho, en su mayoría diría que el niño es independiente, sólo algunos... detalles, como hacer que comiera a sus horas o tomara las medicinas para sus heridas y todo eso, pero en sí me hace caso, claro que siendo yo termino gritándole un poco y... no soy el más atento en muchas cosas, no puedo, no sé cómo, pero ni siquiera tiene familia por parte de su madre así que no tiene otra opción, pero quisiera que sí la tuviera- admitió Tony.
Aún no estaba contento con dar la información, pero el hecho de que Happy no lo acusara o regañara ya sea por ocultar el secreto o por tener al niño en sí lo hizo tener un poco más de confianza, sobretodo sentía, aunque de manera muy ligera y poco perceptible, que dejaba caer un pequeño peso fuera de sí al poder expresarse con alguien que no fuera prácticamente un desconocido como Thomas, y una IA creada por él mismo como J.A.R.V.I.S.
Happy asintió. Podía ver el peso que para su amigo significaba ese gran cambio en su vida y estaba dejando que se desahogara, ya que no era algo que soliera hacer mucho esos días, lo conocía, sabía que lo que ocurrió en Nueva York le había afectado y también lo había descubierto viendo la foto de Pepper en su oficina un par de veces aunque después actuara como si nada, incluso con una broma o sonrisa, así que si estaba logrado que expresara lo que sentía de algo por lo menos estaba ahí para escuchar.
-Happy, creo que está de más decirte que esto no puede saberlo nadie ¿no?- preguntó Tony momentos después.
-¿Por quién me tomas? ¿Crees que voy a ir a gritarlo a la prensa?- le preguntó Happy a modo de respuesta.
-No, en ese sentido no tengo dudas de ti, pero te conozco, después de que Pepper me dejó, ¿crees que me creo que Rhoedy llegó aquí por casualidad? ¿Justo poco después de que tú le hablaras a no sé quién?- preguntó Tony.
-Oye, lo hice para ayudarte, esos días... no estabas bien Tony- dijo Happy recordando que Tony se la pasó en el taller tomando cerveza.
-Sé tu intención, aún así al instante asumiste que estaba en problemas y necesitaba a alguien, y tal vez sí en ese momento pero con esto, bien, claro que estoy en problemas pero no veo manera en que puedan ayudarme, ¿o qué haría Rhoedy? ¿Adoptar a Harley y criarlo? Lo dudo mucho, su manera de ayudarme será decirme que hacer, después del sermón, está en el ejército y es tan recto y de responsabilidades, y yo no necesito que me quieran ayudar a tomar responsabilidades sólo necesito mi espacio en este asunto- dejó en claro Tony.
-Tony, te entiendo, pero...
-No, no creo que lo hagas, quien pasará por conversaciones incómodas soy yo, mientras ustedes sólo se sentarán a juzgarme...
-Por favor Tony, ¿crees que yo puedo juzgarte en esto? ¿Qué parte de que no se me dan los niños a mí tampoco no entiendes? ¿Qué esperas que te regañe o te corrija? ¿Que lo mandes a dormir a las 09:00 en lugar de las 10:00? Ni siquiera sé cuántas horas debe de dormir alguien de mi edad, mucho menos un niño de diez años- explicó Happy.
Tony se sintió más relajado, con esas palabras comprendía que al parecer Happy no iba a comenzar los discursos de "no sabrás criar a ese niño así que te diré cómo hacerlo mientras intercalo sermones por tenerlo".
-¿Sabes que Rhoedy no verá la situación con tanta "libertad", no?- preguntó Tony.
Happy se quedó callado unos segundos, siendo consciente de eso, él no iba a recriminar a Tony por la forma en que hiciera las cosas con el niño, tampoco lo que hizo o no en el pasado, con años viendo de cerca la vida de los famosos sabía que no era raro que a hombres mujeriegos de repente les salieran hijos después de asistir a una fiesta, si bien no se imaginaba a Tony como padre en un sentido su sorpresa hace años era que aún no se hubiera visto en un lío similar, después de todo llevaba más de diez años con él, mucho antes de que saliera con Pepper, había visto muy de cerca, no por revistas o noticias al Tony rebelde y que se "divertía" todos los días, y muchas veces se dio cuenta de que de nada servía reclamarle las cosas, él sólo se alejaría o lo ignoraría, así que lo que mejor pudo hacer siempre fue ser su guardaespaldas, estar ahí para apoyarlo cuando fuera necesario o él mismo se lo pidiera, justo como intentaba hacer en ese momento escuchándolo.
-No te preocupes, no voy a decirle nada a nadie- le prometió a Tony y al instante vio como al hombre se le quitó un poco lo tenso en el rostro- pero oye, no creo que puedas mantener este secreto para siempre, hoy me enteré yo por casualidad, en algún momento Rhodes o cualquier otro de tus amigos puede venir y si el niño está en la sala o...
-De eso ya me estoy dando cuenta, así que sólo me quedará ser cuidadoso y extenderlo todo lo que pueda, por un tiempo más al menos- "por muchos muchos años al menos" pensó, creyendo en realidad que nunca se sentiría preparado para hablar de su secreto si no era revelado por accidente y sin opción de una mentira como justificación.
Happy asintió un par de veces.
-Está bien- dijo, y después de segundos añadió pero con un tono más relajado para romper la tensión- aunque si cambias de opinión la economía de la empresa podría subir, ya sabes, los comerciales del padre soltero del año, eso siempre atrae a las mujeres- terminó diciendo guiñando un ojo.
Tony escuchó la palabra "clave", pero al ver la expresión y tono de Happy, que no solía hacer muchas bromas, comprendió que todo lo dijo en un intento de aligerar el ambiente y no pudo evitar sonreír agradecido.
-Cállate- le dijo, luego añadió- siendo sincero creí que te lo tomarías peor y me dirías la mala idea que es que tenga un niño bajo mi cuidado.
Happy asintió pensativo.
-No mentiré, si me hubieras dicho que quieres adoptar a un niño te habría golpeado un poco para que lo consideraras y te habría dicho las razones por las que eso no podría ser sólo un experimento o juego, pero- ante esa palabra Tony puso una cara de evidente interés para saber qué lo detenía de ese sermón ahora- en primer lugar me vengo enterando cuando el niño ya tiene casi dos meses viviendo contigo y sigue entero, y en segundo lugar como tú lo dijiste no tiene más opciones y ciertamente es tu responsabilidad así que, ¿de qué sirven los discursos de malas ideas? no soy yo quien ahora tiene un niño bajo su techo pero creo que ya sólo queda afrontar la realidad como mejor se pueda- terminó de explicar.
Tony meditó un poco sus palabras.
-Gracias- terminó diciendo para sorpresa de su amigo- por no volver la charla peor.
Happy sólo asintió con una sonrisa de lado.
Se miraron unos ligeros momentos, esos en que los amigos con sólo ver el rostro del otro saben que pueden confiar entre ellos.
-Ahora hay que seguir con estos pendientes si queremos terminarlos hoy- dijo Tony después más que listo para cambiar el tema.
-Sí, claro- respondió Happy comprendiendo la intención de su amigo y a la vez sabiendo que tendrían que seguir tarde o temprano.
-Oye, ¿esto no venía en un sobre?- preguntó Tony tomando la prueba de ADN y doblándola.
-Ah, sí- respondió Happy y se lo arrimó.
Tony lo tomó y metió el papel en el sobre.
-Mejor me voy a guardar esto en un lugar mejor antes de que nos distraigamos y terminemos mandando esto a la mesa directiva- dijo Tony antes de levantarse de la silla con el sobre en mano.
Fue a su habitación a guardarlo en un cajón de su tocador antes de regresar con Happy y como si ningún secreto hubiera sido revelado se concentraron en terminar sus pendientes.
-Bueno, eso era lo último- dijo Happy después de meter el último papel que Tony le pasó firmado en el maletín.
-Al fin- contestó Tony.
-No lo olvides, te enviaré las instrucciones de la semana por mensaje, encárgate de lo que te dejo dicho y le daré a los trabajadores instrucciones mañana, tu te presentas a partir del martes- instruyó Happy.
-Sí mamá- contestó Tony ya que había perdido la cuenta de cuántas veces Happy le repitió lo mismo todo el rato que estuvieron trabajando.
-Bueno, pues me voy, quiero estar al menos el resto de la tarde sin hacer nada- dijo Happy.
-¿No quieres quedarte a comer?- preguntó Tony.
-¿Tienes algo para comer?- preguntó Happy.
-A parte de sopas instantaneas no- respondió Tony.
-Entonces yo paso- contestó Happy parándose con el maletín- y en ese caso ¿qué le das de comer al niño?- preguntó.
Tony bajó un poco la cabeza y entrecerró los ojos.
-No es un reclamo, es sólo por curiosidad- se explicó Happy.
Tony tarareó.
-Pues las sopas que te ofrecí, las calienta él mismo, y de vez en cuando si estoy aquí y no tengo nada más que hacer hago huevo, sándwiches, hamburguesas y perros calientes- contestó.
-Mmm, está bien, yo haría lo mismo- admitió, y Tony supo que no mentía, no era que Happy se especializara en cocinar, de hecho lo hacía peor que él, por un momento incluso le pasó por la mente hacer que Harley comiera algo cocinado por su amigo para que así aprendiera a valorar sus perros calientes.
Acompañó a Happy a la puerta y vió cómo se subía a su auto mientras veía algo en su celular.
-Mmm, llegaré a tiempo para el maratón de Downton Abbey- dijo- por cierto, si quieres ver un lado bueno de todo, ahora tienes un día de festejo- añadió por la ventana.
-¿Eh?- preguntó Tony confundido.
Happy le enseñó su celular bloqueado, tenía un fondo de pantalla completamente azul así que Tony no comprendía qué era lo que le enseñaba exactamente.
-Hoy es domingo 16 de junio- dijo Happy al ver la confusión de su amigo.
-¿Mmm?- tarareó Tony aún sin comprender.
-El tercer domingo del mes, el día de los...
Tony comprendió y entornó los ojos cruzándose de brazos.
-Si terminas esa frase te aseguro que encontrarás las funciones de los botones de tu auto al revés- amenazó.
Happy no pudo evitar sonreír con suficiencia. No pensaba hacerle la burla a Tony todo el tiempo, comprendía la gravedad que encontraba en su situación, pero al menos con esa broma, tal vez dos o tres más, debía desquitarse de lo que le hacía pasar.
-Está bien, está bien- le dijo prendiendo el auto- pero, muchas felicidades por tu primer día del progenitor Tony- añadió antes de arrancar.
Tony estuvo tentado de jaquear su auto en ese momento pero al final terminó sonriendo sólo un poco, aliviado más que nada, no era que las bromas de ese asunto le gustaran pero al final le era mejor eso a que Happy hubiera decidido reprocharle y echarle en cara cosas que ya le eran evidentes, y al final, nuevamente comprendía que era una manera de Happy para no mantener tensión en el asunto.
Se dio la vuelta y regresó dentro de la casa, siendo libre al fin, al menos hasta el martes que tuviera que ejercer de jefe total, pero por el momento podría relajarse.
Lo primero que hizo fue como casi siempre tomar una cerveza del refrigerador e ir a sentarse al sillón delante de la televisión.
Cambiaba los canales aburridamente hasta que sintió cómo alguien se ponía detrás del sillón quedando a un lado de él.
-¿Ya puedo estar afuera?- preguntó Harley.
-Ya estás aquí, ¿no?- le contestó Tony sin dejar de cambiarle a la televisión.
-Entonces ¿puedo no tener que regresar a la habitación?- preguntó Harley.
-Sí, puedes- contestó Tony despreocupadamente aún con su atención en la televisión.
-Ok- respondió Harley.
Segundos después Tony escuchó el sonido de una lata abrirse y al instante sintió cómo su pelo, hombro izquierdo y parte del pecho se mojaban.
Volteó a ver al niño y lo vio con los ojos muy abiertos sosteniendo una lata de coca-cola escurriendo por su mano, mientras observaba con temor el sillón que también se había mojado y a él mismo.
-Perdón- se apresuró a decir Harley antes de salir corriendo hacia la cocina.
Tony sólo se le quedó mirando antes de limpiarse con la mano la frente y el ojo derecho por la coca que le estaba escurriendo.
Precisamente esa era una de las razones por las cuales no le agradaban mucho los niños, ensuciaban todo de alguna manera u otra, podía con vidrios rotos, los mandaba a arreglar, pero en esos momentos no estaba para contratar personal con el niño viviendo con él, así que en él tenía que recaer el tema de la limpieza, y además ¿por qué tenía que manchar precisamente el sillón donde estaba sentado él?
Se quitó la playera de encima que estaba bastante mojada del hombro y con ella se limpió el pelo, la cara, y las manos, estando por suerte con la playera negra de tirantes seca.
Después Harley regresó de la cocina sin la lata de refresco y con algunas servilletas.
Dio la vuelta al sillón y comenzó a limpiarlo.
-Lo siento, el refresco explotó, fue un accidente- decía sin ver a Tony mientras limpiaba, asustado principalmente por pensar en cuánto podían costar esos sillones y de qué estaban echos.
-Sí, eso supuse- le contestó Tony.
Al menos el refresco había quedado a un lado de él y aún tenía espacio para recorrerse un poco en el sillón y no sentarse en la parte mojada.
Dejó la playera a un lado en el sillón y continuó pasando los canales mientras Harley pasaba varias veces la servilleta a través del asiento rápidamente, después se asustó cuando parte del papel se desmoronó y dejó restos pegado en el sillón.
A Tony no le pasó inadvertido eso y únicamente le pasó su playera.
Harley la tomó y al ver que ya estaba húmeda de algunas partes talló con eso el sillón enfocándose en despegar el resto del papel.
¿Cuántas veces desde que vivía con él Tony terminó usando sus playeras como servilletas y cuántas veces fue su culpa?
Siguió limpiando hasta que supo que por más que tallara La Mancha seguiría ahí hasta secar por sí sola, sólo esperó que en ese miento desapareciera por completo y no dejara marca.
Volteó a ver a Tony quien seguía concentrado en la televisión y él dudosamente se paró y sentó al lado de las manchas, con la intención de quedarse a esperar a que el refresco se secara por completo y por suerte también desapareciera, sino...
-Harley, quita esa cara, no voy a matarte sólo por un sillón- dijo Tony serio pero con un toque de humor minutos después de ver cómo la mirada de Harley iba del sillón a él nerviosamente.
-¿Tampoco por la playera?- preguntó Harley.
-No lo hice por romperle una pieza a mi armadura el día que nos conocimos, ¿por qué lo haría por esto?- preguntó Tony levantando una ceja.
Harley era consciente de eso, claro que cuando él le hizo eso a la armadura Tony era un intruso en su garaje, pero ahora era al revés y no quería dañar la propiedad del hombre y hacerlo enfadar por eso.
Se relajó un poco más pero aún continuó pasando la playera de vez en cuando para seguir secando las manchas.
Después Tony se terminó su cerveza y fue a buscar otra, regresando cuando estaba comenzando una película en el canal que le había dejado.
-Oh, esta me gusta- oyó murmurar a Harley antes de rodear el sillón y sentarse.
Después miró con una ceja levantada a un hombre ordenando a un hámster que al parecer era un agente que descargara información de alguien que había creado un aparato para manejar armas.
-¿En serio te gusta esto?- le preguntó a Harley.
El niño se mantenía sentado al lado con la mano sobre la playera que seguí en las manchas del refresco, aunque Harley parecía haberlo olvidado ya.
-Sí, ¿no es genial?- contestó sin dejar de ver la pantalla.
-¿Hamsters entrenados para ser agentes?- preguntó Tony dejando claro en su tono que no le encontraba mucho sentido.
-¿Lo ve raro el hombre que vuela en una armadura siendo un superhéroe en compañía de un dios nórdico y un hombre que se transforma en un gigante verde?- le preguntó Harley.
-Mmm, bueno, es que al menos somos humanos, ¿pero hamsters? ¿Y un topo?- preguntó Tony.
-Son muy buenos, fueron entrenados y modificados genéticamente por ellos- dijo Harley señalando a los amigos humanos de la película- y formaron al equipo llamado Fuerza G.
-Como no lo pensé para llamarnos Fuerza V- murmuró Tony dándole un sorbo a su cerveza.
De haber estado solo habría cambiado de canal pero al ver al niño a su lado entretenido con la película le dejó ahí, además de que no tenía nada mejor que ver, lo único que quería era pasarse en el sillón con su cerveza.
-Yo siempre quise tener un hámster, pero mi mamá no me dejaba- comentó Harley minutos después cuando en la película los hamsters quedaban atrapados en una tienda de mascotas y unos niños llegaban para llevarlos.
-Y no la culpo- se apresuró a decir Tony, antes de que al niño se le ocurriera pedirle uno.
Ya tenía suficiente con tenerlo a él en la casa, lo último que necesitaba y que ni siquiera entraba en la lista de cosas que necesitaba era una mascota, de cualquier tipo, no aceptaría ni si quiera un pez, él no iba a alimentarlo y si la madre del niño no lo dejaba tener mascotas era por algo, y aunque fuera responsable con un pez éstos solían morir pronto, no pensaba tener a Harley llorando por la muerte de una mascota, suponiendo que fuera un hámster como lo mencionó, ¿y si terminaba pisándolo por accidente o simplemente se escapaba? No, ni hablar.
-Ella decía que eran como ratones y le deban miedo los ratones- contó Harley.
-Es normal, un miedo común- respondió Tony.
-¿A ti te dan miedo?- preguntó Harley con una ceja levantada.
-No, pero aún así no son de mi agrado, de hecho ningún animal es de mi agrado, al menos no mientras estén cerca de mí invadiendo mi casa- respondió Tony.
-¿Nunca tuviste una mascota?- preguntó Harley.
Tony negó con la cabeza.
¿Cómo habría podido tener una mascota si la mayor parte de su niñez y toda su adolescencia se la pasó encerrado en un internado en otro estado? Además, aunque hubiera estado en casa sabía que su padre era como él ahora, sin querer ver un animal correteando por su casa, mientras su madre nunca mencionó nada pero no fue la típica mujer rica que se la pasaba caminando acariciando un gato en sus brazos.
-Mis padres no eran personas de animales así que yo tampoco- respondió.
-¿Y nunca quisiste tener una?- insistió Harley.
Tony lo pensó un momento.
-Tal vez habría aceptado algún perro antes de los nueve pero en realidad nunca lo pensé- respondió Tony.
Era cierto, creía en ese momento que habría podido tener una compañía si era cierto que el perro era el mejor amigo del hombre, tal ve en ese momento él se habría adaptado a ser responsable sin mucha dificultad como supondría ahora, pero la verdad era que nunca pidió la compañía canina o de alguna otra especie durante su niñez, él sólo anheló la de sus padres.
Harley sólo asintió.
En silencio siguieron viendo la película, en cierto punto Tony yendo por otra cerveza.
-Si fuera ese hámster ya me habría vuelto loco- comentó Tony cuando veía cómo el hámster gordito del equipo no paraba de abrazar a su recién descubierto hermano.
En cierto punto se quedó dormido, porque al despertar la película estaba teniendo su última escena con más ratones llegando para ser entrenados por el equipo.
Harley pareció no notar que ya estaba despierto y tomó el control para cambiar de canal, y pronto Tony se encontró viendo El Rey León.
Ya había visto la película pero la verdad nunca fue aficionado de las caricaturas, aún así decidió dejarle el mando al niño y esperó a que el sueño lo venciera de nuevo pero al final se mantuvo despierto.
Harley quitó la playera del hombre al fin, esperando que tanto rato hubiera reparado el daño, y suspiró con alivio cuando ciertamente lo hizo.
Dejó la playera al otro extremo del sillón y se recargó completamente en el respaldo, viendo la película.
Mientras en la película sonaba la canción Hakuna Matata a Tony lo atrajo un sonido y al voltear vio a Harley moviéndose ligeramente y tarareando la canción, pero a medida que pasaba se movía aún más haciendo evidente que bailaba hasta que incluso terminó cantando.
Tony no pudo evitar sonreír con burla siendo consciente de que Harley hacía eso pensando que no lo estaba viendo, lo cual fue más evidente cuando terminó volteando y al verlo se le subieron los colores al rostro y se calló.
-No no, por mí sigue, se siente un ambiente más realista mientras veo la película- le dijo con tono burlón.
-Cállate- se atrevió a decirle Harley volviendo a recargarse contra el sillón y mirando la televisión con cuidado de no hacer contacto visual con Tony.
Éste al ver su reacción soltó una pequeña risa.
-Hablo en serio, no te apostaría para ser la próxima estrella juvenil pero tu voz es... aceptable, no produce tantas molestias, al menos yo no soy exigente como lo sería un juez- dijo Tony, principalmente en venganza porque el mocoso se había metido antes con su cocina.
Harley sólo le dirigió una mirada molesta sabiendo porqué el hombre le decía eso.
Tony sólo lo miró con una sonrisa de lado y una ceja levantada.
Siguieron viendo la película en un silencio cómodo, hasta la escena donde Mufasa se le aparece a Simba, momento en que Harley comenzó a susurrar los diálogos de los dos personajes.
-Genial, también doblas voces- le dijo Tony.
-Esa escena me encanta- le respondió Harley.
Después de eso pasaron un comercial, que provocó un gran disgusto en Tony.
"Hola a todas las personas que están pasando el día celebrando a sus padres en compañía de nuestro maratón de películas donde celebramos a los mejores padres del mágico mundo de Disney"- narraba la voz de una mujer exageradamente alegre mientras en la pantalla salía un fondo amarillo que iba recorriendo a Mufasa con Simba, Goofy con Max, Pinocho con Geppetto, Tritón con Ariel y sus hermanas, Bambi con Bambino, entre otros padres y sus hijos- "Por favor, continúa con nosotros y Feliz Día del Padre a todos los padres"- finalizó antes de poner más comerciales.
Harley no dio muestras de nada y simplemente mantuvo su vista en la televisión al igual que Tony, quien creía que ya había escuchado demasiadas veces las palabras "papá" y "padre" durante esos dos últimos días.
Por suerte en ese momento un ruido ya un tanto familiar para él le dio la excusa perfecta para irse.
-Hora de comer- anunció y se fue hacia la cocina de inmediato.
Sólo para no estar en la sala se puso a hacer huevo con jamón y al terminar llamó al niño.
Harley fue con un poco de mala gana por dejar la película pero aún así con bastante hambre y se alegró de ver comida casera.
-Señor Stark- llamó mientras comían a Tony.
-¿Sí?
-¿Cuándo practicaremos una pelea otra vez?- preguntó.
-No estoy seguro niño, estaré muy ocupado esta semana, Happy sale del país y yo debo encargarme de todo en la empresa- explicó Tony.
Harley se vió un poco desanimado pero Tony no lo notó.
-Oh, Entonces ¿no lo veré esta semana?- se animó a preguntar.
-No lo sé, intentaré hacer las cosas rápido pero depende de todo lo que me deje Happy y aunque no llegue tan tarde no creo tener humor para entrenarte- explicó Tony.
Harley sólo asintió y siguieron comiendo.
Al finalizar Tony lavó los platos y Harley regresó con El Rey León, pero la película ya se había acabado y ahora estaba Pinocho.
Cuando Tony regresó lo hizo con una taza de helado para cada uno, y Harley estuvo satisfecho de por fin poder sujetar la cuchara y comer el postre de manera normal.
Mientras tanto el hombre mayor se aseguró irse de ahí si volvía a repetirse el comercial pero al final no sucedió.
-Eso sí sería útil que pasara a los mentirosos- comentó Tony mientras la nariz le crecía a Pinocho estando metido en la jaula.
-Entonces pobre de ti- le respondió Harley.
-¿De mí? Yo no miento, de hecho, y no sé porqué, soy muy honesto para el gusto de algunas personas, digo las cosas claras y directas, creo que es otro el que debería de preocuparse- se defendió Tony.
Harley sólo lo miró un momento y su atención volvió a la película, después de todo mencionar las mentiras ya fueran de él o del hombre únicamente formaría una tensión entre ellos por decir lo menos.
Continuaron viéndola hasta que se acabó y entonces comenzó Bambi II, aunque la verdad Tony sólo había visto la primera, pero en cuanto comenzó, durante la escena donde el Príncipe del Bosque hablaba con el señor Búho,  Tony supo que no sería de su agrado.
"¿Una película donde un ciervo niño pierde a su madre y por eso debe irse a vivir con su desconocido progenitor pero éste no quiere y termina marcando un plazo de tiempo para deshacerse de él?, yo pasó" pensó.
-Ok, basta de películas infantiles, mi turno- le dijo a Harley tomando el control y cambiándole.
-Hey- de quejó el niño- esa me gustaba.
-Ya te dejé ver tres, es mi turno y me aferro a ello- contestó Tony cambiando los canales.
Harley no estuvo muy de acuerdo pero al final era la televisión del hombre por lo que no dijo nada.
-Me habías dicho que no te gusta la televisión, ¿por qué el problema justo ahora?- preguntó Tony después al ver al niño con expresión aburrida mientras veía los diferentes canales pasar.
-Dije que me gustaban algunas cosas, y veía todo eso cuando era pequeño, además... no tengo nada más que hacer- respondió, omitiendo decir que un factor por el que terminaba disfrutando ver películas o televisión era la compañía que tuviera.
Al final Tony terminó dejando una película que no había visto, Furia de Titanes, e iba pintando una buena historia, más que nada por el hecho de que no era una película infantil, hasta que el protagonista resultó tener problemas con su padre, Zeús, por haberlo abandonado y tratar mal a los mortales, con ello matando al único hombre que reconocía como padre por haberlo criado, mientras Zeús parecía querer la aceptación de su hijo.
"¿Por qué a mí?" pensó.
Iba a cambiarle a otra cosa pero Harley comenzó a contar la historia de los dioses griegos y otras criaturas mitológicas, sin hacer énfasis en ningún momento de los problemas paternales que tenían los semidioses, así que terminó dejándole escuchando los relatos que el niño orgullosamente había memorizado en la escuela.
Al terminar la película Harley fue a comer algunas galletas como cena y al volver se unió a Tony para ver un programa donde varias personas en equipos competían para hacer robots u otras máquinas sencillas, y entre ambos comenzaron a discutir los errores de los equipos, las cosas que pudieron haber hecho mejor y Tony terminó también explicándole algunas cosas al niño y corrigiéndolo en lo que estaba equivocado, encontrando la actividad bastante entretenida, más porque Harley no se empeñaba en tener razón en sus malas conjeturas, sino que aceptaba ser corregido y se veían en su mirada atenta y sus preguntas su intención de adquirir conocimientos.
De rato, y Tony sabía que por una especie de burla por parte del niño, terminaron viendo MasterChef, más que nada divirtiéndose con los regaños que recibían los participantes.
Entonces de pronto Tony sintió cierto peso caer sobre su hombro.
Harley ya llevaba rato cabeceando pero aún no quería terminar su día de ver la televisión con Tony, así que desistía de ir a dormir pero al final cerró los ojos y aunque estaba a cierta distancia del hombre, al momento de que su cuerpo cayera de la cintura para arriba, su cabeza terminó estando en el hombro del Mecánico sin que él se diera cuenta.
Tony se quedó quieto unos segundos viendo de reojo el revoltoso pelo rubio sobre él y después sacudió el brazo nada delicadamente para despertar al niño.
Harley lo hizo de golpe al sentir cómo lo movían y volvió a sentarse.
-Ok niño, hora de dormir, fuera- le dijo Tony viendo en su reloj que ya eran las 12:38 a.m.
-No, estoy bien, sólo cerré mis ojos un momento- contestó el niño soltando un bostezo traicionero.
-Ajá, sobre mí, y me encanta mi espacio personal, así, arriba, ya- contestó Tony señalando el cuarto.
-Pero...
-¿Sabías que esa palabra se inventó como una tortura para los que la escuchan? Shu- lo cortó Tony aún señalando las escaleras.
Harley habría replicado más pero ciertamente ya sentía los ojos muy pesados y estaba seguro que de dormirse de nuevo ya no se despertaría por mucho que lo moviera o gritara Tony, así que se levantó del sillón y se encaminó a las escaleras.
-Buenas noches señor Stark- le dijo al hombre.
-Buenas noches niño- le respondió Tony y regresó a la televisión para cambiar de canal.
Poco después de escuchar el sonido de la puerta de Harley terminó topándose de nuevo con ese molesto comercial.
-J.A.R.V.I.S., ¿Harley ya está dormido?- preguntó.
-Sí señor, se durmió nomás entrar a su cuarto y aventarse a la cama- le informó la IA.
-Ah, que bueno- dijo Tony sonriendo un momento, después añadió borrando su sonrisa de súbito y mirando con seriedad al techo- ahora sí voy a ajustar cuentas contigo, ¿cómo se te ocurrió comprar esas guías para padres que me mencionó Happy?- preguntó enfadado.
-Bueno señor, después de la noticia de la existencia de Harley, ya que mi propósito es ayudarlo en lo que necesita, creía que iba a necesitar ciertos consejos y guías, así que como ya en su momento le comenté descargué todos los artículos de google y youtube que encontré respecto al tema que usted ya sabe y detesta que mencione, pero al ser en su mayoría recomendaciones de otros decidí que era buena idea tener opiniones más profesionales por expertos y psicólogos, y eso se encontraba en los libros que encontré en kindle, que son las guías que el señor Hogan le mostró- se explicó J.A.R.V.I.S. tranquilamente como si no se diera cuenta del tono molesto y reclamador de Tony.
-Ay J.A.R.V.I.S., ¿pero cómo se te ocurre?, ya te había dicho que no quería saber nada de esas guías y tutoriales- recriminó Tony.
-Y obedecí lo que me ordenó señor, sólo que usted me dio la orden de no hablar de las guías cuando ya las había comprado y descargado, pero por eso no le especifiqué nada más- explicó J.A.R.V.I.S.
Tony rodó los ojos, considerando seriamente hacerle algunas modificaciones a J.A.R.V.I.S. para que no fuera tan acomedido en ciertos asuntos.
-Bueno, pues ahora me vas a hacer el favor de borrar todas esas guías, sean compradas, descargadas, robadas, en video, documento, inglés o español vas a borrarlas todas y los rastros de que las obtuviste y de cómo lo hiciste, gracias a tu acción Happy terminó viéndolas y no necesito otro error como este- ordenó.
-Bien señor, como usted ordene- contestó la IA.
-Y otra cosa J.A.R.V.I.S., no vuelvas a poner una llamada en alta voz si no te lo indico muy y total específicamente antes, ni por tu reproductor ni por mi celular o radio, mucho menos delante de Harley, lo último que necesitamos es que nos ayudes a tener momentos tensos o incómodos cuando por nuestra cuenta nos la arreglamos bastante- dijo.
-Nota tomada señor- contestó J.A.R.V.I.S.
-Bien- dijo Tony un poco más relajado.
-Pero si me permite señor, tengo una observación que darle- volvió a hablar J.A.R.V.I.S.
-¿Qué?- preguntó Tony no muy convencido de escuchar esa observación.
-Creo que los momentos incómodos entre usted y Harley han ido disminuido notablemente, tal vez no desaparecido del todo según le entiendo, pero los percibo más relajados a juzgar de que ya soportan estar durante horas en la misma habitación o coche- dijo J.A.R.V.I.S.
-¿Te refieres al coche donde nos desviamos y retrasamos y del cual no podíamos salir porque teníamos que llegar a la casa? ¿Y a la habitación de donde no podíamos salir porque no me avisaste que te estaban deshabilitando y una armadura mía se volvió loca lista para atacarnos?- preguntó Tony con sarcasmo.
-No señor, me refiero a esta tarde mientras veían las películas, a anteayer cuando lo estuvo entrenando, y a la tarde mientras jugaron fútbol, sólo que en esa ocasión pasaron el tiempo en un jardín- explicó la IA.
Tony se quedó callado unos segundos.
-Sí, la tensión ha bajado, estamos en un buen punto para soportar vivir juntos, no lo niego, nos soportamos y por eso no necesitamos que se nos pongan situaciones en las que la incomodidad vuelva- terminó diciendo.
-Bueno señor, yo creo que la relación vas más allá de sólo soportar, quiero decir, al menos por Harley me parece, puesto que últimamente cuando usted está fuera y sin verlo debido al trabajo se le nota según mis conocimientos de emociones humanas, un poco triste, principalmente aburrido y solo, pero mientras ha estado con él cambia completamente al niño bromista y alegre que usted ve- le informó.
-Bueno, ya me había dicho que aquí se aburre, conmigo al menos tiene alguien con quien hablar si quiere hacerlo, no le queda de otra- contestó Tony.
-Sí señor, puede ser- coincidió J.A.R.V.I.S., luego añadió con voz pensativa- aunque, me es curioso que Harley nunca disfruta ver la televisión, no más de alrededor de una hora por lo menos y aparentemente sin ganas, pero el día de hoy, precisamente al hacerlo con usted, lo toleró durante casi todo el día, y se veía alegre.
-¿Qué estás insinuando J.A.R.V.I.S.?- preguntó Tony.
-No lo sé en especial señor, sólo hice una observación. He estado concentrándome últimamente en comprender más las emociones humanas, y esa actitud de Harley me pareció algo bueno para observar y aprender, pero hasta el momento sólo he llegado a la conclusión de que le vendría bien tener más actividades con usted durante los días para que tenga con que entretenerse- contestó la especie de mayordomo artificial.
-¿Disculpa?- preguntó Tony con el ceño fruncido- yo no soy una especie de... payaso o no sé qué para entretener al niño.
-No fue eso lo que insinué señor, sólo hago la observación de que Harley deja de estar enfadado cuando está con usted, así que creo que le vendría bien que intentara distraerlo más, no por ser un payaso obviamente, simplemente ofreciendo su compañía, eso sí sé que es algo que todos los humanos necesitan.
Tony se quedó en silencio, meditando las palabras de J.A.R.V.I.S., luego por alguna razón llegó a su mente el momento en que Harley reaccionó de forma desanimada cuando le dijo que iba a trabajar y cuando se vio de la misma manera cuando se negó a jugar con él al fútbol.
El tonto comercial salió de nuevo en la televisión para dar por finalizado el maratón del Día del Padre.
Tony pensó cómo podía hacer para quitar esa fecha del calendario, apagó la televisión y alumbrado por los faroles de su jardín subió a su habitación con una idea en mente.

¡Ey! ¡¿Qué tal?! Como siempre espero que todos estén muy bien y estén pasando un día agradable. 😀
Y tengo que decir que estoy muy orgullosa de mí misma por llevar tres capítulos publicados pronto y casi en la misma semana (no alcancé a terminarlo ayer porque ya me caía de sueño pero subirlo sólo un día después de lo fijo es todo un éxito para mí 😆).
Y pues casualmente en el capítulo anterior se mencionó bastante a Happy enterándose del pequeño secretito de Tony y dicen por ahí que pa' luego es tarde. No sé si sí los tomó por sorpresa o por el asunto con las guías ya lo sospechaban pero sea como sea espero que les haya gustado y pues sí, ya van tres personas que se enteran, sé a quiénes quieren ver ustedes sabiéndolo pero para allá vamos, en un capítulo anterior les mencioné que en estos capítulos íbamos a avanzar un poco en la historia y diría que sí lo estoy cumpliendo jaja.
Como en verdad ya no quiero seguir haciendo desapariciones durante meses prometo traer el siguiente capítulo lo más pronto que pueda pero siendo sincera se me figura un poco más complicado porque van a pasar más cosas que aquí pero igual adelanto que hoy mismo lo empiezo y que lleva por título: "Reemplazo de la atención". ¿A qué les suena? 👀
Por cierto, sí, este capítulo habría quedado mejor en el Día del Padre pero... más vale tarde que nunca, la fecha se presentaba y me pareció divertido hacer énfasis en esto mientras Tony quiere borrar la fecha del calendario jaja.
Por cierto, me decidí a poner la película de Furia de Titanes sólo porque pensé que tenía sentido les llamara la atención verla, y hasta después de haber comenzado reparé en que casualmente también trata el tema de padre e hijo en situación complicada 😂
Muchas gracias por haber leído y por todo el apoyo que le dan a la historia, les deseo una buena noche si lo están leyendo en cuanto lo publico y pues yo me despido hasta la próxima.

                    Yahaira D. G.