"A veces me pregunto cuando duermes: "¿alguna vez estarás soñando conmigo?" A veces cuando te miro a los ojos, pretendo que eres mío todo el maldito tiempo."
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Lia iba corriendo por los pasillos del castillo hacia el patio donde probablemente estaba Cedric, la pelirroja corría mas que feliz porque su padre le había enviado el vestido que le había pedido y no la había defraudado. Al llegar al patio, vio a Cedric junto a Chris debajo de un árbol, ambos hablando. Lia se acercó emocionada.
—¡Chicos! ¡Mi vestido llegó!— exclamó la pelirroja emocionada.
—¿Si? ¿Te lo enviaron?— preguntó Chris.
—Si si si, lo acabo de ver ahorita, pensé que mi padre lo había olvidado o algo así...
—Y justo a tiempo que te lo envió.— dijo Chris.
—Lo sé.— dijo ella tomando asiento junto a ellos. —¿Que hacen?— preguntó.
—Nada, esperamos la hora del almuerzo.— respondió Cedric rápidamente.
—Oh ya... ¿Por qué están tan misteriosos?— preguntó entrecerrando los ojos.
—¿Nosotros? Para nada.— dijo Chris.
—Solo hablábamos... de quidditch.— dijo Cedric, asintiendo.
—¡Oigan!— gritó Chris mirando a Dante y Anya que Justo pasaban caminando por ahí y cuando escucharon el llamado se detuvieron para mirar. —¿Para donde van? ¿Que no piensan sentarse con nosotros o que?
Ambos miraron por unos segundos, Dante miró a Anya y esta le hizo un pequeño gesto con la cabeza diciendo "no".
—Estamos ocupados.— le respondió a Chris. —Ven más tarde con nosotros si quieres.— dijo para darse la vuelta y seguir caminando.
Chris volteó a ver a Lía y a Cedric con el ceño fruncido. —¿Que carajos fue eso?— preguntó.
—lo mismo me pregunto yo... sé que Anya no le habla a Lils pero... ¿es para tanto? ¿Y que hay con la actitud de Dante?— dijo el castaño.
—¿Como que no te hablas con Anya?— le preguntó Chris a Lia.
—Es que... Anya me dijo cosas muy feas sobre Cedric y yo... hace como... un día, si.— dijo ella asintiendo. —Y comenzamos a discutir y ahora no me habla...— Chris frunció el ceño.
Lia también frunció el ceño, desconcertada. —No entiendo qué les pasa. ¿Acaso hicimos algo?
Chris suspiró. —No que yo sepa. Y no entiendo por qué Anya se está comportando así.
Cedric miró en dirección a donde se alejaron Dante y Anya, preocupado. —Deberíamos hablar con ellos más tarde... esto no me parece normal.
Lia asintió. —Tienen razón. No quiero malentendidos, especialmente ahora que las cosas estaban mejorando entre nosotros.
Chris suspiró. —Espero que podamos resolver esto sin que afecte al grupo. No necesitamos más tensiones después de todo lo que pasó con nuestro grupo antes de que ustedes se reconciliaran.
